Número-093
- Advierte Ana Lilia Rivera que la depresión posparto, afecta a más del 50 por ciento de las madres mexicanas.
En la sesión de este martes, el Senado aprobó por unanimidad reformar y adicionar diversas disposiciones de la Ley General de Salud, para que la atención materno-infantil comprenda la salud emocional y mental para prevenir, detectar y atender trastornos mentales durante el embarazo y el postparto.
Al presentar el dictamen, la senadora Ana Lilia Rivera Rivera, presidenta de la Comisión de Estudio Legislativos, Segunda, recordó que es una obligación del Estado proteger los derechos a la vida y a la salud, garantizar el interés superior de la niñez y asegurar a los menores un sano desarrollo desde sus primeros meses de vida.
Refirió que la depresión que experimentan las mujeres después de dar a luz es un problema de salud pública. En el caso de México, dijo, afecta a más del 50 por ciento de las madres durante los primeros cuatro meses posteriores al parto y, en caso de no recibir asistencia adecuada, puede llevar a consecuencias mortales para la madre y su bebé.
Afirmó que el dictamen propone que el servicio médico materno-infantil incluya la salud emocional y mental para la prevención detección y atención de trastornos de manera especial en el proceso de gestación hasta el postparto.
Sylvana Beltrones Sánchez, senadora del PRI, reiteró que el objetivo del proyecto es establecer la atención médica mental de la mujer durante las etapas del embarazo, ya que se considera que la maternidad lleva a un estado de felicidad, situación que dificulta el reconocimiento de la depresión perinatal y la aceptación de experimentar sentimientos contrarios a la alegría.
Dicho trastorno, subrayó, además de ser considerado como un tabú, ocasiona mayor discapacidad, por lo que ya muchos países están incluyendo en sus políticas públicas atención a la salud mental a todas las madres.
Por su parte, la senadora Lilia Margarita Valdez Martínez, de Morena, subrayó que la detección y atención de trastornos mentales durante el embarazo ayudará a que los trastornos de la madre no afecten el desarrollo de las diferentes etapas del embarazo y coadyuvará a mejorar la salud de los recién nacidos.
El senador Antonio García Conejo, manifestó que el Grupo Parlamentario del PRD celebra la eventual aprobación de este dictamen, debido a que la depresión posparto afecta a 56 por ciento de mujeres latinas residentes en México y en Estados Unidos, durante los primeros cuatro meses tras el nacimiento de sus bebes.
El documento destaca que la depresión posparto es reconocida mundialmente como un problema importante de salud pública, por su frecuencia y consecuencias negativas sobre la salud y bienestar de la madre y de los infantes.
El dictamen, que reforma y adiciona diversas disposiciones de la Ley General de Salud, fue remitida a la Cámara de Diputados, para los efectos constitucionales del artículo 72 Constitucional.