Número-242
- La Ciudad de México es considerada una de las 10 más ruidosas del mundo, se destaca en el proyecto que reforma Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente.
Con 86 votos a favor, el Pleno del Senado aprobó una reforma a la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente, con el objeto de regular de manera adecuada la contaminación acústica.
Para tal efecto, el dictamen plantea que la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales expedirá las normas oficiales mexicanas para el establecimiento y operación de los sistemas de monitoreo del ruido.
Precisa que los gobiernos de las entidades federativas, municipios y las demarcaciones territoriales de la Ciudad de México realizarán los monitores necesarios para la prevención y el control de este tipo de contaminación.
El dictamen avalado por la Asamblea advierte que el ruido excesivo tiene afectaciones fisiológicas y psicosomáticas, ya que reduce la capacidad de concentración y la memoria, además provoca estrés y, a largo plazo, puede causar pérdida de la audición, perturbación del sueño, alteraciones cardiovasculares y complicaciones en el embarazo.
Dichos ruidos, se señala, de acuerdo con su intensidad, frecuencia y tiempo de exposición, repercuten no sólo en los seres humanos, sino en los seres vivos que conforman los ecosistemas en los que se encuentra inmersa la población humana.
Al respecto, la senadora de Acción Nacional, Audelia Esthela Villarreal Zavala expresó que la contaminación acústica es uno de los factores ambientales que provoca más problemas de salud en el mundo y precisó que la Ciudad de México es considerada una de las 10 más ruidosas, donde sus habitantes pierden la audición prematuramente.
Del Grupo Parlamentario de Morena, Elí César Eduardo Cervantes Rojas aseguró que las secuelas del ruido excesivo son devastadoras para el ser humano, pues representan una potencial afectación a la salud física y mental, “por lo que es importante promover la consciencia sobre los daños que causa a las personas y al medio que lo rodea”.
El dictamen se envió a la Cámara de Diputados.