Número - 168
- Si esta droga se arraiga como sustancia de abuso en nuestro país, el panorama será desolador, advierte senador Rafael Espino de la Peña.
La Comisión Permanente solicitó a las secretarías de Salud, Seguridad Pública y Educación Pública, así como a la Fiscalía General de la República que, en coordinación con las 32 entidades federativas, fortalezcan las acciones y políticas públicas de información, difusión, concientización, prevención, diagnóstico, tratamiento, seguimiento y combate a la adicción al fentanilo.
El presidente de la Comisión de Justicia del Senado, Rafael Espino de la Peña, advirtió que “si el fentanilo se arraiga como sustancia de abuso en nuestro país, el panorama será desolador, por lo que debemos mirarnos en el espejo de nuestro vecino del norte, para vislumbrar lo que podría ser el futuro de México”.
Refirió que, en 2021, las muertes por sobredosis de esta droga en Estados Unidos superaron las cien mil y la tendencia va a la alza, no sólo es sostenida, sino exponencial.
Su elevado potencial activo, el muy estrecho margen entre la dosis recreativa y la dosis letal, así como la falta de abordajes eficaces para el tratamiento de su adicción, alertó el legislador, convierten al fentanilo en una seria amenaza para nuestro país.
Espino de la Peña enfatizó que este estupefaciente no sólo sustituyó a la heroína directamente, sino que también surgió un mercado de píldoras falsas que simulan ser opioides de grado farmacéutico.
Además, en años recientes se ha comenzado a utilizar para cortar otras drogas como la cocaína, con el fin de volverlas más atractivas y adictivas.
“El impacto de la epidemia de fentanilo en nuestra sociedad es inconmensurable, aunque aún no se haya manifestado en nuestro país el pleno potencial de devastación social de esta sustancia”.
Si bien es razonable asumir que una parte muy significativa de la violencia y otros fenómenos criminales que se registran en México son relacionados con el fentanilo, su impacto en nuestra sociedad hasta el momento es secundario, refirió el senador.