Versión estenográfica de la participación del senador Adolfo Gómez Hernández, del Grupo Parlamentario de Morena, sobre la conmemoración de la fundación de Tenochtitlán, en la Sesión Ordinaria de este día.
Muchas gracias, Presidenta.
Con el permiso de todas y de todos.
Compañeras y compañeros senadores:
Claro, aunque las y los historiadores nos mencionan varias fechas en relación a la fundación de Tenochtitlán, es destacable que tiene relevancia el 13 de marzo como una de las fechas de este acontecimiento, año 1325.
Las otras fechas refieren que fue el 12 de diciembre o el 18 de julio.
Hoy no conmemoramos, pues, asunto menor, pues se trata de la fundación de México Tenochtitlán; en donde nuestros antepasados, los mexicas iniciar su ciudad hacia el año 1325.
Lo hicieron sobre el lago de Texcoco, en donde se da este mítico encuentro del águila devorando a la serpiente sobre un nopal, elementos que hoy forman parte de nuestra identidad nacional, presente en nuestro símbolo patrio y que es sinónimo del más alto respeto.
En este recinto damos la importancia que corresponde a esta emblemática fecha, como lo hace el Templo Mayor y muchos otros espacios ancestrales y cívicos en nuestro país.
A más de 700 años, recordamos a mujeres y hombres indígenas que, provenientes de la zona geográfica del norte iniciaron un viaje en busca seguramente de mejores condiciones climáticas y de alimentos, que les permitieran desarrollarse en su cultura, su mística y sus conocimientos, porque tenían conocimientos ancestrales, aunque esto sea negado luego por otras culturas que se sintieron antes y ahora aunque con menos frecuencia siguen sintiéndose muy superiores, un asunto que debemos rechazar, porque no venimos de culturas en donde las mujeres y los hombres estuvieron sentados, muriendo de hambre y de sed a la espera de los invasores, que adquirir conocimiento por mucho que nos sorprenda.
Aún hay quienes lamentablemente afirman que las invasiones son motivo de celebrar por sus beneficios. Sobre estas afirmaciones debemos siempre ser firmes y mantener nuestro rechazo, ya lo hemos mencionado en otros espacios y foros, a más de 500 años de la memoria histórica del pueblo de Tenochtitlan seguimos resistiendo en todo el país, mantenemos nuestra cultura y nuestra identidad, nuestra visión sobre los elementos de la naturaleza y nuestra medicina por muchos años fue negada.
Hasta ahora que, en este mismo Recinto legislativo, gracias a mujeres y hombres comprometidos están reconociendo dignamente nuestra medicina tradicional.
Hoy es una buena oportunidad para rememorar nuestra lucha y nuestra resistencia que contra viento y marea ha resistido los embates de quienes no nos quieren ver, porque pareciera que así se mantienen aliviados, manteniendo el olvido sobre nuestros orígenes.
Este es uno de los días, con relevancia y con memoria en nuestro país, como una manera de homenajear a nuestros pueblos originarios y de reconocer su grandeza, su mística y su herencia milenaria.
Este día, los pueblos originarios le decimos al mundo que aquí estamos, aquí vivimos y aquí resistimos.
¡Vivan los pueblos originarios!
¡Vivan los pueblos mesoamericanos! ¡Viva México! ¡Viva la Cuarta Transformación!
TODOS: ¡Viva!