Número - 1458
- La senadora Olga Sánchez Cordero dijo que cinco de cada 10 personas de este género han experimentado esta práctica a lo largo de su vida.
Como parte del ciclo de conferencias “Mujeres por una vida libre de violencia”, la senadora Olga Sánchez Cordero y especialistas, abordaron las causas, prevenciones y consecuencias de la violencia psicológica en nuestro país.
La legisladora indicó que, de acuerdo con el artículo sexto de la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, este fenómeno se define como cualquier acto u omisión que dañe la estabilidad psicológica y que pueda consistir en negligencia, abandono, descuido reiterado, insultos, humillación, marginación indiferencia, comparaciones destructivas, que conlleven a la víctima a la depresión, aislamiento y devaluación de la autoestima.
Refirió que de acuerdo con la Encuesta Nacional Sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares 2021, alrededor de cinco de cada 10 mujeres, han experimentado violencia psicológica a lo largo de su vida.
“Desafortunadamente, dado el contexto social y cultural de nuestro país, no es extraño el hecho de que la violencia psicológica sea el tipo más común de violencia”, aseveró.
Sánchez Cordero dijo que hay comentarios que tienen el objetivo de manipular, amenazar, chantajear, humillar o crear confusión; la violencia psicológica es más difícil de demostrar, ya que no existe un rastro físico perceptible a simple vista.
“La violencia psicológica está soterrada, es extremadamente común y se ejerce en la familia, la pareja, el trabajo, las aulas e incluso en los espacios digitales”, expresó.
Por ello, señaló, es importante que cuando las víctimas se decidan a denunciar, existan protocolos que no las revictimicen o minimicen en los hechos.
Es fundamental atajar este tipo de violencia, derrumbar el patriarcado, sus expresiones que atentan contra la dignidad de las mujeres y atender a las víctimas con perspectiva de género, concluyó.
La doctora Maribel Nájera Valencia, directora de la Clínica del Instituto Latinoamericano de Estudios de la Familia, consideró que para prevenir la violencia psicológica, es necesario que en las diferentes áreas pueda haber coordinación de las leyes, protocolos, programas educativos, de salud y terapéuticos, además de que puedan hacerse efectivas las órdenes de restricción y sanciones.
También consideró urgente que los Ministerios Públicos estén capacitados de mejor manera en perspectiva de género, sobre todo los jueces.
Reconoció que en los centros de salud se sigue ejerciendo la violencia de todos los tipos, por eso, la articulación y coordinación entre las diferentes instancias es muy importante.