Número - 489
- Se debe contemplar a la gastronomía mexicana como un instrumento para el desarrollo económico, local y regional
El Senado de la República hizo un llamado a la Secretaría de Cultura para que inicie el procedimiento de inscripción de la cocina popular mexicana en la Lista Indicativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de México.
El dictamen, aprobado en votación económica también pide al Poder Ejecutivo Federal para contemplar este arte culinario como un instrumento para el desarrollo económico local y regional, así como para fomentar el turismo y fortalecer los programas culturales.
De acuerdo con el documento, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), había reconocido a la cocina mexicana como patrimonio cultural, pero éste sólo consideraba a Michoacán y sus actividades agrarias, prácticas rituales, conocimientos prácticos antiguos, técnicas culinarias, costumbres y modos de comportamiento comunitarios ancestrales.
Esta distinción representó un parteaguas tanto para México como para la UNESCO, ya que contempla una cocina que hace de lado los estereotipos sobre la presentación de un platillo.
Sin duda es un reconocimiento que podría generalizarse a las artes tradicionales de la cocina mexicana, puesto que posee una diversidad cultural de más de 30 siglos, además de ser un símbolo de una nación pluricultural que transmite valores y conocimientos de todos los tiempos, destacaron los senadores en el dictamen.
Agregaron que uno de los motivos por el que se pretende salvaguardar este elemento es debido a la difusión y comercialización de las tradiciones, por lo cual pierde o deja de lado su originalidad.
El arte culinario, precisaron, puede señalarse como una expresión cultural que forma parte de la identidad del mexicano, porque está asociado, por una parte, a los conocimientos de los pueblos, así como a las manifestaciones alimentarias de las comunidades, ya sea en fiestas y ceremonias tradicionales o populares.
A su vez, puntualiza, la gastronomía mexicana ha tenido la capacidad de crear sus propios utensilios y herramientas para cocinar sus platillos y comidas típicas; hoy en día, está en constante transformación, adaptación e innovación.