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Número - 572

  • Reyna Celeste Ascencio Ortega refrenda compromiso de los legisladores por construir la legislación que permita que todas las personas vivan su vida en libertad, igualdad y dignidad.

 

La presidenta de la Comisión de Derechos Humanos, Reyna Celeste Ascencio Ortega, aseguró que a 76 años de proclamada la Declaración Universal de Derechos Humanos, es necesario mantener vigentes sus principios para que se garantice el ideal de paz y de justicia social para todas las personas.

 

Al inaugurar el foro virtual “Declaración Universal de los Derechos Humanos, avances y retos para México”, la legisladora de Morena manifestó la importancia para que todas las personas vivan su vida en libertad, igualdad y dignidad, ante ello, consideró necesario reflexionar sobre los derechos de todas las personas y analizar los retos que aún tenemos pendientes.

 

En este sentido, mencionó que las propuestas que surjan de este foro para establecer políticas públicas en la materia serán remitidas a las áreas correspondientes y las que tengan un alcance legislativo se buscará convertirlas en iniciativas.

 

Ascencio Ortega se pronunció por erradicar la exclusión y segregación de los grupos vulnerables de la sociedad y por crear las mismas oportunidades para todas y todos, mediante la eliminación de las barreras que les impiden acceder al disfrute de sus derechos.

 

Recordó que la Declaración Universal de Derechos Humanos se adoptó por las Naciones Unidas el 10 de diciembre de 1948 y se trata de un documento que sirve de plan de acción global para la libertad y la igualdad, así como para proteger los derechos de todas las personas, en todos los lugares.

 

“Fue la primera vez que los países acordaron las libertades y derechos que merecen protección universal, para que todas las personas vivan su vida en libertad, igualdad y dignidad”, indicó.

 

La presidenta de la Comisión para la Igualdad de Género, Martha Lucía Micher Camarena, sostuvo que la garantía de los derechos para la mujer todavía presenta resistencias, como en el caso a decidir sobre nuestro cuerpo, pues, no obstante que en México en 18 estados el aborto seguro es legal hasta las 12 semanas, en 17 entidades todavía está prohibido, lo que constituye una forma de discriminación de género y, en el caso de los embarazos forzosos, una forma de tortura. 

 

Iván Tagle Durand, director general de Yaaj México, consideró que en el país existen obstáculos para implementar las recomendaciones internacionales que garantizan los derechos fundamentales de los integrantes de la comunidad LGBTT, porque hay una falta de homologación en la legislación.

 

Georgina Diédhiou Bello, directora de Promoción de Cultura y No Discriminación del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred), reconoció que los avances que se han dado en esta materia no son suficientes, porque se requiere una constante modificación a las leyes y políticas públicas en materia de derechos fundamentales.