Versión estenográfica del mensaje del presidente de la Mesa Directiva del Senado de la República, Gerardo Fernández Noroña, en la Ceremonia Conmemorativa de los 200 años de la República.
Muy buenas noches.
Es un altísimo honor, con mucho cariño y respeto acompañar a la compañera presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, presidenta constitucional de los Estados Unidos Mexicanos.
Al presídium, mi respeto.
Y, como aquí se ha expresado, inició nuestra patria con un efímero imperio y 100 de los 150 diputados que decidieron que fuéramos república, fueron enviados a la cárcel por el entonces emperador Agustín de Iturbide.
Triunfo la república, la idea de una república federal, y en 1824, hace 200 años empiezan las vicisitudes de nuestra patria, golpes de Estado, intervenciones extranjeras, la pérdida del 60 por ciento del territorio, un imperio extranjero con Maximiliano, la Revolución.
Y hemos llegado aquí, después de 200 años, nos habíamos tardado un poco, y en esta revolución sin violencia, que es la Cuarta Transformación, llega al frente de los destinos de la patria una mujer, la presidenta constitucional Claudia Sheinbaum Pardo.
Y no cualquier mujer; una mujer humanista, comprometida, de izquierda, consecuente entregada y amorosa con la patria.
Pero no solamente eso, dicen que somos una dictadura, singular dictadura donde es el pueblo el que manda y donde, por mandato popular, el Poder Ejecutivo se eligió el 2 de junio con un amplísimo respaldo para nuestro movimiento; el Poder Legislativo también y, a partir del primer domingo de junio del 2025, por el voto universal, secreto y directo, nuestro pueblo se elegirá a los integrantes del Poder Judicial, a las personas juzgadoras a lo largo y ancho de la patria.
Una revolución profundísima, única en el mundo, donde por primera vez todas las personas integrantes del Poder Judicial serán determinadas por nuestro pueblo.
Que se oiga bien y que se oiga lejos, en México manda el pueblo de México, comandado por nuestra comandanta, nuestra presidenta constitucional Claudia Sheinbaum Pardo.
¡Larga vida a la república federa!
¡Larga vida a la revolución sin violencia, que es la Cuarta Transformación!
¡Larga vida a los procesos de democratización de nuestra patria!
¡Y larga vida al rebelde e invencible pueblo de México!
Muchas gracias por su atención.