Versión estenográfica del mensaje de la senadora Ana Lilia Rivera Rivera, presidenta de la Mesa Directiva del Senado de la República, en la inauguración de la exposición “Artesanías de indígenas triquis de Oaxaca”. 

Buenos días. 

Saludo con mucho cariño y respeto, a las mujeres triquis desplazadas de Oaxaca durante tantos años, lejos de la tierra que nos vio nacer. Bienvenidas al Senado, y discúlpenme senador que hoy no sean ustedes los primeros, porque siempre deben ser primero los que nunca han estado primero. 

Saludo con mucho respeto a quien ha tenido esta gran intención y voluntad de ayudarlas, al senador Emilio Álvarez Icaza. Y con mucho cariño al senador Gustavo Madero. 

Queridas amigas, amigos, artesanos, artesanas que hoy visitan el Senado de la República, nos sentimos realmente conmovidos, ilusionados y emocionados por su presencia. Ver aquí tantas mujeres; gracias, Sergia, por hacer realidad la organización, el alzar la voz, el mantenerse unidas y el tener una actividad que les permita tratar de tener bienestar para su familia y poder hacer realidad que están en el Senado de la República ofreciéndonos lo que con su arte, con sus manos tejen y construyen todos los días. 

A veces uno no valora lo que significa cada una de estas piezas que ustedes hoy nos traen en exhibición; pero me imagino qué piensan ustedes cuando están trabajando, cuántas horas de trabajo se lleva cada una de esas piezas que hoy ustedes ofrecen; y seguramente están recordando la familia, los hijos, las cosas que les dan alegría, las cosas que les dan tristeza, porque cada artesanía lleva un pedacito del alma de todas y de todos ustedes.  

Y eso no tiene precio, por eso invito y voy a invitar ahora en el pleno, a que vengan a darse una vuelta los senadores y sus equipos y que algo se lleven, para ayudar a quienes hoy nos visitan. 

Nos da mucho gusto recibirlas. Las abrazamos con el alma, muchas gracias por esta gran intención, querido senador, y vamos a darles un aplauso bien fuerte. 

Muchas gracias.