Versión estenográfica de la Primera Entrega de Reconocimientos a Leyendas del Futbol, encabezada por el senador Eduardo Ramírez, presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado de la República.
SENADOR MIGUEL ÁNGEL MANCERA: Muy buen día a todas y a todos ustedes.
Quiero agradecer, en primer término, la convocatoria y la invitación de mi querido amigo, el senador Eduardo Ramírez, presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado de la República, para formar parte de este importante acto de reconocimiento de las leyendas de nuestro fútbol mexicano.
Dar la bienvenida a esta Cámara Alta al presidente de la Liga MX, a Mikel Arriola.
Por supuesto, saludar a Leonardo Cuéllar, al gran Leo Cuéllar, y reconocer todo lo que significa su persona y su personalidad.
A Adrián Chávez, gran portero mexicano, a quien también saludamos.
Y, con ellos, saludo a todos los grandes futbolistas. A todas las personalidades que hoy nos acompañan, que serán reconocidos en este importante evento.
Es, sin duda, un evento que, con la participación de un joven que hoy está aquí, de Faruk, que es un motor importante aquí en el Senado de la República, a quien también saludo y reconozco por su participación, porque es un joven muy inquieto y siempre está pensando en algunas otras perspectivas que a veces en el día a día de la actividad legislativa se nos pasan a nosotros.
Así es que, muchas felicidades, Faruk, también por todo lo que implica la logística de este importante reconocimiento.
Fíjense que Juan Villoro decía, y decía bien, el fútbol es un estado de ánimo, y hoy en nuestro estado de ánimo estamos muy contentos. Muy contentos de que estén aquí, muy contentos de recibirlos, de compartir con ustedes esta ocasión y, por supuesto, de reconocer lo que se ha dicho y se ha dicho bien, que el deporte y especialmente el deporte en conjunto nos conjuga y nos convoca, y a veces cambia el estado de ánimo.
Puede ser que haya un estado de ánimo a veces de efervescencia y que las noticias no sean muy buenas en los contextos políticos; pero, cuando juega el equipo al que le vamos y gana, eso cambia todo. Eso nos llena, por supuesto, de gusto.
Hace convocatorias, porque reúne a la familia también para ver encuentros.
Reúne a los amigos y logra a veces convocatorias que no logramos nosotros cuando va a haber un partido de esos clásicos, llamados clásicos, en donde propios y extraños se reúnen para disfrutar de eso que es el fútbol.
Solamente ustedes, los que han estado en la cancha, saben lo que significa verdaderamente el esfuerzo deportivo y atlético que han realizado y realizan.
Yo tengo el gusto de convivir en la otra actividad deportiva con el “Pareja” López, que está aquí también, y la verdad es que es impresionante su capacidad física, que eso solamente lo da la formación que tienen todos y cada uno de ustedes.
Son atletas, son atletas de tiempo completo, porque, cuando están entregados a un equipo, no hay descansos.
Se dice mucho que hay algunos tiempos de esparcimiento, pero estoy convencido, porque los conozco y conozco a varios futbolistas, eso que se forja, eso no se olvida.
Hoy estamos convocados aquí para reconocerlos, para reconocer toda su tarea, toda su labor, los goles históricos, las intervenciones históricas, la participación en la Selección Nacional, en equipos de trascendencia nacional.
Pero lo más importante es para reconocer a cada uno de ustedes lo que han significado en inspiración para muchas generaciones.
Hoy mis hijos tienen la inspiración de muchos futbolistas, de futbolistas de actualidad. Así como yo tuve la inspiración en varios, varios de los que aquí veo, de los que hoy se reúnen.
Por eso es un gran acierto lo que realiza mi querido Presidente de la Junta de Coordinación Política, que además es un político de tiempo completo.
Así como ustedes están en el fútbol de tiempo completo, él está en la política de tiempo completo y hace buena política.
Porque han de saber que somos de grupos parlamentarios distintos. Él está en Morena, nosotros estamos en el PRD.
Pero la verdad tengo el gusto de decirle hermano, y se lo digo así y se lo digo hoy aquí frente a ustedes, porque es un político que sabe hacer eso, lazos de amistad. Y eso es lo que al final tienen cada uno de ustedes, que tienen una hermandad con el fútbol.
Nos da mucho gusto recibirlos hoy aquí y poder reconocer todo ese prestigio.
Y a las personalidades que también nos acompañan, que no están directamente participando en los partidos de futbol pero sí están participando en el fútbol algunos empresarios destacados que están acompañándonos al propio presidente de la Liga, también muchas felicidades porque el fútbol sigue siendo un orgullo para nuestro país, para todas y todos los mexicanos.
Felicidades.
Enhorabuena.
SENADOR EDUARDO RAMÍREZ: Es un alto honor para nosotros reconocerlos en este Senado, su trabajo, su trayectoria, porque sin duda han sido la leyenda del futbol mexicano, que han inspirado a millones de niños, millones de jóvenes y que forma parte de nuestra vida cotidiana, de nuestras emociones y también de las tristezas cuando no se triunfa en el equipo al que uno le va.
Pero también se viven las alegrías de manera plena y quedamos impregnados con ese espíritu futbolero que tiene México.
Este reconocimiento lo hemos hecho con varias disciplinas, pero le decía a Mikel que le dimos un reconocimiento a las primeras campeonas en los años 70’s, que fueron a Inglaterra y trajeron el segundo lugar internacional, y fue el primer equipo femenil. Y me da mucho gusto saber que don Leonardo Cuéllar haya sido el impulsor principal de esta disciplina para las mujeres.
Abrirles espacio a las mujeres, es abrirle el espacio a la vida. Usted ha cumplido cabalmente con esa responsabilidad; siéntase muy contento.
Siempre que tenemos la oportunidad de impulsar este tipo de actividades, lo hemos hecho con un gran amigo, al que yo le tenía y le sigo teniendo mucha admiración por su preparación académica, como abogado, como un gran parlamentario, como un buen jurista, al senador Miguel Ángel Mancera. Yo te agradezco mucho el acompañamiento y todo lo que hemos hecho.
Ya me comprometí con el amigo Mikel, que vamos a darle un reconocimiento a los goleadores de la leyenda del futbol mexicano. Entonces, será también algo coordinado aquí con el buen Faruk, que siempre tiene esa disposición.
Y, hace un momento estaba, en la Junta de Coordinación hay un pequeño patio y ahí instalamos una portería, y Adrián Chávez solamente lo veía en la televisión; y decía qué buen portero es Adrián, primero como portero del América y después como portero de la Selección Mexicana.
Y le preguntaba, debo reconocer que no soy muy diestro en esta materia, pero leí a Carlos Monsiváis y decía que el futbol mexicano era el deporte más democrático, porque no excluía a nadie, a ningún niño, a ningún joven, bajo cualquiera que fuera su condición social, económica, y que incluso se podía utilizar un artefacto como pelota en la calle. Y es cierto, ¿cuántos de nosotros no hicimos eso?
Le decía a Adrián: si yo tuviera que ubicarme en el contexto del futbol, quizá no sería goleador, quizá no sería delantero, no sería medio, tampoco portero: me gusta ser la defensa. Creo que ese es el lugar de mi vida, ser la defensa, y creo que esa parte del futbol se vive con tanta pasión.
Y que ustedes sepan que este Senado los reconoce con mucho cariño, con disposición republicana; porque ustedes han construido el México que nosotros somos, el México al que vamos a heredar a nuestros hijos, a nuestras hijas; y lo hacemos desde el Senado porque el reconocimiento, como lo dice el senador Mancera, alimenta el espíritu, el alma, alimenta nuestro buen nacer.
Hay que reconocernos en vida, en vida. En vida, hermano, dicen allá en mi tierra.
Entonces, decirles que este espacio fue creado esta mañana, este homenaje, para todas y para todos ustedes.
Felicidades, enhorabuena y quienes crecimos escuchando la narrativa del futbol los días domingo, había un periodista deportivo, más bien narrador, “el perro”, y decía: “aficionados que viven la intensidad del futbol”, entonces ya era domingo.
¡Aficionados que viven la intensidad del futbol! Felicidades a todos.