Versión estenográfica del mensaje de la senadora Olga Sánchez Cordero, presidenta de la Mesa Directiva del Senado de la República, en la junta previa al inicio del Primer Año de Ejercicio de la LXV Legislatura.
Compañeras y compañeros senadores:
Es un honor compartir nuevamente con ustedes este recinto de la democracia, sede del debate, de la libre manifestación de las ideas y principalmente del consenso republicano.
Me llena de entusiasmo regresar al Senado de la República, en donde siempre me he sentido en casa. Así me lo han hecho sentir ustedes desde el primer día y les estoy muy agradecida.
Ser representante de las entidades de la Federación en esta Cámara, nos permite a cada uno, a cada una de los aquí presentes, continuar aportando al momento histórico que vive este país.
Sí, un momento de cambio y de transformación, liderada por los ideales y principios que representa la Cuarta Transformación de Igualdad, Justicia y no Discriminación, que estoy segura que estos valores, todas y todos los compartimos.
De manera personal y profesional, fue un honor y un privilegio poder servir al pueblo de México desde la Secretaría de Gobernación, como la primera mujer en el cargo. El trabajo que realizamos frente a esta Secretaría, demostró que es posible ejercer el poder y hacer política, pero de una manera renovada.
También me dejó claro que aún hay mucho por hacer para fortalecer la gobernabilidad democrática del país y lograr que las y los mexicanos, puedan ejercer y defender sus derechos a plenitud.
Estoy convencida de que la tarea de transformar a México tiene diversos escenarios de acción. Y uno de los más virtuosos es el escenario legislativo, por ello, como senadoras y senadores, somos defensores de la democracia y de los valores que le dan vida al Pacto Federal.
Asumir la Presidencia de la Mesa Directiva, para mí es un honor. Aportaré toda mi experiencia para trabajar desde el diálogo y del consenso; para impulsar acuerdos y lograr la coordinación de las diversas voces políticas, en beneficio del pueblo de México; así como lo he hecho en todos los espacios en los que he defendido los derechos humanos y los derechos de todas y todos.
Estoy convencida de que la labor del Poder Legislativo es transparente, es honesta y es inclusiva. Con esta idea, llego a este cargo a sabiendas de que la Sexagésima Quinta Legislatura tiene la responsabilidad de actuar de manera decidida, para concretar en los próximos tres años, las reformas primordiales para la edificación de un México más justo, más incluyente, más equitativo.
Pondré todo mi empeño en conducir los esfuerzos de esta Cámara de Senadores en ese sentido.
La agenda legislativa se diseñó pensando en las necesidades de la sociedad mexicana, pero también en el porvenir democrático.
Esta agenda legislativa es fuerte, es integral; pero también requiere de sinergias efectivas para llevarse a cabo.
Todas y todos sabemos que dar soluciones a los planteamientos y exigencias sociales que nos atañen no es fácil, pero es lo justo. Requiere dejar atrás diferencias políticas para enfocarnos en lo sustancial: el bienestar de las y los mexicanos.
A mis colegas senadoras, les digo que me incorporo a participar actuando por y para las mujeres de México. Sigamos juntas, sigamos juntas en el gran trabajo que ustedes ya están realizando.
Sí, juntas, abriendo espacios para que más mujeres hagan historia.
La participación plural tiene un efecto multiplicador y nos permitirá luchar por lo que requiere este país.
Seguiremos con las puertas abiertas para dialogar de manera franca, sin prejuicios ideológicos y actuaré siempre de esa manera, porque la lealtad va más allá de la alternancia, va más allá de los partidos. La lealtad más grande es con nuestro pueblo, con el pueblo de México.
Quiero aquí agradecer, muchas, muchas gracias a todos los grupos parlamentarios por haber depositado su confianza en mi persona.
Al Partido Acción Nacional, al Partido Revolucionario Institucional, al partido Movimiento ciudadano, al Partido Verde Ecologista de México, al Partido Encuentro Social, al Partido del Trabajo, al Partido de la Revolución Democrática, al Partido de Morena y al senador independiente. Muchas, muchas gracias.
Estaré en comunicación permanente con cada una y cada uno de los integrantes de los grupos parlamentarios, como lo hice en mi función de Secretaria de Gobernación con todos los gobernadores de este país; con la gobernadora y la Jefa de Gobierno, que estuvimos en una constante, fluida y respetuosa comunicación.
Y compartirles que cuando presenté mi renuncia, recibí un gran cúmulo, no solamente de reconocimientos sino también de que me van a extrañar muchos de estos gobernadores, la gobernadora y la Jefa de Gobierno.
Desde aquí les agradezco sus mensajes que en llamadas telefónicas y también por diversos medios electrónicos hicieron a mi persona.
Quiero desde aquí decirles a todas y a todos los gobernadores, porque aquí estamos en el Pacto Federal, que fue para mí un honor, de verdad, y yo diría hasta un placer tener esta comunicación permanente con todos ellos, con la gobernadora y con la Jefa de Gobierno.
Muchas gracias.