Versión estenográfica del mensaje del senador Eduardo Ramírez Aguilar, presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado de la República, en la conferencia magistral sobre el “Derecho Humano a la Paz”.
Muchas gracias.
Buenas tardes a todas y a todos.
Es un gusto recibirlos aquí, en la casa del pacto del federalismo mexicano.
Le doy una calurosa y emotiva bienvenida al doctor Carlos Villán Durán, presidente y fundador en Asociación Española para el Desarrollo Internacional de los Derechos Humanos.
El doctor Villán, es un notable promotor de los derechos humanos a nivel internacional, sobre todo del derecho humano a la paz, al que todas las personas aspiramos, por el cual trabajamos y nos esforzamos por alcanzar todos los días.
Su labor en España es de aplaudirse y su trabajo ha sido de mucha ayuda en regiones que históricamente han enfrentado dificultades para consolidar la paz.
Reflexionar, escribir e impulsar un esfuerzo como el que ha hecho el doctor Carlos Villán y su asociación, son un referente que nos obliga a poner la atención que merece, para que todas las personas vivamos en paz.
La paz no es solamente un valor que deba regir las relaciones internacionales. La paz es también un derecho humano del que todas las personas, los grupos y los pueblos, somos titulares.
La paz no es sólo la ausencia de conflictos armados internos o internacionales.
Hacíamos una pequeña reflexión antes de llegar a este recinto -bienvenido, senador Miguel Ángel Mancera, coordinador del Grupo Parlamentario del PRD-, respecto a lo que está aconteciendo en el mundo, el conflicto de Ucrania con Rusia; el conflicto de Israel con los palestinos.
Y algo que me llamó demasiado mi atención, un concepto que manejó el doctor Carlos, que no solamente es hacer la paz, construir la paz, sino debemos blindar la paz.
Y, le dije: ¿Cómo se blinda la paz?
Todos tenemos una responsabilidad, somos titulares, como representantes de los pueblos.
Blindar la paz, significa que un país nació en conflicto, pues no se atrevan a generar o a derramar las bombas atómicas, porque vendría una respuesta por parte del gobierno de Estados Unidos y no lo vamos a contar como planeta Tierra.
Me llamó mucho la atención y les comparto esta preocupación que tiene el doctor Carlos.
Nunca lo había escuchado, “blindar la paz”, me gusta; hay que profundizar más sobre este tema.
Y por ello nosotros como Senado Mexicano nos sentimos muy halagados con su presencia porque su preparación, sin duda, dejará un legado internacional y su preocupación dejará también varios documentos, reflexiones y escritos que van a ayudar tanto al presente como a las próximas generaciones.
Durante siglos los mexicanos y mexicanas hemos luchado por alcanzar y garantizar la paz de nuestra sociedad. Hemos tenido movimientos, conflictos; el más cercano fue el de la Revolución Mexicana, en 1910, se considera que fue también una Revolución cruel, donde hubo mucho derramamiento de sangre.
Y hemos tenido en el sur de México conflictos armados: en Guerrero, en Chiapas, en el 94, y hemos sorteado y hemos construido esa paz tan anhelada. Pero siempre está presente.
Ahora nos acompañan otro tipo de violencia, doctor Carlos, porque se genera un enfrentamiento en distintos estados de la República, donde el conflicto ahora es entre los grupos de la delincuencia y existe una zozobra y un miedo en algunos lugares de México por este tipo de violencia que termina por generar una intranquilidad dentro de nuestros hogares mexicanos.
Quisiera agradecerle y compartirle una frase del presidente Juárez, lo dijo frente al Congreso de la Unión en una de sus intervenciones, y habló sobre la paz, y dijo:
“La paz es la primera necesidad del pueblo. Por eso mi único fin ha sido proponer lo que creo mejor para los más altos intereses del pueblo, que son afianzar la paz en el porvenir y consolidar nuestras instituciones”.
Nosotros trabajamos todos los días para generar la paz desde nuestra trinchera, desde nuestro espacio legislativo, pero sí considero que la paz es lo más importante para el pueblo, es la bandera más importante que debemos comprometernos en los próximos días, meses o años.
Sea usted bienvenido, y que esta Conferencia que usted imparte sea de mucho provecho para los estudiosos de la paz y para quienes nos ven también en el Canal del Congreso, o nos siguen a través de las redes sociales.
Sea bienvenido, doctor Carlos, a su casa, la Casa del Federalismo Mexicano.