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Versión estenográfica de la comparecencia de la embajadora Alicia Bárcena Ibarra, designada secretaria de Relaciones Exteriores por el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, ante la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado de la República. 

SENADOR HÉCTOR VASCONCELOS: Señora presidenta de la Mesa Directiva del Senado. 

 

Embajadora Alicia Bárcena, doctora Laura Carrillo, embajador Joel Hernández; les damos la más cordial bienvenida a esta reunión de trabajo de la Comisión de Relaciones Exteriores. 

 

Quisiera solicitar a todas y todos los presentes, ponerse de pie para que pueda tomar protesta a las y el compareciente. 

 

Señoras, señores ¿protestan ustedes decir verdad en la información que expongan ante esta Comisión y también en las respuestas a las preguntas que les formulen las y los senadores? 

 

TODOS: ¡Sí, protesto! 

 

SENADOR HÉCTOR VASCONCELOS: Muchas gracias. 

 

Sírvanse tomar asiento. 

 

Nuestra presidenta desea enviar un saludo a todos los presentes. 

 

SENADORA ANA LILIA RIVERA RIVERA: Muchas gracias. 

 

Buenas tardes senadoras, senadores.  

 

Con gran beneplácito recibimos en el Senado de la República a la embajadora Alicia Bárcena Ibarra, designada secretaria de Relaciones Exteriores. Una mujer con una amplia trayectoria y reconocimiento en el Servicio Exterior Mexicano, cuyo trabajo al frente de representaciones de México como de organismos internacionales, la distinguen como referente de la diplomacia de nuestro país. 

 

Sea bienvenida, embajadora.  

 

No quería yo dejar pasar este día, en esta comparecencia. Darle la bienvenida a usted y a quienes la acompañan, y agradecer todo lo que ha hecho por nuestro país. 

 

Muchas gracias y enhorabuena.  

 

Reconocer el trabajo del senador Vasconcelos al frente de esta Secretaría, quien desde días antes estuvo preparando con mucha anticipación esta reunión para que todo fuera y salga como debe ser, y como se lo merece usted y nuestro país. 

 

Gracias a todos. 

 

Bienvenidos. 

 

SENADOR HÉCTOR VASCONCELOS: Enseguida, invito a la embajadora Bárcena para que presente su Plan de Trabajo ante esta Comisión. 

 

EMBAJADORA ALICIA BÁRCENA IBARRA: Muchas gracias. Muy buenas tardes. 

 

Distinguida senadora presidenta, Ana Lilia Rivera Rivera. Muchas gracias, de verdad, su presencia me honra, nos enaltece a todos nosotros. 

 

Distinguido senador Héctor Vasconcelos, presidente de la comisión de Relaciones Exteriores. 

 

Distinguidas senadoras secretarias, Nadia Navarro y Cora Cecilia Pineda Alonso. 

 

Distinguidas senadoras y senadores integrantes de esta Comisión de Relaciones Exteriores. 

 

Comparezco ante ustedes, en cumplimiento del mandato constitucional para presentar el plan de trabajo en materia de política exterior del Gobierno de la República, y el interés jurídico sobre mi permanencia en el cargo. 

 

Ello, en cumplimiento de los requisitos constitucionales y de ley para el cargo que exige. 

 

Es un inmenso honor presentarme ante ustedes en esta jornada, y lo hago con un enorme sentido de responsabilidad y de compromiso. 

 

El pasado 13 de junio, el presidente Andrés Manuel López Obrador, me honró con el encargo de liderar la Secretaría de Relaciones Exteriores. 

 

Me convocó a esta hermosa tarea de representar la voz de México en el mundo y dar liderazgo a una de las instituciones más notables de nuestro estado. 

 

La herramienta efectiva y bicentenaria de nuestra presencia en el concierto de las naciones, cuyos cimientos han sido labrados por algunas de las mentes más lúcidas de nuestra Patria. 

 

La Constitución y las leyes exigen que, para materializar este mandato y este nombramiento, se requiere la ratificación de esta soberanía. 

 

Es este un testimonio de la voluntad de los constructores del Estado Mexicano, por hacer explícito el indispensable espíritu de convergencia entre los poderes públicos que emergen del voto popular, en la conducción de un área tan sensible para nuestro proyecto compartido de nación, como es la política exterior. 

 

Tal y como lo establece el artículo 76 de nuestra Constitución, esta Soberanía, entre otras facultades, tiene la del análisis de la política exterior. 

 

Esta sesión y sus atribuciones, subrayan una condición esencial en la identidad de nuestro quehacer internacional que ha sido, es y será una política de Estado. 

 

La nuestra, es una voz en el mundo que representa al conjunto del interés nacional. La protección, atención y servicios que son los bienes públicos que ofrece esta Cancillería, alcanzan a cada mexicana y a cada mexicano que así lo requiera, sin discriminación alguna.  

 

Dirigir esta Cancillería es labor colectiva, es una tarea enorme, inabordable sin la compañía y el compromiso de un equipo sólido. 

 

Por eso no vengo sola, vengo con muchos colegas de la Secretaría de Relaciones Exteriores. 

 

En particular, me acompaña la subsecretaria Laura Elena Carrillo, Subsecretaria normada, designada de América Latina y el Caribe; y el subsecretario para Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos, Joel Hernández García, quienes también están sujetos a comparecer ante esta Soberanía. 

 

Este espacio entraña un valor insustituible, y quiero subrayarlo. Esta es una institución trascendente, hija de la vocación republicana de generaciones de compatriotas que forjaron con esfuerzo las grandes bases de nuestra democracia. 

 

Me presento con respeto ante ustedes, los representantes de la ciudadanía soberana, que es el reflejo fiel de la diversidad de nuestra patria. 

 

Portavoces son ustedes de los anhelos, causas y necesidades del pueblo que decidió, por cierto, transformar su destino. 

 

Nuestra última cita fue hace menos de un año, cuando ustedes me dieron el honor y su apoyo para fungir como embajadora de México en Chile. 

 

Hoy, de cara a estas nuevas responsabilidades, espero contar con su apoyo para cumplir con este encargo en el que me ha honrado el presidente Andrés Manuel López Obrador. 

 

Es la recta final de esta Administración y, por lo tanto, como dicen, no soy embajadora de carrera, soy embajadora a la carrera, porque en este año deberemos consolidar el trabajo de la Secretaría de Relaciones Exteriores de manera pragmática y concreta. 

 

Tenemos que afianzar lo construido y sentar las bases de la siguiente etapa de la transformación de la vida pública del país, promoviendo los intereses de México y de sus ciudadanos, como brújula exclusiva. 

 

Para ello, la Cancillería desplegará una diplomacia activa que se articula después de tres ejes centrales. 

 

En primer lugar, una diplomacia cercana, incluyente y al servicio de la gente. 

 

En segundo lugar, una diplomacia congruente con los principios de la política exterior y con la honrosa tradición diplomática de México. 

 

Y, tercero, una diplomacia contundente, oportuna y eficaz. 

 

En el primer eje, diplomacia cercana, en un proceso de transformación como el que atraviesa México, es crucial una diplomacia cercana a la gente; una que pueda trasladar el trabajo diplomático, sus resultados y sus beneficios, de manera concreta a la ciudadanía. Con acciones que mejoren de forma palpable, la calidad de los servicios que ofrece la Cancillería. 

 

Mi objetivo es acercarnos a la gente, luchar por cerrar las desigualdades, las asimetrías entre países, por más justicia, por el respeto a los derechos humanos, por la igualdad de género. 

 

Para atender a nuestros connacionales y avanzar los intereses de nuestro país, contamos con 80 embajadas, 72 consulados, adicionales a las que están en las embajadas; y todas ellas prestan servicios de asistencia y protección a las comunidades y a los mexicanos en el exterior. 

 

Seis misiones permanentes ante organismos internacionales y 3 oficinas de enlace. 

 

Para poder avanzar en este camino y profundizar la huella diplomática de México, es necesario contar con una Cancillería robusta, con una Cancillería que tenga la capacidad de enfrentar los retos y necesidades que plantee el escenario mundial actual. 

 

Una de mis principales misiones va a ser y será la defensa de los intereses de México, y de la comunidad mexicana en el exterior; porque cerca del 10 por ciento de nuestra población vive en el extranjero, casi 12 millones de paisanos viven en Estados Unidos. Para poder calcular la dimensión de esta diáspora, simplemente la comparo con la población que tiene, por ejemplo, el Estado plurinacional de Bolivia. 

 

Entonces, hemos dicho ya que efectivamente, se acerca un ciclo electoral en nuestro vecino del norte, muy difícil, y sabemos muy bien los riesgos que entraña el uso faccioso por parte de irresponsables, de aspectos de nuestra relación bilateral, que se convierten en munición de provocadores. 

 

Se abre la temporada alta de los mercaderes del miedo, los que apuestan al aplauso fácil, sirviéndose de la xenofobia, el racismo y la discriminación. Los oportunistas de la ignorancia que a cada dificultad imputan siempre la responsabilidad a otros. 

 

Sepan que nuestra Cancillería estará atenta y firme en la defensa de México y nuestros connacionales, aquí y allá. Nuestra mano cordial, siempre extendida para cultivar la mejor relación con el vecino que comparte 3 mil 152 kilómetros de la más extensa de nuestras fronteras. 

 

Nuestra mano firme también en la protección de los intereses de México, de las y los mexicanos. Ofrecemos colaboración y amistad, pero exigimos con firmeza reciprocidad y respeto. 

 

Las comunidades mexicanas en Estados Unidos y en el exterior, son una fuente de profundo orgullo. Las y los trabajadores inmigrantes, aportan casi 9 mil 800 millones de dólares en impuestos que pagan cada año; y los indocumentados aún mucho más. 

 

Por eso, vamos a desplegar todas las herramientas de nuestra red de 52 oficinas consulares en Estados Unidos, que es la red más grande consular de cualquier otro país del mundo; y en unas semanas que tendremos el privilegio de inaugurar la número 53 en Nueva Jersey. 

 

Hay 38 millones de personas mexicanas de primera, segunda y tercera generación en Estados Unidos y Canadá. La labor entonces, para atender estas comunidades mexicanas, es titánica y se apoya también, por cierto, en el Instituto de los Mexicanos y Mexicanas en el Exterior; con sus ventanillas comunitarias que ofrecen salud, deporte, educación, inclusión financiera, desarrollo económico y cultural. 

 

Por eso, fortalecer el vínculo con nuestras comunidades en el exterior es primordial, así como su participación cívica para que puedan ejercer sus derechos a plenitud. 

 

Nuestra atención en el exterior se complementa, por cierto, con la atención en nuestro territorio de 44 oficinas de pasaportes, que tienen una capacidad de atención diaria, de 20 mil 800 citas. 

 

Tengo una aspiración, una gran aspiración que espero que todos me ayuden a cumplir, y es que la Cancillería sea una eficaz ventanilla de atención al público y que logremos superar, efectivamente, los déficits en velocidad de respuesta, simplificación de trámites, capacidad de atención y calidad en el trato. 

 

Se nos demanda legítimamente un mejor servicio en la prohibición de los bienes públicos que están bajo nuestra responsabilidad; pero persisten los retrasos e insuficiente apoyo ante las necesidades de demasiados compatriotas. 

 

Por eso, comprometo todos mis esfuerzos en esta materia, para que el rostro de la Cancillería sea amable, eficaz, resolutivo, expedito, digno y respetuoso. 

 

En relación a la política exterior feminista e incluyente. El día de hoy me dirijo a ustedes, honorables senadores y senadoras, pero también me dirijo a las niñas y adolescentes y jóvenes mujeres de nuestro país; para enviar un mensaje de aliento y de ejemplo de que sí es posible para nosotras ocupar los más altos puestos y espacios en nuestro Gobierno y representar a México en el mundo. 

 

Aquí cito la inolvidable frase de Olga Sánchez Cordero: “el futuro será feminista o no será”. 

 

Hace 40 años se acuñó un término, que se llama “el techo de cristal”, como la barrera invisible que enfrentamos las mujeres en nuestras carreras profesionales. Muchas grandes mujeres han allanado este camino diplomático para permitirme a mí estar aquí ante ustedes y pueda yo decir que si ustedes tienen a bien ratificarme, seré la cuarta mujer en la historia de México en ejercer el cargo de secretaria de Relaciones Exteriores. 

 

A tres años de que México adoptara una política exterior feminista, esta política se ha instalado de manera transversal en mi oficina, y el camino es irreversible. Las mujeres no solamente queremos una participación más activa en los puestos de la Cancillería, en los consulados y embajadas; sino que también queremos la perspectiva de género en todos los tratados, en todos los acuerdos, en todos los foros. 

 

Estamos rompiendo techos de cristal y en cada paso que damos al frente, dejamos orgullosos una estela de fragmentos patriarcales y se produce un avance civilizatorio. 

 

Esta es una labor que inicia con la Secretaría de Relaciones Exteriores, paritaria; una Secretaría libre de violencia y segura. También debe de ser un espacio seguro para la comunidad LGBTIQ+; acciones importantes se han emprendido en este sentido; la Red Consular es zona segura, registra matrimonios para todas las personas sin importar su orientación sexual, desde 2018; expide actas de nacimiento por reconocimiento de identidad de género desde 2022; y pasaportes no binarios, desde 2022 también. 

 

El segundo eje es la diplomacia congruente con los principios de la política exterior, cimentada sobre la honrosa tradición diplomática de México.  

 

Y aquí quiero decirles que la inteligencia fecunda de Juárez, necesitó apenas 15 palabras para enunciar los rasgos fundamentales de nuestra mirada del mundo. La memorizamos desde la infancia, decora en el Congreso como recordatorio permanente y están grabadas también en las paredes del vestíbulo de las Naciones Unidas. 

 

En esa sede central de Nueva York se lee: “Entre los individuos como entre las naciones, el respeto al derecho ajeno es la paz”. Es la raíz orgullosa del legado de México en el concierto de naciones. 

 

México siempre ha estado de lado correcto de la historia. Nuestra vocación pacifista, humanista y multilateral, nos ha guiado bien en pos de las mejores causas de la humanidad.  

 

Nuestra honrosa tradición diplomática, ha luchado mucho por llevar adelante un mensaje de paz. 

 

La diplomacia mexicana tiene un largo camino recorrido en la construcción de la misma. 

 

Muestra de ello, son las grandes contribuciones internacionales de México al Sistema de las Naciones Unidas, como socio fundador en 1945. 

 

Al Grupo de Contadora para la pacificación de Centroamérica en el 83; al Tratado de Tlatelolco en 1967; y más recientemente en la lucha contra armas pequeñas y ligeras. 

 

No es coincidencia que el primer Premio Nobel que fue otorgado a un mexicano, fuera al diplomático Alfonso García Robles en 1982.  Haya sido, pues, ese reconocimiento a las acciones de paz, al liderazgo por proscribir las armas nucleares del continente latinoamericano. 

 

Qué cosa más actual.  

 

Por eso México debe seguir siendo un facilitador del diálogo, constructor de la paz, el papel mediador de México en los procesos de Colombia y Venezuela, que seguramente Laura Elena Carrillo nos contará un poco más. 

 

Nuestra postura ante el conflicto de Rusia-Ucrania es clara, eh. México condena la invasión rusa por ser contraria a la Carta de las Naciones Unidas; pero congruentemente también señala México los peligros de promover una carrera armamentista que escala el conflicto. 

 

Tenemos que dejar de hablar de guerra y empezar a hablar de paz.  

 

En esta coyuntura, México aspira a ser una voz constructiva.  

 

La victoria que nos motiva es la vida.  

 

Haremos todo lo que esté a nuestro alcance para que se imponga el diálogo y la solución pacífica del conflicto. 

 

Por eso, sin complejos, por convicción, los instrumentos de nuestra política exterior estarán al servicio de una paz justa, urgente y duradera. 

 

Estos son los cimientos en las que se apoyan las mejores tradiciones de nuestra Cancillería. Son los rasgos que nos heredaron Fabela y Estrada; La impronta, de Gilberto Bosques. Esta vocación irrenunciable por la paz. 

 

En otras latitudes, también observamos con preocupación los retrocesos democráticos que se experimentan a nivel regional e internacional, y el consecuente quebranto a los derechos humanos. 

 

En Chile aprendí que el autoritarismo conduce a la violación sistemática de los derechos humanos, por lo que México debe afirmar siempre el irrestricto respeto y defensa de los derechos humanos en todo lugar, en todo momento; no importa el contexto político. Nunca más a la violación de los derechos. 

 

México está sembrando paz y construyendo oportunidades en la región. 

 

La Cooperación Internacional para el Desarrollo es un arma muy eficaz para una herramienta transversal para resolver problemas. 

 

Nuestro país ha transformado su papel tradicional de cooperación para convertirse en uno de los actores más relevantes en términos de impacto regional. 

 

Por primera vez, México implementa proyectos sociales en otros países, y directamente a países vecinos, con resultados tangibles, atacando las causas estructurales de la migración y la pobreza. 

 

Iniciativas como Sembrando Vida y Jóvenes Construyendo el Futuro, que se ejecutan en Centroamérica y el Caribe, con resultados contundentes; 41 mil personas se han beneficiado. 

 

Y en El Salvador y Honduras, en las que opera MEXIT, se han experimentado decrementos de 64 por ciento y 40 por ciento en flujos migratorios. 

 

Es una gran responsabilidad encabezar la Secretaría de Relaciones Exteriores, en un momento en que volvemos la mirada al sur.  

 

No olvidemos que somos parte de la patria grande de América Latina. 

 

Para lograr una región progresista, con vocación de igualdad y de justicia social, México busca una transformación regional profunda, dejando atrás modelos políticos, económicos y de desarrollo que profundizaron la desigualdad social y derivaron en flagelos, como la inseguridad, el autoritarismo, la desconfianza en las instituciones, modelos industriales extractivos y depredadores de nuestros recursos naturales. 

 

Para lograrlo, México promoverá encuentros de alto nivel entre nuestros gobiernos, en materia de políticas con contenido social. 

 

El presidente López Obrador viajará a Colombia y a Chile para reunirse con los presidentes Gustavo Petro y Gabriel Boric. En Colombia para atender una cumbre de drogas, con una mirada distinta, una mirada de salud pública y de prevención; y en Chile, para participar en la conmemoración de los 50 años del golpe de Estado. 

 

Para lograr una región más integrada, qué duda cabe que México jugó un papel central en 2020, cuando logró revitalizar la CELAC, como el espacio más representativo y dinámico de diálogo y concertación, para hacer frente a los desafíos como región. 

 

Promovió proyectos concretos, como la autosuficiencia sanitaria y regional, la seguridad alimentaria con resultados que hoy se están implementando. 

 

La Escuela Regional de Regulación Sanitaria, el Fondo de Adaptación Climática, la Agencia Latinoamericana y Caribeña. 

 

Y yo quiero hacer aquí un reconocimiento a mi predecesor Marcelo Ebrard, quien impulsó esta iniciativa con mucha fuerza. 

 

México pertenece también al Caribe y ha logrado apoyar a países caribeños, particularmente durante la pandemia.  

 

Y, en el caso de Haití, estamos participando activamente en el fortalecimiento de la Policía Nacional de Haití, la capacitación de sus fuerzas armadas con proyectos de cooperación; porque la tensión ha escalado y seguimos atentos a los acontecimientos. 

 

Estamos también haciendo un seguimiento a las propuestas que se han hecho en el Consejo de Seguridad, para autorizar una fuerza multinacional. 

 

Pero, ¿dónde está uno de nuestros desafíos? Pues en América del Norte. Porque tenemos frente a nosotros una inigualable oportunidad geopolítica para consolidarnos como la región más competitiva del mundo. 

 

La realidad norteamericana trasciende nuestras fronteras y la relación con Estados Unidos y Canadá se debe basar en la cooperación y el respeto mutuo, abordando cuestiones bilaterales y trilaterales. 

 

Con Estados Unidos tenemos una de las relaciones más complejas, más complejas, pero que hoy está pasando por un buen momento. 

 

México se ha convertido en el primer socio comercial de Estados Unidos. Se comercializa 1.5 millones de dólares por minuto. 

 

En este sentido, tan solo este semestre, el comercio entre los dos países subió a 400 mil millones de dólares, y la inversión que llega hacia nuestro país, fue de 12 mil 500 millones de dólares; 43 por ciento del total de las inversiones que recibe México provienen de Norteamérica. 

 

Somos socios constructivos, ¿qué duda cabe? Pero también hemos alzado la voz ante situaciones que contravienen el espíritu colaborativo que nos vincula; como la reciente instalación de las boyas en el Río Bravo en Texas, o la utilización demagógica y electoral del tema migratorio. 

 

Desde la renegociación que dio luz el Tratado de Libre Comercio en 2018, se han fortalecido mecanismos de diálogo, qué duda cabe. 

 

Tenemos una nueva arquitectura institucional; entre otras, tenemos el Diálogo Económico de Alto Nivel, que copreside la Secretaría de Relaciones Exteriores junto con la Secretaría de Economía y de Hacienda. El Entendimiento Bicentenario, que sustituye a la Iniciativa Mérida y que abarca justicia, seguridad y salud pública; y dentro de este está el Comité de Cooperación Binacional. 

 

El Grupo de Alto Nivel de Seguridad, copresidido por la Secretaría de Relaciones Exteriores y de Seguridad y Protección Ciudadana, que complementa con el Diálogo de Alto Nivel sobre Seguridad, que considera, por cierto, la prevención y el tratamiento de las Adicciones a las drogas sintéticas como un problema de salud pública. 

 

Hemos sido invitados a formar parte de la Coalición Global contra el Fentanilo y las Drogas Sintéticas; y a este grupo además se ha unido Canadá para implementar un diálogo trilateral contra el fentanilo.  

 

Este grupo de seguridad aborda uno de los temas, querida presidenta, presidente, que más le interesan a México, y es precisamente el problema de tráfico de armas; porque en este sentido hemos continuado con el litigio estratégico que emprendió nuestro país contra manufactureras, distribuidoras y tiendas de armas. Se están empleando todas las vías del derecho y la diplomacia para montar un dique efectivo ante el flujo de armas: a México están entrando 200 mil armas al año, acabar con este tráfico es indispensable para la seguridad de nuestros ciudadanos. 

 

Tenemos juicios contra estos traficantes, fabricantes y vendedores, que se están llevando a cabo en Massachusetts y en Arizona. Aquí aprovecho entonces esta ocasión, para reconocer a todo el equipo de la Cancillería que está haciendo estos esfuerzos. 

 

Con Canadá seguiremos fortaleciendo la relación bilateral, pero sobre todo, estamos trabajando muy fuertemente para que nuestros trabajadores y nuestros ciudadanos conozcan bien el Programa de Trabajo Agrícola Temporal; porque es un programa muy interesante que vale la pena estimular. 

 

Con Europa, nuestra relación descansa sobre valores compartidos, democracia, defensa de los derechos humanos y respeto al Estado de Derecho. Con nuestros socios europeos hemos construido una asociación estratégica, sólida y madura; que esperamos que pronto, con el resguardo legítimo de nuestros intereses soberanos, se firme y se ratifique la modernización del Acuerdo Global, para lo cual será esencial contar con el apoyo de este Senado de la República. 

 

El sólido andamiaje institucional de la relación transatlántica, se podrá ampliar en sectores claves como el agropecuario o la electromovilidad. Así es que vemos una excelente oportunidad de asociarnos y de, en cierta medida, en la reciente cumbre de CELAC Unión Europea; tuve la oportunidad de reunirme con varios de los ministros y jefes de Estado y hablamos justamente de estos temas que a México le interesan, como la infraestructura, la energía renovable, el medioambiente. 

 

En la región de Asia-Pacífico, es prioritaria por los vínculos políticos y económicos que nos unen, y sobre todo por el tamaño de su mercado. México tiene singulares vínculos con esta región; hoy contamos con asociaciones estratégicas con China, con Japón, con Corea del Sur y una asociación privilegiada con la India. 

 

Se mantienen mecanismos de consulta pública con la mayoría de los países de Asia-Pacífico; así como cooperación técnica, económica y académica. Asia-Pacífico es el segundo socio comercial de México, la quinta parte de nuestro comercio exterior se hace con esa región. Seis de nuestros diez socios comerciales más importantes están en Asia-Pacífico. 

 

Así es que tenemos que reconocer la importancia del Tratado Regional integral y progresista de Transpacífico, que se firmó y se ratificó recientemente. 

 

México reconoce la importancia de fortalecer el sureste asiático y el Tratado de Amistad y Cooperación. Con esta adhesión, México fortalecería sus relaciones bilaterales con los países del sureste asiático. 

 

Tema pendiente: África. África es el segundo Continente más poblado del mundo, con mil 300 millones de habitantes; nuestras relaciones son tenues. Tenemos mucho trabajo por hacer para desarrollarlas, profundizarlas y afianzarlas. 

 

Y nos preocupa mucho el retroceso democrático que está experimentando ese Continente, especialmente con los recientes golpes de Estado en Gabón y en Níger. Proceso que amenaza, además, la estabilidad de toda la región. 

 

Sólo con el diálogo podremos avanzar en el completo respeto a las decisiones de los pueblos. 

 

En la política multilateral transformadora, que seguramente nuestro amigo y colega Joel Hernández les contará más, pero se ha coordinado la participación de México en el G-20, que estará representado por Raquel Buenrostro y donde se encuentra actualmente nuestra subsecretaria Carmen Moreno, ante un ciclo de presidencias muy interesante; porque la presidencia actual la tiene la India, se la va a entregar a Brasil; y Brasil se la va a entregar a Sudáfrica. 

 

Entonces, son oportunidades para que las naciones en desarrollo tengan una voz.  

 

Los temas que México ha propuesto ahí son: financiamiento para el desarrollo, la problemática de los países de ingreso medio, la deuda, la seguridad alimentaria, el tema ambiental y desde luego migración, equidad de género y combate al tráfico de los bienes culturales. 

 

Formamos parte de un grupo informal también de diálogo entre países desarrollados y de ingreso medio, que se llama MIKTA, donde está México, Australia, Indonesia, la República de Corea y Turquía; para dialogar sobre temas digitales, de financiamiento y de gobernanza. 

 

Hoy enfrentamos un convulso escenario mundial, el cambio climático es la mayor falla del mercado de todos los tiempos, como lo dijo claramente Nicholas Stern, y hoy uno de los mayores riesgos globales. 

 

La estimaciones de los costos derivados de sus efectos, muestran que no sólo va a afectar el crecimiento económico; sino que golpeará a los sectores más vulnerables. 

 

¿Y qué decir del agua? El agua, que se va a convertir en el recurso más preciado o que ya lo es, de hecho, de nuestra humanidad; porque las futuras generaciones no podrán contar con los servicios ambientales que contribuyeron al desarrollo en las generaciones pasadas, porque si bien tenemos el Acuerdo de París, debemos enfatizar la importancia del financiamiento al cambio climático y sobre todo a las naciones más vulnerables. 

 

Y desde luego, seguramente Joel abundará en este tema, pero somos partícipes de la protección de los océanos, muy activamente, y lo seguiremos siendo, porque es un patrimonio común de la humanidad. 

 

En la Agenda 2030, que sé que a este Senado le interesa muchísimo, la Agenda 2030 se va a analizar, porque estamos muy atrasados. El secretario general de las Naciones Unidas, decía “hay que rescatar a la Agenda 2030, hay que salvar los objetivos de desarrollo sostenible”; y ahí es la Secretaría de Economía la que lleva el liderazgo en el seguimiento de la Agenda 2030, quien estará en la próxima Asamblea General, representada por su secretaria Raquel Buenrostro. 

 

El tercer eje, que es una diplomacia contundente, oportuna y eficaz; y ya voy a ir concluyendo, lo prometo, les pido unos minutos adicionales, pero es que miren, la cartera de Relaciones Exteriores tiene lo suyo, ¿eh? 

 

Así es que, simplemente decirles que la diplomacia económica es para nosotros un gran tema; porque no solamente es crecimiento, sino desarrollo. Es fundamental para los objetivos del Gobierno de México y por ello, la diplomacia tiene que estar al servicio de la comunidad, para erradicar pobreza, reducir desigualdad y erradicar privilegios que niegan derechos. 

 

La Cancillería coadyuva en las negociaciones comerciales, en estrecha colaboración con la Secretaría de Economía; así como a través de su Red Consular y Diplomática. El objetivo por supuesto, es canalizar más desarrollo y progreso hacia nuestro país, en beneficio de nuestros productores nacionales. 

 

Promovemos de la mano del resto de las Secretarías, las prioridades estratégicas del Gobierno de México: el Plan Sonora, el Tren Maya, el Corredor Transístmico y desde luego tratar de concluir este Tratado de Acuerdo Global Modernizado de Europa y México. 

 

Estamos alineando el capítulo de energía a las prioridades de la política actual y eso es lo que falta en este Acuerdo Global Modernizado. 

 

Los esfuerzos para mejorar la vida de las personas, y en esto me quiero referir a la movilidad humana, a la migración, los esfuerzos por mejorar la vida de las personas en sus lugares de origen, tiene una brújula clara. La migración debe ser una opción y no una obligación. 

 

Pero para ello tenemos que abordarlo con una mirada integral, porque cuando una persona migra, debe ser de manera segura, ordenada, regular.  

 

El Presidente López Obrador me ha dado instrucciones muy precisas sobre las funciones que debe desempeñar la Cancillería para coordinar las acciones de gobierno frente al fenómeno migratorio.  

 

Es normal escuchar que México es un país de origen, tránsito y destino, para las personas migrantes.  

 

Pero, ¿qué significa hoy? 

 

En 2022, se registró una gran diversidad de flujos en toda la región.  

 

Ya no observamos mayoritariamente a hombres solteros de bajo nivel de estudios que buscan trabajo, no. Desde 2020, cada vez se observa una población de mayor escolaridad, muchas más mujeres, 50 por ciento hombres, 50 por ciento mujeres, pero sobre todo familias y niños y niñas no acompañadas. 

 

Los flujos migratorios en el continente han tenido un comportamiento sin precedente durante los últimos años.  

 

El año pasado se registraron más de 2.5 millones de encuentros irregulares únicamente entre la frontera de México y Estados Unidos; un aumento del 27 por ciento, en comparación con el del 2021. 

 

La Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados, la COMAR, reportó 120 mil solicitudes de asilo durante este mismo periodo.  

 

Este año calculamos que cerca de 150 mil personas solicitarán refugio ante la COMAR, institución que hace honor a nuestra tradición de solidaridad para con las personas que se ven obligadas a dejar su país.  

 

Así, México se ha convertido en uno de los países con mayor número de solicitudes de refugio por debajo únicamente de Estados Unidos y Alemania. 

 

Durante estos meses he realizado dos visitas, una a Tapachula, Chiapas, y otra a Villahermosa, para conocer de primera mano el contexto de movilidad, sobre todo en ese lugar de cruce tan delicado, porque tenemos muchas obligaciones en materia de movilidad humana.  

 

Pero he podido ver, sobre todo en Tapachula, cómo están los albergues, y sobre todo qué está pasando en nuestro país. 

 

Hemos calculado el número de estaciones migratorias, de albergues, de estaciones del DIF, de los centros de integrantes de migrantes de la Secretaría del Trabajo, y hemos visto que hay una voluntad de hacer algo más que sólo controlar o ver el flujo de los migrantes. 

 

También en Tapachula, de la mano de ACNUR, la OIM y otras agencias de Naciones Unidas, estamos trabajando para abrir un nuevo espacio multipropósito que brindará atención a las personas migrantes y refugiadas que lo requieran. 

 

Trabajamos para crear espacios abiertos y solidarios que brinden oportunidades de empleo, atención médica y, por supuesto, refugio. 

 

Y, en este sentido, insistimos en la urgencia y en la inteligencia de invertir en las causas estructurales de la migración. 

 

No basta solamente acompañar a los migrantes o no en el territorio, lo que hay que ir es al origen para ver dónde están los problemas de raíz.  

 

Por último, la riqueza cultural de México siempre ha destacado en el mundo.  

 

La Secretaría de Relaciones Exteriores tiene una larga tradición de difundir el patrimonio natural y humano de México, una de las iniciativas más relevantes que lleva a cabo la Secretaría, junto con la Secretaría de Cultura, el Instituto de Antropología e Historia y la Fiscalía General de la República, es la campaña de “Mi patrimonio no se vende”.  

 

No puede haber regeneración nacional sin preservación de la memoria, sin la preservación de la cultura, cuando hablábamos con la querida senadora Presidenta. 

 

La memoria histórica, lo que han imaginado nuestros ancestros a través de los siglos es patrimonio de todos, nos pertenece y debemos cuidarlo, por medio de diferentes acciones, entregas voluntarias, decomisos, subastas detenidas y colaboraciones con museos, se han podido rescatar 12 mil piezas en los últimos cuatro años y dos mil que están en proceso de ser recuperadas. 

 

Ustedes, queridos representantes, quiero referirme así a la diplomacia parlamentaria. Ustedes son los representantes de la voluntad y soberanía del pueblo de México, y lo saben mejor que nadie. 

 

La diplomacia parlamentaria es esencial en la construcción de nuestras relaciones internacionales.  

 

Las relaciones exteriores no las hace sólo el Ejecutivo, se nutre de las opiniones, acciones e intercambios entre nuestras naciones y a través de ustedes, nuestros parlamentarios. 

 

Tendremos reuniones parlamentarias muy importantes en esta etapa. La reunión Interparlamentaria México-Estados Unidos; la reunión de la Conferencia de las Partes de Cambio Climático; la reunión de la Comisión Parlamentaria Mixta México-Unión Europea. Y así creo que podremos avanzar de la mano parlamento, Senado y la Secretaría de Relaciones Exteriores. 

 

Como dice el Presidente López Obrador, y este es el último eje, diplomacia comprometida con el proyecto de transformación de México.  

 

Luchamos por ideales y principios, trabajamos por encargo y no por los cargos. 

 

La brújula diplomática no estaría completa sin este compromiso con el proyecto de transformación. Es un compromiso que contempla la enorme responsabilidad y el honor de encabezar la Secretaría de Relaciones Exteriores, la voz de un proyecto transformador digno e igualitario. 

 

El Senado de la República es y continuará siendo un aliado fundamental nuestro, también lo será de mi gestión al frente de esta indispensable institución del Estado. 

 

Ustedes representan la pluralidad, la riqueza de nuestra Patria, y así, entonces, quiero decirles que el mundo que transita auras complejas hoy, nuestra política exterior encara un reto de sortear muchos riesgos del presente y abrir la voz de México para que la voz de México tenga un lugar trascendente, resguarde nuestros intereses y forje horizontes de esperanza. 

 

El horizonte es desafiante de nuestro quehacer internacional.  

 

Nuestra Cancillería ha sido, a lo largo de su historia fecunda, la casa de mexicanos y mexicanas de excepción; hombres y mujeres que empeñaron muchos de sus talentos en labrar las bases de la política exterior mexicana y forjar el carácter singular de nuestra diplomacia. 

 

Uno de ellos fue Alfonso Reyes, que recorrió cada escalón de nuestro Servicio Exterior, al tiempo que daba forma a una obra intelectual monumental.  

 

Al cerrar estas palabras, permítanme parafrasearlo y compartir con ustedes las semillas de la cosecha que me anima. 

 

Decía Reyes: “El respeto a la patria va a acompañado de ese sentimiento que todos llevamos en nuestros corazones y se llama patriotismo”.  

 

Amor a nuestro país, deseos de mejorarlo, confianza en sus futuros destinos. Ese sentimiento debe impulsarnos a hacer por nuestra nación todo lo que podamos, aún en los casos en que no nos lo exijan las leyes. 

 

Lo que hemos hecho de ella y para ella los mexicanos del pasado y del presente, constituye nuestra Patria; ella, el campo natural donde ejercitamos todos nuestros actos morales en bien de la sociedad. 

 

Se ha dicho que quien ignora la historia patria, es extranjero en su tierra. Puede añadirse que, quien ignora el deber patrio, es extranjero en la humanidad.  

 

Ese deber, queridas senadoras, queridos senadores, es el que comprometo, si ratifican mi encargo, a saber, cumplir con empeño y con lealtad. 

 

Muchas gracias. 

 

SENADOR HÉCTOR VASCONCELOS: Muchas gracias, embajadora Bárcena. 

 

Enseguida daremos paso a la ronda de preguntas y respuestas, por lo que pido a la senadora Pinedo, otorgue la palabra a las y los senadores que deseen hacer uso de ella. 

 

SENADORA CORA CECILIA PINEDO ALONSO: Con gusto, presidente. 

 

Tiene el uso de la palabra la senadora Claudia Ruiz Massieu, por favor. 

 

SENADORA CLAUDIA RUIZ MASSIEU: Primero que nada felicitarte y de verdad, reiterar el gusto que nos da tu designación por el presidente de la República como canciller de la República. 

 

Sin duda tu trayectoria, tu experiencia, tu conocimiento no sólo del ámbito diplomático, de los foros multilaterales, de la forma también en la que se gestiona la cooperación entre países, será muy valiosa para esta etapa de la diplomacia mexicana; no sólo como comentábamos hace unos días en la Cancillería, porque estamos en una etapa de conclusión de una Administración y este año será importante; sino porque también estamos en una etapa de transformaciones a nivel global, donde se están replanteando paradigmas, formas de hacer las cosas, en cuestionamiento, la gobernanza global basada en instituciones multilaterales. 

 

Y también porque estamos todos, me parece, en el mundo comprometidos con encontrar nuevas formas en las que estas instituciones que hemos forjado o que se forjaron después de la postguerra, contribuyan de una manera más clara y eficaz, contundente y cercana a lograr el bienestar de la mayoría de las personas en todo el mundo; y creo que ahí México, en esta enorme y rica tradición que tiene de no sólo fortalecer estas instituciones de gobernanza global, sino de realizar una diplomacia basada en principios gestionando los intereses que legítimamente tenemos; tiene una voz muy autorizada para ser pionera en muchas de estas reflexiones. 

 

Por ejemplo, cómo hacer realidad y asequible a la gente lo que es una de las señas de esta Administración, que es la política exterior feminista, más allá del nombramiento siempre importante, de mujeres en espacios de representación y gestión diplomática, cómo encausar una nueva o detonar una nueva reflexión y un nuevo rumbo para la concreción de los ODS de la Agenda 2030 que, sin duda por la pandemia, por el conflicto armado en Ucrania y otros, se ha visto interrumpida en la dinámica que traía. 

 

En fin, creo que ha sido muy extensa y muy puntual también en el planteamiento que nos has hecho, y lo saludo, lo celebro y reitero la disposición personal y sin duda de todas mis compañeras y compañeros, de caminar contigo en estos meses que nos quedan, a nosotros como senadoras y senadores de la República; a ti como canciller, en seguir fortaleciendo lo que siempre debe ser una visión de Estado, de la política exterior. 

 

Yo tendría dos reflexiones muy puntuales, no son preguntas, sino más bien aprovechando tu enorme experiencia, y la riqueza de tu conocimiento.  

 

Por un lado, tocaste el tema de la compleja siempre relación con nuestro vecino del norte; las múltiples maneras en las que se ha buscado expandir la agenda para no sólo abordar los temas que históricamente nos han sido complejos pero necesarios con Estados Unidos, sino también para crecientemente en muchas materias involucrar a Canadá más allá del Tratado que tenemos entre los tres países, en otras vías de actuación trilaterales. 

 

Pero hablando del Tratado en concreto, me preocupa y presido la Comisión Especial de Seguimiento al T-MEC, me preocupa el proceso de revisión de 2026, que previsiblemente no será responsabilidad tuya  como canciller ni nuestra como senadoras y senadores, o cuando menos no de la mayoría; pero sin duda es una responsabilidad de Estado y me parece que tendríamos que estar trazando una ruta de acción conjunta, otra vez con esa visión de Estado, en donde podamos desplegar distintos esfuerzos de diplomacia en todos sentidos, incluyendo la diplomacia pública en el sentido más amplio, la diplomacia parlamentaria por supuesto, para ir previendo esa cita que tendremos en 2026; para que quienes lleguen a ocupar la responsabilidad de Canciller de la República, desde luego del Ejecutivo Federal, pero también de senadoras y senadores de la República, encuentren ya un camino andado, un tablero de control amplio y vasto, uy acciones concretas que nos permitan ir construyendo un piso de soporte más allá de los canales institucionales de gobierno o incluso de la comunidad estrictamente empresarial o del sector privado y productivo; sino más allá, más hacia las sociedades de los tres países, que hagan suyo el tratado como un patrimonio de América del Norte en su conjunto, importante que hay que cuidar y que hay que seguir profundizando. 

 

Esa sería una primera reflexión, un primer tema que me preocupa, más allá de las cosas puntuales del tratado, que siempre presentan sus tensiones, pero que el propio tratado tiene los mecanismos para ir resolviendo. 

 

Y otro tema que me parece interesante, y por tu conocimiento también en todas las responsabilidades que has tenido. Algunos países, notablemente Dinamarca y de nuestra región solamente Brasil, han nombrado embajadores tecnológicos, y han diseñado y desplegado una estrategia muy robusta de diplomacia tecnológica, entendiendo que todos los cambios que estamos viviendo en esta área, desde la inteligencia artificial hasta el desarrollo y otro tipo de armas cibernéticas y demás, tienen un impacto extraordinario en las relaciones entre países, en el desarrollo o no de las comunidades, y que van a transformar no sólo la forma de producir sino las relaciones humanas y globales en todo sentido. 

 

Además del peso que tienen estas compañías de desarrollo tecnológico que va más allá del peso económico, sino verdaderamente el peso político que pueden llegar a tener. 

 

Y lo vimos también, por ejemplo, en la invasión en Ucrania, cómo se pudo proveer de Internet a Ucrania por parte de una de estas compañías, cuando habían sido interrumpidos los servicios naturales por la invasión. 

 

Me gustaría, también en el futuro, poder trabajar con la Cancillería en el desarrollo de una estrategia similar. No sé si hayan pensado algo en este sentido. 

 

Repito, creo que en nuestra región y, si no, esperaría también un poco de información al respecto, pero sólo Brasil ha nombrado un embajador en este sentido, y creo que sería un área importante para México para seguir estando a la vanguardia de los desarrollos de las distintas formas de ejercer la diplomacia en el mundo. 

 

Y, bueno, subrayarte, como siempre, mi reconocimiento, mi afecto, mi cariño. Y, de verdad, reiterarte lo contenta que estoy de poder trabajar contigo en estos meses por venir. 

 

Nuevamente, bienvenida al Senado de la República. 

 

SENADORA CORA CECILIA PINEDO ALONSO: Gracias, senadora. 

 

Tiene el uso de la palabra el senador Antonio García Conejo. 

 

SENADOR ANTONIO GARCÍA CONEJO: Muchas gracias, querida senadora. 

 

Muy buenas tardes-noches, tardes todavía, a todas, a todos.  

 

Estimada doctora Alicia Isabel Adriana Bárcena Ibarra, me da mucho gusto saludarla. 

 

No dudo de su entusiasmo que ha mostrado, su trabajo. Le deseo mucho éxito en su tarea. 

 

Sé que ya tiene días que asumió esta responsabilidad y hoy se está ratificando aquí en esta Soberanía. 

 

Ya lo expresaba usted hace un momento, es muy compleja la tarea que va a realizar.  

 

Yo quiero expresarle algunas preocupaciones y terminaría con un par de preguntas. 

 

El tema de seguridad es uno de los temas más complejos, sin duda, en el mundo y en nuestro país no es la excepción. 

 

Si bien dice un dicho, no mal dicho, el buen juez por la casa empieza.  

 

Yo estoy muy preocupado, porque desde hace varios años se habla de detener el flujo de armas, principalmente del norte, de los países de Estados Unidos y Canadá, pero sobre todo de Estados Unidos, y a la fecha no se ha logrado absolutamente nada. 

 

Va en aumento cada vez más, es muy lamentable todos los días enterarnos de las masacres, de los enfrentamientos en lo largo y ancho del país. Es un tema que urge buscarle una solución y yo le pediría de nueva cuenta que le ponga todo el empeño. 

 

Sé que el exsecretario Marcelo hizo lo propio, incluso las demandas que se iniciaron con las fábricas de armas en Estados Unidos, pero el problema es también de México cómo detiene, porque al final del día son los policías y es el Gobierno mexicano el que debe de velar, de cuidar las fronteras y evitar el flujo de armamento.  

 

Eso quiere decir que no está funcionando el trabajo que se realiza en la frontera. 

 

Hay sin dudas lagunas de corrupción enormes para que eso suceda, de que lleguen las armas a las manos de los criminales en México. 

 

Se requiere, obviamente no va a caer en ustedes la responsabilidad únicamente; sin embargo, por la responsabilidad que asume, es mantener una comunicación muy estrecha con los que están al frente y que tienen el monopolio de los policías y del dinero en México para ello. 

 

Me preocupa mucho el tema de las drogas, que incluso el mismo fentanilo no solamente se está enviando a Estados Unidos sino se está quedando en nuestro país, otro tema muy complejo. 

 

El tema de trata de personas es un tema también muy complejo, pero que debemos de atender entre todas y todos.  

 

El medio ambiente, no se diga. El calentamiento global, el uso de las energías limpias, que debe ser uno de los temas prioritarios que debemos atender y trabajar muy estrechamente, sobre todo con los socios del norte, los países socios del norte.  

 

Y, bueno, el tema migratorio, queridísima doctora y Secretaria. Yo quiero expresarle a usted que, después del acontecimiento de Ciudad Juárez, acudí allá, y lo que expresaron los migrantes, familiares de los que murieron quemados por todo lo que ya sabemos, la historia que ya sabemos y que fue prácticamente un crimen considerado como un crimen de Estado, porque por los hechos ocurridos, no les abrieron la puerta, etcétera. Pero el tema va más allá.  

 

Los centros o estaciones de migración, en realidad, mi querida Secretaria, sé que no estaba usted todavía en esta responsabilidad, pero cuando te expresan que se convierten en negocios, adentro les venden comida, les venden absolutamente todo lo que requieren y para dejarlos salir les cobran 500 dólares, eso fue lo expresado por las personas; pero prácticamente todos los centros de estaciones, yo digo que son centros de retención, porque detienen a las personas allí, a las personas migrantes, y aunque los familiares les lleven comida o no les permiten, porque adentro hacen negocio, es un nido de corrupción los centros de migración. 

 

Ojalá que con su llegada a esta responsabilidad, corrija ese tema tan grave y tan lamentable. 

 

No lo digo yo, me lo expresaron personas que estuvieron allí.  

 

Eso debe de acabarse, es una vergüenza para el Estado Mexicano. Si bien no les ayudamos, pues no los tratemos así. 

 

El otro tema que tiene enfrente y que debe de corregirse urgentemente, la mala atención en los Centros de Expedición de Pasaportes. 

 

No es posible que para que te den un documento de pasaporte tengan que pasar meses, y cuando tienen algún familiar enfermo, etcétera, o que trate de algún tema urgente, que se persignen porque es muy difícil, les van a entregar un pasaporte para poder, aunque tengan su VISA, pero requieren ese documento. 

 

Esa es una gran tarea que debe de corregirse, y también la atención. No en todos los casos, la verdad mis respetos porque hay mucha gente muy atenta, pero es una vergüenza cómo discriminan a la gente cuando llegan, y más cuando los ven que son de provincia. Los hacen dar mil vueltas por una sola letra o por cualquier tema, pero muy mala atención. 

 

Concluyo. No escuché en su plan de trabajo la relación con la OEA; no sé, quizás se me pasó. Pero la OEA, bueno, ya lo va a expresar la doctora Laura Elena, pero me parece que es un organismo que debe de dársele mayor provecho o debe de dársele más atención; es derechos humanos, es la seguridad de los Estados Americanos, entre otras cosas, pero principalmente la democracia que deben tener los Estados miembros. 

 

Y terminaría haciéndole una pregunta muy rápido: la industria turística en México es la tercera fuente de economía. Veo que muy poca atención se ha dado y se lo digo con toda responsabilidad, realmente esta industria a través de la Secretaría de Turismo, muy poco recurso, casi nulo, y me preocupan mucho las alertas que con frecuencia el Estado de los Estados Unidos emite, prácticamente a todas las entidades federativas de México, solamente dos se escapan, si no mal recuerdo es Yucatán y Campeche. 

 

Pero siete están con más alta peligrosidad, entre ellos mi queridísimo estado de Michoacán, Colima, Zacatecas, Guerrero, Jalisco, Nayarit. Y, mi pregunta es ¿cómo hacerle? Porque es un círculo vicioso, porque si bien las alertas se mandan, no vienen turistas, hay falta de empleo y, como no hay empleo, terminan los jóvenes involucrándose en conductas antisociales. Y así nunca vamos a terminar.  

 

Es grave ese tema, nos afecta terriblemente al sector turístico las alertas que emite Estados Unidos, y la pregunta sería ¿cómo hacerle? O ¿qué está pensando hacer en ese aspecto? 

 

Prácticamente con eso concluyo y muchísimas gracias por su atención, reiterando toda mi disposición desde mi trinchera, colaborar con usted y le deseo mucho éxito. No dudo que usted va a hacer un excelente papel. 

 

SENADORA CORA CECILIA PINEDO ALONSO: Senadora Sasil de León, por favor. 

 

SENADORA SASIL DE LEÓN VILLARD: Gracias. 

 

Doctora Alicia Bárcena Ibarra, de nueva cuenta bienvenida al Senado de la República. Celebro con mucha incluso hasta gratitud, la designación del presidente Andrés Manuel López Obrador, porque reconozco la lucha histórica en su trayectoria, doctora, la lucha por el reconocimiento a nuestros derechos como mujeres. 

 

Celebro que forme parte de este Gabinete, quizá el más paritario de la historia de nuestro país. Hoy somos, el Senado de la República, con mayor participación de mujeres, somos 64 mujeres y 64 hombres. Y reconozco en usted una gran trayectoria que sin lugar a dudas, representará dignamente a las mujeres de México. 

 

Yo no le quiero preguntar nada, solamente decirle que cuenta con las senadoras de Morena, del PES, del PT, del Verde y de todas, me atrevo a decir de todo el Senado de la República, porque reconocemos en usted no sólo a una mujer que ha luchado por nuestros derechos; sino que es una muestra, pues, de que las mujeres hoy en este país podemos soñar y poder ser lo que queramos ser. 

 

Bienvenida de nueva cuenta al Senado. 

 

SENADORA CORA CECILIA PINEDO ALONSO: Gracias, senadora. En el orden, continúa su servidora. 

 

Estimada doctora Alicia Bárcena, es un gusto saludarla nuevamente, en esta ocasión en la sede del Poder Legislativo mexicano. 

 

Tal y como se lo mencioné durante nuestro primer encuentro, su vasta experiencia y distinguida trayectoria que deviene de responsabilidades previas de alto nivel en el sistema de las Naciones Unidas; aunado a su reciente papel como embajadora en Chile; enuncian el perfil idóneo para dar continuidad y ampliar la ardua labor desarrollada en los últimos casi cinco años por la Secretaría de Relaciones Exteriores. 

 

El despliegue de nuestras relaciones internacionales debe estar encabezado por una mexicana con sensibilidad social, extenso conocimiento de nuestra historia, y con gran entendimiento para negociar y construir acuerdos que beneficien a todo el país.  

 

Por ello, doctora Bárcena, usted cuenta con el respaldo de todas las fuerzas políticas de esta soberanía para su ratificación como canciller; pues confiamos en que instrumentará una política exterior mexicana sagaz y congruente con nuestro prestigio histórico. 

 

En esta línea, querida canciller, tomando en consideración las puntuales acciones que nos ha mencionado esta tarde; así como las señaladas en su carpeta de trabajo para la obtención de oportunidades tangibles a favor de nuestra población, como presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores Asia-Pacífico-África, le reitero mi absoluta disposición de colaborar cercanamente con usted y con su equipo; a fin de abonar en el relanzamiento del diálogo político con las regiones de Asia-Pacífico, Asia Central, Medio Oriente y como lo mencionó, en el Continente Africano. 

 

Coincidimos en que una de las líneas estratégicas a considerar es más México en el mundo, a través del fortalecimiento de su integración económica. En este sentido, me gustaría escuchar sus comentarios específicamente en torno a la diversificación de nuestras relaciones y el papel que guardan los tratados de libre comercio como elemento para afianzar las mismas. 

 

Si bien la firma del Tratado de Libre Comercio es un ámbito que cae en la responsabilidad conjunta entre Cancillería y la Secretaría de Economía, desde su posición como secretaria de Relaciones Exteriores, ¿considera viable que en el transcurso de este último año de Gobierno avancen las negociaciones de acuerdos de esta índole con la República de Corea y el Reino Hachemita de Jordania? 

 

Sin duda, señora canciller, desde esta soberanía convenimos en la importancia de robustecer el marco jurídico con naciones hermanas que representan alianzas provechosas para aumentar los niveles de crecimiento y desarrollo en diversas áreas del país. 

 

En tal virtud, nos encontramos atentos y atentas de que se remita al Senado para su pronto análisis y en su caso, la aprobación, el Tratado de Libre Comercio entre la Alianza del Pacífico y la República de Singapur. Y el Tratado de Amistad y Cooperación entre la Asociación de Naciones del Sureste Asiático y México. 

 

Sin más, agradezco de antemano sus puntuales respuestas a mis cuestionamientos, doctora Bárcena, y le refrendo la expresión de júbilo por su próxima ratificación como secretaria de Relaciones Exteriores; cuente con el apoyo del Grupo Parlamentario del Partido del Trabajo y en especial con el mío, como presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores Asia-Pacífico África, para hacer de la política exterior una herramienta efectiva al servicio de nuestra gente. 

 

Muchas gracias. 

 

Senador Israel Zamora. 

 

SENADOR ISRAEL ZAMORA: Muchas gracias. 

 

Nos da mucho gusto que una mujer con la capacidad que usted tiene, doctora, haya sido designada para esta altísima responsabilidad. He sido testigo de los halagos que usted recibió en organismos multilaterales donde usted presidió, y ese trabajo enorgullece a todo el pueblo de México, porque usted al fin y al cabo al ser miembro del cuerpo diplomático es representante de lo que somos cada una y cada uno de nosotros como mexicanos. 

 

Dicho eso, quisiera invitar a una reflexión. Creo que estamos viviendo una transición a una nueva forma de hacer política en el mundo; y dentro de esa política nueva que se tiene que hacer en el mundo, por supuesto que la política exterior tiene un lugar; la modificación que yo creo que nuestro sistema particularmente se debe de ir haciendo, es lo que entendemos por servicio exterior mexicano. 

 

Nuestra ley, la Ley del Servicio Exterior Mexicano, en su primer artículo, le da una acepción de un sustantivo compuesto, más que un verbo compuesto como debería de ser, desde mi punto de vista. 

 

Establece que el Servicio Exterior Mexicano es un cuerpo diplomático en general, compuesto por todas las personas que ejercen la política exterior y creo que eso podría resumirse a la diplomacia. Yo en una reunión que tuve, pude constatar que a veces es necesario hacer esa distinción entre la acepción del servicio exterior mexicano como verbo compuesto del sustantivo compuesto.  

 

Algo que podría parecer innecesario, pero que en este tiempo es fundamental. Centrar todo el trabajo del Estado mexicano en los individuos a los que nos debemos, el Estado no es sino una herramienta para crear las condiciones necesarias para que los individuos alcancen la felicidad. La elección de ser feliz o no depende de cada uno de nosotros, pero el 
Estado debe ser esa herramienta que genere esas condiciones para ser feliz.  

 

Menciono esto, porque en México como Estado, en el concepto de la palabra, tenemos una deuda colosal con los mexicanos que residen en el exterior, me refiero como Estado, orden jurídico, gobierno y aun la población. 

 

Hace unos días vino una jovencita de 15 años, 16 años, acompañada de sus hermanos que no rebasan de los 24 años, y mencionaron que la Ciudad de México se les hacía ruidosa. Ellos nacieron, el mayor de ellos nació en México; de Michoacán sus padres, y vivían en Washington. Y fueron sometidos a una crítica terrible, a un juicio muy lamentable basado, desde mi punto de vista, en la ignorancia. 

 

Y ese es el reflejo de cómo la población a veces, incluidos todos nosotros, menospreciamos a los migrantes mexicanos que residen en el exterior. 

 

Quiero mencionar que yo tengo datos de la Oficina del Censo de Estados Unidos, que señala que los hispanos de origen mexicano, son 38 millones los que residen en Estados Unidos, con base en la reforma constitucional que hicimos en el Senado de la República, en donde eliminamos cualquier límite para que cualquiera que sea hijo de un mexicano, sin importar si su papá nació aquí o nació en donde haya sido, es mexicano, quiere decir que esos 38 millones que reconoce la Oficina del Censo, son mexicanos con los mismos derechos y con el mismo valor que los que nacimos aquí. 

 

Ellos viven allá y son sometidos a injusticias terribles, a maltratos, a discriminación; y creo que ahí es donde el Servicio Exterior entendido como un verbo compuesto, debe de enfocarse con mucha fuerza. Los consulados deben ser nuestra extensión, la extensión del brazo del Estado mexicano para que esté presente cuando nadie más lo está; cuando volteen a su lado y no haya quien los pueda ayudar, ahí están los consulados extendidos como el Servicio Exterior Mexicano. 

 

En la diplomacia no tenemos ninguna queja, creo que el Servicio Exterior Mexicano entendido, ahí sí como un sustantivo compuesto, es extraordinario, tiene un prestigio enorme, es incuestionable el prestigio del Servicio Exterior Mexicano como sustantivo compuesto.  

 

Pero, ¿qué estamos haciendo en nuestros consulados? ¿Qué está ocurriendo? ¿Qué es lo más importante? Por supuesto que los temas multilaterales son fundamentales, México ha contribuido a la paz, al desarme; pero lo más importante para nosotros es atender, desde mi punto de vista, con urgencia, a los 40 millones de mexicanos que viven en Estados Unidos. 

 

Eso quiere decir que de cada cuatro mexicanos, uno vive en Estados Unidos. Aportan, dijo el presidente en su Quinto Informe, 60 mil millones de dólares. 

 

Dice un estudio de Pure Research Senner, que cada uno de ellos en promedio, los mayores de 16 años, reciben anualmente un ingreso de 30 mil dólares. Eso equivale, hice por acá la suma, la cuenta, equivale a 14.3 billones de pesos, el 80 por ciento del Producto Interno Bruto de nuestro país lo reciben los mexicanos que viven en Estados Unidos, que son mayores de 16 años. 

 

Esa es la importancia de la población que tenemos allá. Son, considerando todo esto, desde mi punto de vista insuficientes el número de consulados. 

 

Sabemos que hacen un gran trabajo allá, que tienen muchas dificultades, que el personal es muy preparado, pero hacemos una reflexión para que tratemos de fortalecer, para atender esos millones de mexicanos que en próximos días podríamos estarles negando su derecho a votar. 

 

La última vez, de esos 40 millones, supongamos que eran 35 millones en el 2018, votaron sólo 98 mil. Hay algo mal, no puede ser ese porcentaje tan bajo, hay que llamar al voto y facilitar, desde la Cancillería, todo lo que sea necesario para permitir el goce de sus derechos humanos plenos. 

 

Hay mucho trabajo, doctora, nos enorgullece mucho, repito, que usted con su talento, con esa amabilidad con la que siempre se conduce, esté al frente de esta importantísima Cancillería. México tiene un bello rostro en la Secretaría y sabemos que va a hacer un extraordinario trabajo; por eso en el Partido Verde vamos a estar votando a favor, sin ninguna duda, de su ratificación. 

 

SENADORA CORA CECILIA PINEDO ALONSO: A continuación, la senadora Beatriz Paredes Rangel. 

 

SENADORA BEATRIZ PAREDES RANGEL: Muchas gracias, senadora. 

 

Señor presidente de la Comisión, colegas senadoras y senadores. 

 

Es un gusto encontrarme en esta sesión de comparecencia de la doctora Alicia Bárcena. Cada destino tiene su momento de cita y en este caso, el encuentro en la Comisión de Relaciones Exteriores, con quien será, porque no tengo duda de que la mayoría de los legisladores ratificarán, y anuncio que nosotros votaremos a favor; tanto de la doctora Bárcena como de Laura Elena Carrillo, como de Joel Hernández, en la sesión correspondiente. 

 

Quiero aprovechar para hacer un reconocimiento al equipo de la Cancillería y qué bueno que invitó a varios de sus compañeros de trabajo, como presidenta de la Comisión de América Latina y el Caribe; he tenido una gran colaboración de quienes han estado en esa área, tanto de Max como de Martín. 

 

Nos da mucho gusto que haya integrado a Martín a su equipo cercano. Y trabajé también muy cerca de AMEXCID, con Laura, y con todo el equipo, pues, y en lo que coincidí con Roberto y con otros compañeros de otras áreas. 

 

Quisiera aprovechar los minutos, estimada canciller. Su exposición fue muy completa, vasta, profunda, con algunos giros muy elegantes y agudos, sin duda la vamos a solicitar a nuestro presidente, para que la tengamos todos; y quiero proponerle que entre el Senado y la Cancillería, hagamos un pequeño grupo de trabajo de prospectiva, porque un año y días serán muy pocos para la compleja problemática que enfrenta la política exterior, en un momento de transición de los modos tradicionales de hacer política exterior en el mundo. 

 

Terminó la Guerra Fría, pasamos de la etapa de dos bloques, a la apuesta por la globalización y de repente, el COVID nos puso como humanidad ante nuestra complejísima realidad, limitada realidad de que tal globalización era más una utopía que un hecho concreto, ante problemas que la humanidad tenía que enfrentar de manera conjunta y no lográbamos hacerlo. 

 

En ese sentido, parece que regresamos a la época de bloques regionales, pero no logra cuajar plenamente de bloques regionales. Y me parece que si el destino del orbe va a seguir caminando por la época de bloques regionales; México tendría una gran oportunidad, tanto consolidando el bloque de América del Norte y ahí la referencia que hizo la senadora Ruiz Massieu sobre prepararnos para la revisión del T-MEC en 206, donde por cierto yo solicitaría que pensáramos cómo incorporamos los derechos de los mexicanos en Estados Unidos, con un capítulo de seguridad social negociado en el T-MEC para que pudieran ellos cotizar allá y tener seguridad social acá; pero ya negociado, articulado, en fin. 

 

Y, también cómo vamos a jugar en el bloque de América Latina. 

 

Entonces, estas dos pertenencias tan claras, tan evidentes, como no renunciamos a ninguna. Entonces, mi propuesta muy concreta para no abundar, porque son muchas aristas, muchas facetas, es que pudiéramos hacer un equipo de prospectiva más analítico, más especulativo; no necesariamente concreto, que permitiera que el Senado de la República, con los insumos que podamos negociar, tuviera un documento al final del Senado, que entregara a quien resultare responsable al término de esta Legislatura. 

 

Y ya yéndonos a las cosas más específicas, qué bueno que se sacó la rifa del tigre con el tema de migración, querida canciller, a mí me tranquiliza porque conozco su vocación y su consistencia en cuanto al tema de derechos humanos; pero realmente es un enorme asunto y problema. 

 

Yo tuve oportunidad de presidir la Comisión especial de Migración, cuando se votó esta última ley, la ley que está vigente. He estado metida en este tema desde hace mucho tiempo y tengo el honor de participar con la senadora Caraveo en la Comisión de Migración y formar parte del Grupo Especial que se creó para el tema trágico de Ciudad Juárez. 

 

Sigo insistiendo que el Gobierno debería retirar al titular de Migración, sigo insistiendo. No tiene sentido, no, está, está, si está; no tiene sentido. Pero el caso es que me parece que podríamos tener una reunión muy larga con usted en la Secretaría de Relaciones, que nos escuche ampliamente. 

 

Tenemos un trabajo muy serio en la Comisión de Migración, tenemos una serie de planteamientos muy de fondo y habría, yo insistiría en la posibilidad de que intentemos que la frontera sur de Chiapas, sea una frontera ejemplar. 

 

Si logramos que la frontera sur de Chiapas sea una frontera ejemplar, si logramos que haya vigilancia satelital para que no haya tráfico de personas, para que no haya tráfico de niños, para que no metan a la gente debajo de las cajas de los tráileres. Y eso se puede descubrir con satélites y con tecnología.  

 

Si multiplicamos las estancias aduanales, en fin, un paquete integral para la frontera sur; y desarrollamos en Tapachula un área de trabajo intensivo y reorientamos algunos de los recursos de cooperación para el Triángulo Norte de Estados Unidos para generar un área de trabajo intensivo aprovechando las hectáreas que ya existen en Tapachula, en donde iban a establecer una zona económica económica exclusiva, vamos a llegar a la raíz, porque el punto de fondo es, si los migrantes después de pasar a los estados del sur-sureste, hacen todo el recorrido y llegan a los estados del norte, esa es una historia dramática y de enormes riesgos. 

 

Y en los municipios del norte, hay un nivel muy alto de tensión, y hay cosas, mi querida Canciller, que hay que resolver ahora. 

 

Más recursos para los consulados tendrían que venir en este presupuesto, más recurso para los consulados. Si no vienen en este presupuesto, ya no vinieron. Esas son cosas que hay que negociar ahora. 

 

La posibilidad de que los consulados se queden con los ingresos que reciben y no se los tenga que mandar Hacienda, tendría que venir en la ahora en la Ley de Ingresos, es un cambio en un artículo y tendría que venir ahora.  

 

Y una estrategia integral para la frontera sur, tendría que venir en este presupuesto. 

 

Y, finalmente, para no alargarme, pero insistiendo que sería muy bueno comentarlo en una reunión específica sobre migración con usted, donde cite a las otras áreas, por favor; creo que podemos coadyuvar a tener un diálogo de fondo sobre los resultados de la estrategia de cooperación. 

 

Tuvimos una muy buena experiencia con la doctora Laura Carrillo, donde nos compartió la posibilidad de conocer de manera directa el esfuerzo realizado en Centroamérica. 

 

Y tenemos un planteamiento integral para Haití también, porque creo que Haití sigue siendo una llaga en el corazón de toda América Latina.  

 

Gracias. 

 

SENADORA CORA CECILIA PINEDO ALONSO: Gracias. 

 

A continuación, escucharemos a la senadora Josefina Vázquez Mota.  

 

Senadora, por favor. 

 

SENADORA JOSEFINA VÁZQUEZ MOTA: Buenas tardes. 

 

Para mí es un honor poder compartir esta mesa. 

 

Saludo con gran afecto a nuestro presidente de la Comisión; a nuestra Secretaria, por supuesto. 

 

Y doy la bienvenida con profundo afecto a la doctora Alicia Bárcena, a quien tengo el privilegio de conocer hace algunos años y de compartir en diferentes momentos de nuestras vidas en propósitos comunes. 

 

Es un orgullo que una mujer como la doctora Alicia Bárcena hoy está aquí para hacernos saber su plan de trabajo y, de antemano, querida Alicia, doctora, compartirte que, de mi parte, mi responsabilidad, pero también estoy segura como grupo parlamentario, estaremos acompañándote hoy y el día de mañana, cuando se presente este nombramiento al Pleno, con nuestro voto a favor para tu persona y tu liderazgo, y también para el equipo que te va a acompañar. 

 

Por cierto, también felicito la integración a tu equipo de un joven, que justamente va del Senado de la República, a quien queremos mucho por su extraordinaria labor en la Mesa Directiva en su momento y en otras tareas, así es que tienes talentos muy importantes que hoy te acompañan. 

 

Yo quiero referirme, si me permiten, a dos puntos específicos, no por no haber otros que han sido tratados por senadoras y senadores con antelación, sino porque son los más cercanos a mi responsabilidad también como presidenta de la Comisión de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes. 

 

Mi querida doctora Bárcena, tú te referiste a este propósito y objetivo de diplomacia cercana a la gente, y traigo a la mesa las voces de las niñas, niños y adolescentes, particularmente las voces de quienes son víctimas del crimen de violencia sexual hoy, a raíz de las redes sociales, que conlleva a grandes beneficios, pero que también contamos ya hoy en día con un catálogo de cerca de cerca de 50 ciberdelitos en contra de ellas y de ellos. 

 

De delitos y violencia a través de las redes sociales, porque es inevitable que en el mundo de la tecnología tengamos luz pero también oscuridad, y que en un país como el nuestro donde la violencia con tantas tragedias se ha venido normalizando, la tengamos también en las redes sociales. 

 

Hemos venido insistiendo en la adhesión urgente al Convenio de Budapest.  

 

Somos, como país, y tú bien lo sabes, doctora, el segundo lugar de turismo sexual infantil del planeta, sólo después de Tailandia, y estamos a nada de quitarle el primer lugar a Tailandia. 

 

Estamos entre los tres primeros lugares de turismo sexual de bebés del mundo, y se estima que al año ingresan al menos 700 mil pederastas a México, con absoluta impunidad. 

 

Somos el reino y el paraíso de los pederastas a nivel mundial. 

 

Me queda claro que esto no es responsabilidad ni mucho menos pretendería serlo sólo de la Cancillería, pero por eso hago un llamado nuevamente urgente adhesión a este Convenio de Budapest. 

 

Este Convenio tiene el propósito justo de homologar esta política penal común, armonizar la cooperación internacional en la materia, la Guardia Nacional, particularmente la policía cibernética ha trabajado de una manera absolutamente responsable y solidaria, y desde aquí quiero hacerles un gran reconocimiento.  

 

Sin embargo, ellos mismos nos hablan de que, al no estar adheridos al Convenio de Budapest, no se puede acceder a las bases de datos, a muchas de ellas en el mundo, y hoy sabemos que los ciberdelitos, que los ciberpederastas, que los cibercriminales usan las bases de datos de cualquier país del mundo. 

 

Durante la pandemia, estos crímenes crecieron en al menos 150 por ciento. Quiere decir entonces que, junto con lo que he señalado, lo que tenemos que hacer en esta materia es realmente urgente. 

 

A la fecha, el Convenio de Budapest cuenta con 60 Estados parte, entre ellos destaco Argentina, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Estados Unidos, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana y nosotros seguimos sin estar.  

 

México solicitó a través de su misión permanente al Consejo de Europa justamente la posibilidad de adherirse a este Convenio.  

 

Es urgente, reitero, adoptar las medidas del Convenio de Budapest, armonizar nuestra legislación penal en materia de ciberdelincuencia. 

 

Hoy, a través del catfish, que es uno de tantos ciberdelitos a través de los videojuegos, los desconocidos entran a la vida de niños, niñas y adolescentes, cambiando su identidad. 

 

Y lo pueden hacer desde cualquier lugar del planeta. Y cuando las niñas y los niños están en sus redes y sus fotografías están allí y sus videos, con la peor parte que destruye de por vida sus vidas, pueden estar en cualquier base de datos del mundo y la policía cibernética cada día tiene más dificultad para acceder a ellos por no estar en este Convenio. 

 

Por lo tanto, querida doctora, nuevamente hago un llamado urgente. 

 

Tú reiteraste en tu mensaje la urgencia de ser constructores de paz. 

 

¿Cómo ser constructores de paz, destruyendo la vida de miles niñas, niños y adolescentes? 

 

En la Agenda México y Estados Unidos, en materia de seguridad sé que hay temas centrales. Tú destacaste apenas algunos de ellos, por el tiempo tan breve que te hemos dado, como el fentanilo, las armas, el crimen organizado. 

 

Pero yo quiero reiterar una vez más que si en esta agenda de seguridad no están las niñas, niños y adolescentes, estamos dejando de lado lo más relevante. 

 

El 35 por ciento de los pederastas que cada año entran a nuestro país, vienen de Canadá y de Estados Unidos. 

 

Hay bases de datos, México, como país, tenemos que hacer lo propio, pero nuevamente hago un llamado a que se incorpore de manera central en esta agenda de seguridad y también con el resto del mundo. 

 

Los pederastas provenientes de Asia son cada vez más crecientes, dado que los países asiáticos se acaba la impunidad y aquí la tienen al 100 por ciento, están llegando a nuestro país. 

 

Tampoco quiero decir con ello que sea una realidad reciente. Esto debimos haberlo atacado hace mucho tiempo y lo hago también con sentido de autocrítica, al momento de nuestros gobiernos, pero reitero que es creciente y cada vez mayor. 

 

Así que, Canciller, te suplico, y utilizo este término consciente del mismo, que firmemos este Convenio de Budapest, si no queremos desbancar a Tailandia y seguir creciendo en estos crímenes. 

 

El segundo punto que te quiero abordar, y retomo tus palabras textuales de tu mensaje que has compartido. Textualmente señalaste: “En Chile aprendí que el autoritarismo conduce a la violación sistemática de los derechos humanos”, hasta aquí cierro comillas de tus palabras textuales.  

 

No puedo más que coincidir en ello, y coincidir también con los principios de la Doctrina Estrada; sin embargo, quiero llamar la atención en el caso de Nicaragua. 

 

¿Por qué quiero referirme al caso de Nicaragua? Porque la gran mayoría de mi grupo parlamentario acompañamos el nombramiento de nuestro embajador en Nicaragua.  

 

Y lo hicimos pidiéndole también en esta mesa, como hoy es la tuya, que evidentemente no pretendemos que viole los principios de la Doctrina Estrada ni es lo que estoy intentando decir aquí, mucho menos sugerirlo; pero llama la atención que la Doctrina Estrada se guarda en un cajón en Palacio Nacional, en muchas mañaneras donde claramente se da una intervención en países extranjeros y se comenta sobre procesos electorales y se hacen calificaciones y descalificaciones a los sistemas democráticos, no democráticos o simplemente se emiten opiniones violando claramente la Doctrina Estrada, lo cual me parece suyo lamentable y condenable. 

 

Pero al mismo tiempo me pregunto por qué el silencio frente a las detenciones arbitrarias de opositores, políticos, periodistas, miembros de movimientos campesinos, iglesia católica en nicaragua. 

 

Por qué el silencio cuando cada día han sido detenidas más personas acusadas de conspiración por atentar contra lo que ellos llaman la integridad nacional y la difusión de noticias falsas. 

 

Por qué el silencio frente a la persecución de la iglesia católica, donde en los últimos tres meses se ha cancelado la personalidad jurídica a un total de 119 organizaciones de la Sociedad Civil y ocho universidades, y se ha intensificado la persecución de los miembros de la iglesia católica, donde se han expulsado a seis de sus miembros y se han detenido a otros cuatro sólo en este año. 

 

Y, apegados a la Doctrina Estrada, quiero dejar esta reflexión en la mesa, Canciller. 

 

Reiterando que, así como condeno las intromisiones cuando se guarda en el cajón la Doctrina Estrada porque así parece conveniente, también me parece muy grave que se guarde cuando se están atropellando clara, pública y abiertamente todos los derechos humanos. 

 

Y con este respeto, hagamos el papel que dignamente se ha hecho en muchos otros momentos de la vida de la Cancillería. 

 

Aquí en esta mesa hay mujeres, particularmente mujeres, sin desestimar a los hombres, pero mujeres que han ocupado papeles muy relevantes en el mundo de la cancillería. 

 

La excanciller Claudia Ruiz Massieu, la senadora Beatriz Paredes, ambas tienen mi gran afecto y admiración; al igual que lo tengo para tu persona y tu liderazgo intachable que hoy enriquece a nuestro país. 

 

Estas son mis dos intervenciones, querida doctora Bárcena.  

 

Te pido que en el caso de niñas, niños y adolescentes, como lo ha solicitado la senadora Paredes para otra agenda tan relevante como esta, podamos tener un grupo al menos de trabajo de una reunión más amplia, porque esto tiene que parar y no nos podemos levantar de la mesa ni con indiferencia ni tampoco con omisión. 

 

Sé de tu compromiso y por eso lo hago nuevamente bajo mi responsabilidad y también la que me ha conferido este Senado de la República. 

 

Nuevamente muy bienvenida. Muchas felicidades y estaremos atentos hoy a tu nombramiento, cuando así se resuelva en el Pleno para acompañarlo con orgullo y también con aliento. 

 

Muchísimas gracias. 

 

SENADORA CORA CECILIA PINEDO ALONSO: Senadora Mónica Fernández Balboa. 

 

SENADORA MÓNICA FERNÁNDEZ BALBOA: Gracias, senadora secretaria. 

 

Querida embajadora Bárcena: la verdad es que quiero darle nuevamente la bienvenida a esta casa y quiero decirle que nos sentimos profundamente orgullosas y orgullosos del nombramiento que hizo nuestro presidente de la República para que usted ocupe la titularidad de la Secretaría de Relaciones Exteriores. 

 

Usted cuenta con una amplia trayectoria y exitosa experiencia profesional, tanto a nivel nacional como internacional. 

 

En pocas palabras, usted representa con gran dignidad a nuestro país y, en particular, a las mujeres. Reciba nuestro beneplácito por ello. 

 

Como usted lo ha señalado, aquí estamos reunidas y reunidos para conocer su plan de trabajo y evaluarlo, con el fin de ratificar su designación como canciller mexicana. 

 

Su intervención inicial es una muestra de su gran capacidad y de su profundo conocimiento del acontecer internacional, lo cual es fundamental en estos tiempos en que las relaciones entre países y sociedades cada día se hacen más cercanas. 

 

Todos compartimos problemas, retos, pero también oportunidades. 

 

Y, en este sentido, quisiera que pudiera abundar en algunos temas que me parece que puedan marcar la agenda internacional de nuestro país, y que forman parte de la nueva política exterior que ha emprendido este Gobierno. 

 

En primer lugar, me quiero referir a la cooperación que es indispensable entre y con las naciones que se encuentran al sur de nuestra frontera. 

 

Como es natural, siempre existe la tendencia de ver hacia el norte; pero, desde su perspectiva y desde su experiencia como secretaria ejecutiva de la CEPAL, nos gustaría que nos comentara qué oportunidades hay para que los países de centro y Sudamérica, junto con el nuestro, puedan avanzar en la reducción de estas desigualdades que acaba de mencionar usted, de acabar un poco, reducir los privilegios y, por supuesto, avanzar en el desarrollo regional. 

 

De igual forma, me gustaría que ampliara un poco sus reflexiones sobre cómo seguir avanzando en la solución de uno de los temas que, como lo han mencionado ya aquí algunas compañeras y algunos compañeros, siguen afectando a grandes regiones de todo el mundo, que son los movimientos migratorios. 

 

Estos movimientos migratorios que se han convertido en un fenómeno social, con implicaciones en otros ámbitos, pero en específico el de derechos humanos, e incluso de la seguridad, y que ya se han hablado aquí de temas tan dolorosos como el de la trata de personas, los abusos a los migrantes. 

 

Y en este Senado, usted lo sabe, hemos expresado muchas veces que es indispensable el respeto irrestricto de los derechos de las personas, y que la migración debe hacerse con orden y con apego a la ley. 

 

Por eso le pregunto, y además sí quiero mencionar que, bueno, por eso le pregunto, ¿qué harán como acciones un poco más concretas la Secretaría de Relaciones Exteriores, bajo su dirección, para atender esta cuestión? 

 

Y tocando este tema que aquí también mencionaron y que nos preocupa a todas y a todos, este tema del que se habló, de lo que pasó en Ciudad Juárez, que nos dejó algunas percepciones que no, perdón, pero no terminamos de entender. 

 

Yo le pediría aquí, que lo platiqué con Laura Elena, poder conocer un poco más qué acciones contundentes podrían hacerse para que entendamos o que se definan las responsabilidades y/o potestades de las secretarías sobre el Instituto Nacional de Migración. 

 

Porque, bueno, hubo varias cosas que finalmente no supimos cómo poder abordar, desde el punto de vista de lo que estaba pasando. 

 

Y pues, bueno, hoy miles de hombres y mujeres cruzan por nuestro país, aspirando a alcanzar el sueño americano, pero nuestros vecinos, y en especial algunos gobernadores muy groseros, perdón que lo diga, pero como los de Texas y Florida, implantaron medidas irracionales y violatorias de los derechos humanos elementales.  

 

Celebramos todos estas acciones contundentes y tajantes que hizo al referirse a la barbaridad de las boyas en el río. 

 

Pero, ¿qué vamos a hacer? ¿Cómo abordar un tema tan complejo, ante visiones tan denigrantes de los derechos humanos y peligrosas para nuestros connacionales? Y que es un tema tan complejo y con tantas aristas que tenemos que seguir haciendo valer nuestra autonomía y el respeto a nuestra soberanía. 

 

Pero ante en estas gentes que no escuchan razones hay que, yo creo, tomar acciones un poco más, yo no soy la diplomática por eso lo pongo en manos de ustedes. 

 

Y, bueno, hoy que el cambio climático nos alcanzó, usted, sabemos que fue pionera aquí en México hace ya muchos años para ocuparse de este tema que hoy resulta vital. 

 

Nos gustaría también conocer su opinión sobre cómo abordar, desde el punto de vista de la Cancillería, este tema que finalmente usted lo explicó muy bien, tiende a modificar la situación económica y social de muchos países, incluyendo el nuestro, y por supuesto las relaciones entre las naciones. 

 

Y, finalmente, ya muy breve, me gustaría escuchar sus comentarios sobre las perspectivas y las acciones que se pueden desarrollar para seguir apoyando a las mujeres en este nuevo papel protagónico que estamos asumiendo en todos los campos. 

 

Usted lo mencionó ahora, que no es nada más con el número de posiciones que puedan estar, pero conocedora de su permanente lucha porque se reconozcan plenamente nuestros derechos, me parece muy relevante si nos pudiera compartir alguna de sus experiencias y sobre todo nos dé su punto de vista sobre qué o cómo debemos de seguir para cambiar la realidad de las mujeres en nuestro país y a nivel global. 

 

Muchas gracias, de verdad, por su tiempo. 

 

Muchas gracias por su explicación.  

 

Le reitero mi respeto, mi admiración. 

 

Cuente con nosotras y con nosotros como aliados en este Senado de la República. Segura de que habrá de realizar una gran labor al frente de la Secretaría de Relaciones Exteriores.  

 

Gracias. 

 

SENADORA CORA CECILIA PINEDO ALONSO: Y para cerrar este ciclo de preguntas y comentarios, tiene el uso de la palabra la senadora Bertha Caraveo. 

 

SENADORA BERTHA CARAVEO CAMARENA: Muy bien. 

 

Bueno. Yo también quiero aprovechar este momento para referirme a la Canciller designada, Alicia Bárcena, con mucho afecto, con mucho cariño. Con su venia, presidente. 

 

Y quiero mencionar que mediante esta intervención, le doy la más cordial de las bienvenidas, mi querida Alicia Bárcena, al Senado de la República. Y también a todas y todos nuestros compañeros senadores que están aquí presentes, y las personas también que vienen de Cancillería. Bienvenidos. 

 

Es un honor realmente contar con una figura de su experiencia y capacidad en estas significativas tareas, que recaen en la diplomacia y en las relaciones exteriores. También quiero mencionarles que voy a ser lo más breve posible, para escuchar de nuevo a Alicia Bárcena. 

 

Mi intervención no es en el sentido de hacer una pregunta, sino más bien es una reflexión; y como presidenta de la Comisión de Asuntos Fronterizos y Migratorios, he tenido la oportunidad de revisar su plan de trabajo y sin lugar a dudas, celebro su visión integral y compromiso palpable con la agenda migratoria. 

 

En una época en la que los desplazamientos humanos cobran una relevancia sin precedente en el ámbito internacional; es fundamental que adoptemos una perspectiva humanitaria justa y eficiente. Y veo que bajo su liderazgo, se trazan esos caminos. 

 

La migración no es sólo un fenómeno de tránsito, es una expresión de las aspiraciones, esperanzas y en muchas ocasiones, de las adversidades que enfrentan nuestros hermanos en la región. Su enfoque en esta materia, refleja no sólo una visión estratégica, sino también un profundo entendimiento de la dimensión humana que subyace en estos procesos. 

 

La canciller designada, compañeros, con su trayectoria y dedicación, nos da confianza de que abordará estos temas con la seriedad, responsabilidad y sensibilidad que requiere. 

 

Desde la Comisión de Asuntos Fronterizos y Migratorios, reitero nuestro pleno apoyo y disposición para colaborar estrechamente en la materialización de los objetivos trazados. 

 

Bienvenida, Alicia Bárcena. Estamos seguros y seguras, de que su contribución será esencial para fortalecer la posición y relaciones de nuestra nación en el escenario internacional, especialmente en estos tiempos tan complejos. 

 

Muchísimas gracias, Alicia Bárcena. 

 

SENADOR HÉCTOR VASCONCELOS Y CRUZ: Muchísimas gracias, embajadora Bárcena. 

 

A continuación, solicito al secretario técnico de la Comisión de Relaciones Exteriores, que acompañe a los comparecientes, si así lo desean, a la sala contigua, a fin de comenzar con el análisis y la votación de los proyectos de dictamen que nos ocupan esta tarde. 

 

Muchas gracias. 

 

Yo quisiera agradecer, en primer término, a la senadora Pinedo por su ardua labor de esta tarde, porque es muy complicado luego no perderse en las líneas de cosas de formato. 

 

Muchas gracias a todas y a todos por su presencia. 

 

Creo que hemos dado un paso muy importante en la defensa de nuestra política exterior. 

 

Agotado el orden del día, informo a los y las integrantes de la Comisión que, siendo las 20:05 horas del 4 de septiembre del 2023, se declaran concluidos los trabajos de la Comisión de Relaciones Exteriores. 

 

Pero aquí quiero hacer un recordatorio que me parece muy pertinente. Quisiera recordarles atentamente que el día de mañana tenemos reunión de Comisiones Unidas con la Comisión de América Latina y el Caribe, para dar lugar a la comparecencia de la nueva embajadora designada que nos represente en la República de Chile. 

 

Esto es particularmente urgente porque, como todos sabemos, el Presidente de la República hará una visita a Chile en los próximos días, y sería muy importante ya contar con la nueva embajadora en Santiago. 

 

Muchas gracias a todos y a todas, nuevamente, por su asistencia. 

 

A las 18:00 horas mañana.  

 

Muchas gracias.