Número - 167
- Es necesario evaluar capacidades de México para impulsar este tipo de herramientas, desde la iniciativa privada y desde el gobierno, señalan.
México se encuentra en una situación de fragilidad en el desarrollo de la inteligencia artificial, pues el desconocimiento de lo que se trata esta tecnología, la falta de regulación y de inversión en el sector, generan abusos que afectan los derechos humanos de los usuarios o que impiden el impulso de empresas que se dedican a esta actividad.
Así lo destacaron legisladores y especialistas en la mesa de análisis sobre “Innovación e Industria” en esta materia, a la que convocó la senadora Alejandra Lunes Soto Ruíz, del PVEM, y la Alianza Nacional de Inteligencia Artificial.
En ese encuentro, se destacó la necesidad de evaluar las capacidades de México para impulsar este tipo de herramientas e invertir en el sector, desde la iniciativa privada y desde el gobierno.
El senador Gustavo Madero Muñoz consideró necesario revisar cómo han regulado el tema en países de Europa, Estados Unidos o China, ya que son las naciones que más han impulsado la innovación tecnológica.
Señaló que con la nueva Ley General en Materia de Humanidades, Ciencias, Tecnologías e Innovación se hace un control estatal de la investigación, para concentrar el potencial de nuestro país en este tipo de sectores.
Además, reconoció que el porcentaje del Producto Interno Bruto que se destina a la investigación y tecnología en México es muy bajo, mientras en otros países es mayor:
“Debemos analizar qué tan estratégico es que el gobierno regule y controle el uso de estas herramientas o qué tanto debe soltarlas a la iniciativa privada, yo soy más de la segunda parte”, expresó.
Issac Alcalá, director de mercados digitales de la Comisión Federal de Competencia Económica, dijo que la inteligencia artificial ya se utiliza en empresas de reciente creación, pues facilitan los mecanismos que ofrecen los servicios al cliente.
Agregó que, de acuerdo con un estudio de IBM, México está en el quinto lugar de adopción de inteligencia artificial en América Latina, y lo que ha impedido su desarrollo es el desconocimiento sobre su uso.
José Luis Hernández, fundador de White Bx Project, dijo que es muy complicado crear una empresa de inteligencia artificial en México, “porque vas al notario y no te entienden que es lo que quieres, vas a Hacienda y no estas clasificado como una empresa, vas a Economía y no tienen idea de en donde va este tipo de empresas”, señaló.