Versión estenográfica del Informe del secretario de Agricultura y Desarrollo Rural, Víctor Villalobos Arámbula, durante su comparecencia ante la Comisión de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Rural del Senado de la República, que preside la senadora Nancy Sánchez Arredondo, como parte de la Glosa del Cuarto Informe de Gobierno.
SENADORA NANCY SÁNCHEZ ARREDONDO: Muy buenos días tengan todos ustedes. Sean bienvenidos al Senado de la República.
Bienvenido, secretario Villalobos, a esta soberanía, a la Comisión de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Rural.
Agradezco enormemente la presencia de todos ustedes, de quienes lo acompañan, de mi coordinador parlamentario y presidente de la JUCOPO; del presidente de la Mesa, de mis compañeros que fungen como secretarios, ambos: el senador Martín del Campo y el senador Raúl Elenes. Muchas gracias.
Para quienes formamos parte de esta comisión, por supuesto que nos interesa no sólo escuchar su informe, secretario, su mensaje; sino establecer un diálogo constructivo y propositivo que nos permita abonar de nuestra parte en la consolidación de políticas públicas y sobre todo de acciones directas que realiza SADER para beneficio de los agricultores, silvicultores, ganaderos y pescadores que conforman nuestro amplio y dinámico sector primario.
El sector agrícola de nuestro país, es orgullosamente le más dinámico en cuanto a crecimiento productivo se refiere, y así lo dice su crecimiento sostenido.
Sólo en el 2021 el valor de la producción de cultivos agrícolas en México superó los 649 millones de pesos mexicanos; lo que representó un incremento alrededor del 2.9 en comparación con el reportado en el 2020.
Recordamos de manera muy especial la capacidad de producción del sector primario en momentos muy complicados para México y para el mundo. Lo de la pandemia, prácticamente hincó al planeta entero, nuestro sector primario nunca dejó de trabajar y de producir y de llevar los alimentos a nuestras mesas.
A pesar de todo, nuestros campesinos y campesinas, nuestros pescadores y pescadoras, y todas las personas que participan en la actividad agroalimentaria; siguieron llevando alimentos no sólo a los mexicanos y a las mesas de los mexicanos, también más allá de las fronteras.
Sabemos pues, que este enorme esfuerzo es primero que nada gracias al empuje de los productores de manera directa; pero por supuesto que mucho tiene que ver la voluntad del Gobierno Federal, del presidente de la República y de su Secretaría. Es una voluntad del gobierno evitar que distorsiones generalmente inesperadas como la pandemia, el cambio climático, conflictos bélicos externos, dañen la buena marcha del sector primario de nuestro país.
Lo reconocemos, secretario, sabiendo las dificultades económicas y presupuestales con las que la dependencia a su cargo ha tenido que afrontar, igual que todos, en un momento difícil de estrechez económica derivada de reducciones presupuestales, de ejercicios anteriores irresponsables, que dejaron a México temblando.
Y realmente lo han hecho bien, con una visión encaminada a fortalecer a los agricultores, a los pescadores más pobres de nuestro país, que son la gran mayoría de quienes viven en el campo mexicano.
Celebramos entonces también que el proyecto de Presupuesto Federal 2023, hay un incremento en poco más de 26 por ciento, con una alta preferencia a los programas prioritarios.
Secretario Villalobos, tenga usted la certeza de que todos los que estamos aquí, que integramos la Comisión y los que están igualmente interesados en los temas del campo, al margen de nuestros diferendos políticos de cualquier color y cualquier postura, estamos interesados sobre todo en que el campo siga caminando e impulsar las acciones al sector primario, que le tenemos una gran admiración y un gran respeto.
Muchísimas gracias y bienvenidos todos.
Gracias, compañeros. Gracias a todos.
Doctor Víctor Villalobos Arámbula, sea usted bienvenido a esta Soberanía a la que se le convocó en el marco del análisis del Cuarto Informe de Gobierno del Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Agradezco también la asistencia del ingeniero Víctor Suárez. Gracias, ingeniero Subsecretario de Autosuficiencia Alimentaria.
A todos los titulares de las dependencias aquí presentes, sectorizadas; a la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, que amablemente nos acompañan en esta comparecencia.
Igualmente, le doy la bienvenida a su equipo, a su personal técnico de trabajo.
Señor Secretario, asiste usted en cumplimiento a una obligación derivada del segundo párrafo del artículo 69 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, por lo que este acto se realiza bajo los principios constitucionales que establece la relación corresponsable entre los poderes Ejecutivo y Legislativo.
Como es de su conocimiento, el artículo 69 constitucional, compromete a los servidores públicos que asistan en comparecencia a informar bajo protesta de decir verdad.
En consecuencia, procederemos a tomarle la protesta correspondiente en este momento.
Le solicito amablemente al senador secretario, Juan Antonio Martín del Campo, solicite a todos ponerse de pie.
SENADOR JUAN ANTONIO MARTÍN DEL CAMPO: Gracias.
Por instrucciones de la Presidenta, solicito a todo el público ponernos de pie.
SENADORA NANCY SÁNCHEZ ARREDONDO: Gracias, Secretario.
Doctor Víctor Villalobos, en términos de lo dispuesto en el artículo 69 de la Constitución de los Estados Unidos Mexicanos, le pregunto:
¿Protesta decir verdad en la información que exponga a esta Asamblea y ante las preguntas que le formulen las senadoras, los senadores de la República?
SECRETARIO VÍCTOR VILLALOBOS: Sí protesto.
SENADORA NANCY SÁNCHEZ ARREDONDO: De no cumplir con el compromiso que asume ante esta Asamblea, la Cámara de Senadores estará en posibilidad de iniciar los procedimientos a que haya lugar.
Por favor, tomar asiento.
Respetuosamente le solicito al senador secretario, Martín del Campo, dé lectura al acuerdo aprobado por la junta directiva para normar esta comparecencia.
Bienvenida al senador Narro. Gracias, senador Narro, por estar aquí presente. Bienvenido.
SENADOR JUAN ANTONIO MARTÍN DEL CAMPO: Doy lectura al acuerdo de conformidad, acuerdo de la Junta de Coordinación Política, por el que se establece el calendario y las normas para llevar a cabo la comparecencia de las y los funcionarios públicos, con motivo del análisis del Cuarto Informe de Gobierno del Presidente de los Estados Unidos Mexicanos, licenciado Andrés Manuel López Obrador.
La Junta Directiva da a conocer la siguiente metodología para desahogar la comparecencia del doctor Víctor Villalobos Arámbula, secretario de Agricultura y Desarrollo Rural, a efecto de llevarse a cabo el jueves 20 a las 11:00 horas, en el Salón de la Comisión Permanente en el sótano uno de las instalaciones del Senado de la República.
Primero. El doctor Víctor Villalobos Arámbula contará con 20 minutos para hacer una exposición en relación al Cuarto Informe de Labores de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural.
Segundo. Habrá dos rondas de participaciones para los integrantes de las comisiones.
En la primera ronda, hará uso de la voz hasta por cinco minutos los integrantes de los grupos parlamentarios, de acuerdo al siguiente orden: Grupo Parlamentario del Partido de la Revolución Democrática; Grupo Parlamentario del Partido Verde Ecologista de México; Grupo Parlamentario del Partido Revolucionario Institucional; Grupo Parlamentario del Partido Acción Nacional y Grupo Parlamentario de Morena.
Tercero. El compareciente tendrá 10 minutos para responder a las inquietudes de las y los senadores.
Cuarto. La segunda ronda de intervenciones por parte de las y los legisladores por cada grupo parlamentario contará hasta por 10 minutos, quedando a consideración de cada fuerza política la designación de los participantes para ocupar el tiempo asignado.
Quinto. El compareciente contará hasta con 15 minutos para responder a las inquietudes de las y los senadores.
Firma: La Junta Directiva. Senadora Nancy Guadalupe Sánchez Arredondo, Presidenta. El secretario Raúl de Jesús Elenes Angulo, secretario. Y el senador Juan Antonio Martín del Campo Martín del Campo, secretario.
Es cuánto, Presidenta.
SENADORA NANCY GUADALUPE SÁNCHEZ ARREDONDO: Gracias senador secretario.
En consecuencia y en cumplimiento del resolutivo del acuerdo leído, procederemos a la intervención inicial del doctor Víctor Villalobos Arámbula, secretario de Agricultura y Desarrollo Rural, hasta por 20 minutos.
Señor Secretario: Tiene usted el uso de la palabra.
Adelante.
SECRETARIO VÍCTOR VILLALOBOS ARÁMBULA: Muchas gracias, señora Presidenta Nancy Sánchez.
Saludo al senador Martín del Campo. Saludo también al senador Raúl Elenes.
Igualmente agradezco la presencia del senador Alejandro Armenta, presidente de la Mesa Directiva.
Saludo con aprecio a las señoras y senadores miembros de la Comisión de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Rural que nos acompañan en sala y también los que nos acompañan en forma virtual. Igualmente, a las senadoras y senadores que hacen presencia en este día.
Muchas gracias por estar aquí.
Agradezco la oportunidad de continuar el diálogo franco y respetuoso que hemos sostenido a lo largo de casi cuatro años.
En esta ocasión, con motivo de la Glosa del IV Informe de Gobierno del Presidente de la República, el licenciado Andrés Manuel López Obrador, en su capítulo dedicado a la autosuficiencia alimentaria y al rescate del campo.
Quienes estamos en este Recinto compartimos una convicción: Este sector es crucial para el desarrollo del país.
Por eso trabajamos para consolidarlo como un pilar del crecimiento económico y una fuente de bienestar, tanto para las familias que habitan en los territorios rurales, como para la población que depende de su producción para alimentarse.
Entiendo que sus posicionamientos, dudas, comentarios y críticas que ustedes expresen el día de hoy, no tiene otro propósito que el de avanzaren estos objetivos.
Espero que como fruto de este diálogo acerquemos posiciones en favor siempre de México.
Asumo que también compartimos la legítima preocupación por la difícil situación que, derivada de un entorno internacional particularmente complejo, está afectando a nuestro país, así como al resto del mundo.
Como suele ocurrir, las crisis afectan de manera diferenciada a países y a grupos sociales y siempre sus consecuencias terminarán agravando la situación de los más vulnerables, si no es que se toman medidas para evitarlo.
En los últimos años, han confluido factores que han alterado la normatividad de las cadenas productivas y comerciales a nivel global; la irrupción de la pandemia de la Covid-19 y la crisis económica aparejada a ella, así como los fenómenos climáticos adversos en varias partes de nuestro planeta.
La principal consecuencia ha sido una mayor presión sobre los precios de los alimentos y las materias primas, la cual se evita y varía dando desde siempre altos eventos y también efectos ya mencionados.
A esta problemática se sumó el incremento de los costos de la energía y el precio de los insumos necesarios para la producción agrícola, debido al conflicto bélico en Europa del este, que involucra a dos grandes productores mundiales de granos y de fertilizantes, tanto nitrogenados como potásicos.
Estas crisis superpuestas en el tiempo, han confirmado que los principales objetivos para el sector, trazado por la administración del presidente López Obrador, son correctos y tienen hoy por hoy mayor vigencia.
Una evidencia clara de su pertinencia, es que durante la pandemia el campo no se detuvo, no hubo desabasto de alimentos ni tampoco hubo compras de pánico. Desde el inicio, esta Administración se propuso alcanzar la seguridad alimentaria con soberanía, incrementando la producción nacional para garantizar a todas las familias mexicanas, en todo momento, acceso físico, social y económico, alimentos suficientes y nutritivos.
Esta respuesta la hicimos advirtiendo de los enormes riesgos que corren al depender de las importaciones de alimentos básicos, principalmente maíz, frijol, trigo, arroz, leche, carnes de res, de cerdo y de ave; un riesgo que las actuales circunstancias han confirmado.
También se estableció la prioridad que tendría en las políticas públicas el combate a la pobreza en el campo, destinando apoyos directos sin intermediarios, a los productores de pequeña y mediana escala, quienes constituyen el 85 por ciento de los agricultores, de los ganaderos, pescadores y acuicultores del país; y producen el 50 por ciento de los alimentos que consumimos.
Dicho lo anterior, permítanme reportar algunos de los avances:
A junio del 2022, el Programa de Producción para el Bienestar, registró un avance del 84 por ciento.
El Presupuesto de Egresos de la Federación del 2022, asignó 14 mil 7 millones de pesos para la operación del programa; y para junio ya se habían entregado 12 mil 800 millones.
Los apoyos productivos directos se destinaron, en su mayor parte, a la producción de granos básicos: maíz, frijol, trigo y arroz y de café, caña de azúcar, cacao, miel, amaranto y chía; beneficiando a 1 millón 807 mil 367 productores.
Además de estos apoyos directos, estamos brindando el acompañamiento técnico que permita fortalecer la capacidad productiva de estos agricultores.
Cabe resaltar que 34 por ciento de los beneficiarios son mujeres productoras, además de tener presencia en mil 33 municipios con población indígena. Adicionalmente, el 61 por ciento de los productores apoyados se encuentran en la región del sur-sureste; esto con el propósito de ayudar más a los sectores y regiones más desfavorecidas.
También continuamos con la estrategia de fomento al financiamiento formal de los beneficiarios del Programa Producción para el Bienestar, a través del Fondo Nacional de Garantías de los sectores Agropecuario, Forestal, Pesquero y Rural, FONAGA, a fin de que los productores de pequeña escala de arroz, maíz y café, que nunca habían tenido posibilidad de acceso a un crédito, pudieran incrementar su producción de granos haciendo uso de este servicio.
El Programa de Fertilizantes para el Bienestar, busca incrementar la producción de los cultivos prioritarios de los productores de pequeña escala. Hoy, con las ya mencionadas dificultades por las que atraviesan los mercados globales de estos insumos; el programa se vuelve verdaderamente estratégico. Y para el Gobierno Federal es una prioridad encontrar alternativas como los bioinsumos, que permiten mantener y ampliar la producción de los alimentos básicos, y avanzar hacia una autosuficiencia alimentaria y hacia una agricultura cada vez más sustentable.
En 2021, este programa benefició a 394 mil 983 productores de pequeña escala, con 180 mil 885 toneladas de fertilizantes para atender 600 2 mil 949 hectáreas de maíz, frijol, hortalizas y arroz; en los estados de Guerrero, Morelos, Puebla y Tlaxcala.
Para el 2022, con la incorporación de Chiapas, Oaxaca, Durango, Nayarit y Zacatecas; al 30 de septiembre se han apoyado 717 mil productores, superando la meta de 700 mil establecidos en el PASIC.
El Programa de Precios de Garantía es clave para aumentar los ingresos de los pequeños productores y al mismo tiempo, la oferta de alimentos básicos.
Entre septiembre de 2021 y junio de 2022, tuvo una derrama económica de 6 mil 61.5 millones de pesos en beneficio de 65 mil 741 pequeños y medianos productores de maíz, frijol, arroz, trigo panificable y leche.
Este programa ha propiciado un incremento de 21.5 por ciento real en el ingreso de los productores rurales, respecto al precio medio rural de sus productos en el año 2018.
Asimismo, fue determinante para una producción de 3 millones 569 mil 918 toneladas adicionales de granos, y 335 millones de litros de leche a la disponibilidad de los alimentos.
Entre septiembre del 2021 y junio del 2022, a través del Programa de Adquisición de Leche Nacional, a cargo de LICONSA, se adquirió leche fresca de 3 mil 323 productores nacionales en 14 entidades federativas, por un volumen de 335 millones de litros, lo que representa una derrama económica de 2 mil 966.4 millones de pesos.
El conjunto de acciones emprendidas mediante los programas prioritarios, benefició a cerca de 30 millones de personas, entre productores agropecuarios y apicultores, y habitantes de las localidades rurales y zonas rurales de alta y muy alta marginación, a quienes se le ha incluido en las actividades productivas del campo y se les ha garantizado su acceso a la alimentación.
Además, ha sido posible disponer de una canasta básica alimentaria Segalmex, la cual se distribuye a través de más de 24 mil tiendas en las zonas rurales y urbanas de alta y muy alta marginación, donde la población ha tenido un significativo ahorro, ya que esta canasta se vende a un 19.7 por ciento menos que en las tiendas convencionales.
Aquí hay que resaltar que entre septiembre del 2021 y junio del 2022, el Programa de Abasto Rural de DICONSA amplió su cobertura en 2 mil 674 puntos de atención para llegar a 25 mil 881 localidades en 2 mil 216 municipios; lo que representa el 90.2 por ciento del total nacional.
En el primer semestre de este año, el Programa de Abasto Social de Leche, atendió mensualmente y en promedio 5.4 millones de personas. De ellas, 3.6 millones, o sea el 66.7 por ciento, se localizaron en el ámbito urbano y 1.8 millones, 33.7 por ciento, en zonas semiurbanos rurales, quienes adquirieron leche LICONSA a precios por debajo de lo que se vende en tiendas comerciales.
El sector pesquero y acuícola, apoyado por BIENPESCA, contribuye tanto a la autosuficiencia alimentaria como al bienestar de la población dedicada a las actividades pesqueras y acuícolas a quienes se les otorga un apoyo económico directo individual de 7 mil 200 pesos.
En 2021, se entregaron mil 427.3 millones de pesos a 198 mil 234 pescadores y acuicultores, 22 por ciento de los cuales fueron mujeres.
En el primer semestre del 2022, se han beneficiado a 117 mil 524 pescadores y acuicultores ubicados en 29 de las 32 entidades federativas, de las cuales 21 mil 227 fueron mujeres.
Además de estos programas prioritarios, la SADER y sus entidades coordinadas, continuaron brindando apoyo a todos los productores, mediante la entrega de bienes públicos, lo que permitió que nuestro país continúe siendo una potencia agroalimentaria mundial, gracias a la productividad y a la competitividad de sus exportaciones.
En el 2021, nuestro sector continuó mostrando un comportamiento positivo.
El PIB agroalimentario tuvo un crecimiento del 2.6 en ese año; y en el primer semestre del 2022, este año fue de 2.9 por ciento.
Asimismo, al cierre del año agrícola 2021, se reportó un crecimiento del volumen de la producción de 1.3 por ciento en los primeros seis meses del 2022, y así ha sido y ahora está creciendo al 1.6 por ciento anualizado.
La producción de alimentos en el 2021, ascendió a 294 millones de toneladas y las expectativas para el año 2022 son de 297.2 millones, uno por ciento más que el año anterior.
Este crecimiento será resultado de una producción agrícola de 271 millones de toneladas, dos millones más que en el año 2021; una producción ganadera de 24.1 millones de toneladas, un aumento de 500 mil respecto al año pasado; y del crecimiento de la pesca en 38 mil toneladas para llegar a sumar dos millones totales.
El sector primario dio empleo a 6.7 millones de trabajadores en el segundo semestre del 2022.
Más producción de alimentos es resultado del trabajo de las mujeres y los hombres en el campo; así revelan los datos de México en el Informe de la FAO sobre Seguridad Alimentaria y Nutricional.
El estudio del organismo internacional, señala que en nuestro país se redujo la población subalimentada, mientras que en el 2018 el 7.2 por ciento de los mexicanos estaban en esta situación en 2021, era de 6.1 por ciento.
Entre el 2018 y el 2021, en términos absolutos 1.4 millones de mexicanos superaron su condición de subalimentación, logro que nos indica que la necesidad de continuar por la vía establecida desde inicios de este gobierno es la vía correcta.
Durante los primeros ocho meses de este año, al igual que ha ocurrido desde hace varios años, la balanza comercial agroalimentaria ha sido superavitaria. En el periodo enero-agosto del 2022, tuvo un saldo positivo de 5 mil 287 millones de dólares.
Como lo he afirmado siempre, el mérito es de nuestros productores. La SADER y sus entidades los apoyan con las diferentes acciones incluidas en los programas de Fomento para la Agricultura, la Ganadería, la Pesca y la Acuacultura.
Adicionalmente a estas acciones quisiera destacar los servicios de la fitosanidad. Salud animal e inocuidad de los alimentos, los cuales van y han dado mucho más de lo que se ofrece en la importación en las aduanas, y que incluyen, entre otros aspectos de vigilancia epidemiológica, combate, control y erradicación de plagas y enfermedades, gestiones en apoyo a las exportaciones nacionales, así como los servicios enfocados a garantizar la calidad e inocuidad de los alimentos.
Estos servicios reconocidos internacionalmente, permiten proteger la productividad y la competitividad en nuestro sector, lo cual abona a la seguridad alimentaria de toda la población.
Las acciones enunciadas cuyo detalle ustedes han podido revisar en el Informe del Ejecutivo entregado el 1° de septiembre, fueron posibles con el ejercicio eficiente de un presupuesto austero, pero que afortunadamente ha venido creciendo.
Al concluir el ejercicio fiscal 2021, Agricultura registró un presupuesto modificado de 51 mil 771.9 millones de pesos, de los cuales se ejerció el 100 por ciento.
Para el 2022, recibimos un presupuesto de 55 mil 788.9 millones de pesos, un incremento en términos nominales de 7.7 por ciento respecto al autorizado en el 2021.
El proyecto de Presupuesto de Egresos 2023, presentado por el Ejecutivo a la Cámara de Diputados, propone que los recursos destinados a la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, sean de 70 mil 527.9 millones de pesos. Es decir, un incremento significativo del 26.4 por ciento para seguir apuntalando la seguridad alimentaria con soberanía, en apoyo a todos los productores y las políticas de incrementar la oferta nacional para controlar la inflación que nos ha llegado de fuera.
Señoras y señores legisladores:
Antes de concluir, permítanme unos minutos más para referirme a la situación actual y las medidas que desde el sector agroalimentario está tomando el Gobierno Federal, apoyadas por una buena parte por el sector productivo.
A pesar de la demostrada resiliencia de nuestro sector, es importante subrayar y difícil de hacerlo, que existen efectos inflacionarios importantes debido al incremento de los precios de los alimentos provocados por factores a los que ya me he referido al inicio de esta mi intervención.
Reitero que toda la economía mundial experimenta este proceso inflacionario, tanto en economías avanzadas como en aquellas en desarrollo.
Como es de su conocimiento, el Gobierno Federal realizó un primer esfuerzo de contención con el Paquete Contra la Inflación y la Carestía -PACIC-, presentado el 4 de mayo con el objetivo de estacionar y de estabilizar los precios de los alimentos.
Para nuestro sector, se incluyeron medidas como el aumento de los apoyos a la producción de granos, la ampliación del programa de Entrega de Fertilizantes, el fomento de fertilizantes orgánicos y la eliminación de la cuota compensatoria para el sulfato de amonio, así como la ampliación temporal de aranceles cero a la importación de 21 de los 24 productos de la canasta básica y cinco insumos estratégicos.
Además, la constitución de una reserva estratégica de maíz, con la compra de 800 mil a un millón de toneladas de maíz, la ampliación de precios de garantía de maíz, frijol, arroz y leche, que establece un precio mínimo de compra a pequeños productores y el fortalecimiento del programa de Abasto Social.
Cabe decir que el entorno internacional ha distado mucho de mejorar, por lo que el Gobierno Federal, nuevamente con el apoyo del sector privado, ha redoblado el esfuerzo en el Acuerdo de Apertura Contra la Inflación y la Carestía -APECIC-, con el objetivo de reducir en ocho por ciento el precio de la canasta básica en un periodo de seis meses. Es decir, de mil 130 pesos a mil 40, mediante la flexibilización de la importación de los productos que la contienen y que la integran.
La idea es incrementar la oferta de alimentos, por lo que se otorga a las empresas importadoras de productos de la canasta básica, una licencia única universal para facilitar la importación y distribución de alimentos e insumos, y así contener su esfuerzo inflacionario.
Esto es clave para entender el fondo de este acuerdo.
Se les confía una corresponsabilidad de asegurar que las mercancías que comercien cumplan con las normas sanitarias de inocuidad y de calidad.
Además de recordar que la medida es temporal y limitada, hay que aclarar que ni la SADER ni el SENASICA están abandonando su responsabilidad de proteger la sanidad agropecuaria y la salud de la población.
En este sentido vemos dispuesto lo necesario para que las empresas inscritas en el padrón, cumplan con los requisitos a tiempo, que fortalezcamos las medidas de vigilancia y alerta en todo el territorio nacional.
Asimismo, seguimos apoyando al sector agroexportador, dialogando y ofreciendo garantías a nuestros socios comerciales de que esta medida no les afectará en sus negociaciones comerciales.
Ante circunstancias agroalimentarias, se tienen que tomar medidas extraordinarias y, aunque es responsabilidad del Estado garantizar el derecho constitucional a la alimentación, hoy se requiere del apoyo de toda la sociedad para enfrentar esta contingencia, protegiendo más a los más vulnerables.
Muchas gracias y con todo gusto daré respuesta a sus intervenciones.
Quedo a sus órdenes.
Muchas gracias.