Versión estenográfica del mensaje del senador Ricardo Monreal Ávila, presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado de la República, en el Cuarto Encuentro Nacional del Café: “La Nación del Café en el Senado”. 

 

La espléndida intervención de quienes me antecedieron y el discurso poético de la presidenta Olga Sánchez Cordero, poco me dejan por decir y por hablar. 

 

Pero quiero simplemente, darles la bienvenida a los participantes. De Puebla, bienvenida la gente de Puebla, de Cafetzal. 

 

De Chiapas, la Esperanza Café. 

De Coatepec y Huatusco, muchas gracias. Creo que por cierto, está el presidente municipal de Huatusco. Bienvenido, Ventura, y qué bueno que acompañas a los productores de tu tierra, porque es una actividad muy importante. 

 

También de Córdova, agradezco a Manuel García de Rococó, que tiene muchos años luchando por el día del barista y por el día del catador y el tostador. 

 

También vi de Aguascalientes, alguna representación. Bienvenidos. 

 

Y quiero expresarles a todos, que es un buen evento. No sólo porque están cubriéndolo los medios de comunicación, el Canal del Congreso, y lo que queremos es que haya una difusión nacional de este día, para beneficio de los productores de café, pero también de todos aquellos que trabajan alrededor de la  producción de café. 

 

Lo decía muy bien Félix Martínez, la importancia que reviste la producción y el trabajo, y todo lo que han ido avanzando estos últimos años. 

 

La economía global del café, es impresionante que en todo el mundo se inicia y se comienza la mañana, como dice la senadora Olga, con una buena taza de café. 

 

México ostenta el décimo lugar mundial de países productores de café. Exporta cerca de 124 mil toneladas, fundamentalmente hacia Estados Unidos y hacia la Unión Europea, como principales destinos; y emplea a casi medio millón de jornaleros, productores, en 14 estados de la República, aunque destacan los que aquí están presentes, en esta exposición. 

 

Es importante impulsar esta industria, por eso quisimos hacerlo aquí en el Senado. La Nación del Café en el Senado, porque queremos respaldar a todos los productores y queremos que sea un esfuerzo conjunto, de hombres y mujeres, de jóvenes, quienes impulsemos esta nación del café. 

 

Y, por eso quisimos llevarlo a cabo aquí, en el Senado de la República, porque es un símbolo, es un emblema, es una distinción que los productores de café hoy estén aquí. 

 

Que aquellos baristas, que aquellos catadores, que aquellos tostadores que han hecho de su profesión toda una vida, de placer y de gusto, nos compartan en este espacio su trabajo, su profesión y su entusiasmo. 

 

Por eso agradezco a todos que estén aquí, porque es  para nosotros, significativo. El lugar donde hacemos leyes, la Casa del Federalismo, donde participamos quienes representamos a la nación a través de las entidades federativas y el Pacto Federal, nos sentimos orgullosos, honrados de que esté aquí esta gran exposición: La Nación del Café en el Senado de la República. 

 

Enhorabuena. Tienen muchas actividades ahora, conferencias, incluso un concierto, una canción que han compuesto con motivo del Día del Barista, del Día del Productor de Café. 

 

Vamos a estar atentos y bienvenidos. Hay que hacerlo cada año, cada vez mejor, porque el café no puede entenderse sin la existencia del ser humano; el café nos da vida, energía y con él, mantenemos nuestra vida en dinámica y en actividad. 

 

Muchas gracias a todos los que vinieron ahora, mi respeto y mi reconocimiento. 

 

Buenos días y vamos a proceder, si les parece bien, a la inauguración. 

 

Siendo las 10:40 horas del día de la fecha, 7 de abril de 2020, declaro formalmente inaugurado el Cuarto Encuentro Nacional del Café “La Nación del Café en el Senado”. 

 

Le agradezco mucho a la Presidenta que esté aquí, en este evento, porque le da realce, es nuestra máxima autoridad en el Senado.,, mucho realce al evento. 

 

Y a Eduardo Ramírez, que es el presidente de la Comisión de Puntos Constitucionales del Senado. 

 

Obviamente a nuestros amigos y a todos ustedes, bienvenidos. 

 

Y, vamos a proceder también, simbólicamente, a romper o a cortar el listón. 

 

Muchas gracias. 

 

¡Enhorabuena! ¡Que viva el café!