Número - 863 

• 70 por ciento de pescadores ribereños no pueden pagar sus créditos por falta de programas de apoyo y bajo presupuesto, alerta senador Mario Zamora.

Durante la temporada de pesca pasada, que se llevó a cabo de septiembre de 2021 a marzo de 2022, se obtuvo una producción total de 27 mil toneladas de camarón de altamar, cantidad similar a la del ciclo anterior; sin embargo, los productores estiman que para 2023 estos números bajarán, refirió el senador Mario Zamora Gastélum. 

Lo anterior, agregó, debido a la crisis financiera y dificultades que se presentan a los pescadores ribereños, al grado que el 70 por ciento no puede pagar sus créditos, por la falta de programas de apoyo y bajo presupuesto. 

En ese contexto, el legislador del PRI pidió a las secretarías de Hacienda y Crédito Público y de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER) que, a través de la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca, implementen un plan emergente para restructurar los créditos de productores pesqueros e impulsar la operación de “créditos blandos”, en coordinación con la Secretaría de Pesca y Acuacultura de Sinaloa. 

Además, en el punto de acuerdo que inscribió en la Gaceta Parlamentaria del 14 de febrero, solicitó al titular de la SADER que informe a esta soberanía sobre la situación del sector pesquero en Sinaloa, los índices de producción, condiciones laborales y dispersión de programas federales estatales para los productores pesqueros y acuícolas. 

Zamora Gastélum refirió que, de acuerdo con la Cámara de la Industria Pesquera de esa entidad, el alto costo del diésel, que oscila en 24 pesos por litro, las pocas capturas originadas por las bajas temperaturas y la pesca ilegal, así como la sobreoferta de camarón en el mercado de Estados Unidos, golpean de forma severa a dicho sector. 

Esa situación tiene repercusiones en Mazatlán, donde hubo recortes de la mitad de los pescadores y en las plantas congeladoras, debido a que muchas de ellas pararon sus actividades por la falta de producto, lo que provocó el desempleo de tres mil personas tan sólo en ese municipio.  

Además de que se estima que hay más de tres mil pescadores que están sin trabajo, 440 barcos están amarrados, y que el costo del diésel que en promedio es de 24 pesos el litro; cuando una embarcación utiliza cerca de 50 mil litros de diésel para un viaje.  

Por su parte, de acuerdo con el presidente de la Federación Regional de Sociedades Cooperativas de Mazatlán, actualmente hay 40 cooperativas debidamente constituidas, con un total de mil 360 pescadores que llevan a cabo actividades de captura en altamar.  

Quienes para realizar sus actividades requieren apoyo de los gobiernos, a efecto de atender sus necesidades más básicas, como la obtención de herramientas de trabajo para actividades de altamar, barcos pesqueros, bahías, turismo, acuacultura y maricultura.  

En el punto de acuerdo, que se turnó a la Comisión de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Rural, Zamora Gastélum enfatizó que “es notable la falta de apoyos al sector pesquero y a nuestros productores que con su trabajo alimentan la economía de mi estado y del país”.