Versión estenográfica del mensaje de la senadora Ana Lilia Rivera Rivera, presidenta de la Mesa Directiva del Senado de la República, al entregar un reconocimiento a distancia al investigador italiano, doctor Manuel Plana, en el marco de la visita del embajador designado de Italia en México, Excelentísimo Sr. Alessandro Modiano.
En este Recinto solemne, testigo de incontables momentos históricos que han definido el rumbo de nuestra nación, nos encontramos para celebrar un acontecimiento de singular importancia; reconocer la labor del doctor Manuel Plana, distinguido investigador italiano cuya obra ha sido fundamental en la difusión y comprensión de un capítulo crucial de nuestra historia, la Revolución Mexicana de 1917 a 1919; y la vida y legado de uno de sus más emblemáticos protagonistas, el expresidente Venustiano Carranza.
Este acto trasciende las fronteras de un simple reconocimiento, se erige como un símbolo del profundo lazo que une a México y a Italia; dos naciones que este año celebran 150 años de establecimiento de relaciones diplomáticas.
A lo largo de un siglo y medio, nuestros países han construido un vínculo de amistad, cooperación y entendimiento mutuo; cimientos sobre los cuales se ha forjado un vínculo indisoluble.
La labor del doctor Plana, no sólo ha enriquecido el acervo cultural e histórico de México; sino que también ha servido como un faro de conocimiento que ilumina la comprensión de nuestra Revolución en tierras lejanas. Su dedicación y pasión para desentrañar y narrar los eventos que definieron a nuestra nación durante aquellos años, han contribuido de manera significativa a la difusión de nuestra identidad cultural, más allá de nuestras fronteras.
Es menester recordar que la Revolución Mexicana, no sólo fue un conflicto armado; fue un movimiento social y político que transformó nuestra sociedad, redefiniendo los principios de justicia, igualdad y soberanía que hoy rigen a nuestro país. La figura de Venustiano Carranza como arquitecto de la Constitución de 1917, se erige como un pilar de estos cambios, liderando a México hacia una nueva era.
El trabajo del doctor Plana ha permitido que estas verdades no queden relegadas al olvido, asegurando que las generaciones futuras, tanto en México como en Italia y en el resto del mundo; puedan comprender la magnitud de nuestra lucha por la libertad y la justicia social.
Su meticulosa investigación y su capacidad para contar nuestra historia de manera atractiva y accesible, han sido fundamentales en este proceso.
Hoy, al distinguir al doctor Plana, también reconocemos el espíritu de colaboración internacional que caracteriza a la Academia y a la investigación histórica.
La profundidad de sus investigaciones no sólo devela aspectos de nuestra historia a un público internacional; sino que también fomenta un mayor interés y aprecio por nuestra cultura, en Italia y viceversa. Esto demuestra el poder de la historia y la cultura para unir a las personas, trascendiendo fronteras y diferencias.
La distinción que hoy hacemos es un testimonio de la estima y gratitud que el pueblo de México siente hacia el doctor Plana, pero, además, es un símbolo de unión entre dos culturas, dos historias, que aún distintas, encuentran puntos de conexión en su lucha por la justicia, la libertad y la soberanía.
Su obra, doctor Plana, es un puente entre México e Italia, un cordón que nos unirá a través del tiempo y la distancia.
En este 150 aniversario de establecimiento de relaciones diplomáticas entre nuestros países, renovamos nuestro compromiso de seguir fortaleciendo estos lazos, de continuar construyendo sobre el fundamento del respeto mutuo y cooperación que hemos establecido.
La relación entre México e Italia, es un ejemplo de cómo el diálogo y el entendimiento entre naciones pueden florecer; inspirando a otras a seguir este camino, y la contribución del doctor Plana en este entendimiento es inmensurable.
En este día, extendemos nuestro más profundo agradecimiento al doctor Plana, por su dedicación y por ser un embajador extraordinario de la historia y la cultura mexicana. Su legado, doctor Plana, perdurará inspirando a futuras generaciones de investigadores, académicos y sobre todo ciudadanos del mundo, a explorar y valorar el rico y entramado contenido de nuestra historia compartida.
Quisiera concluir, recordando que la historia es el testimonio del pasado, la luz de la verdad, la vida de la memoria, la maestra de la vida, el mensajero de la antigüedad. La obra del doctor Plana encarna estas palabras, recordándonos la trascendencia de mirar hacia atrás para poder avanzar con sabiduría y perspectiva hacia el futuro.
No quiero terminar sin agradecer la férrea voluntad y entusiasmo de nuestro querido compañero, el senador Reyes Flores Hurtado, quien a su regreso de Italia inmediatamente inició los trámites para que este reconocimiento a distancia, porque físicamente ya no pudo ser posible, pudiera hacerse realidad.
Lo trajo como una prioridad, doctor Plana, por toda la inspiración que le creó la investigación que usted ha hecho de nuestra historia.
Aun cuando no está físicamente con nosotros, doctor Plana, hay trabajos que uno realiza toda la vida, pero sus resultados son para la eternidad.
Enhorabuena. Reciba usted un merecido reconocimiento del Senado de la República y del pueblo de México, desde aquí lo abrazamos con el alma.