Número-835
- Analizan en el Senado avances de la reforma constitucional en materia de paridad.
La presidenta de la Mesa Directiva, Olga Sánchez Cordero, subrayó la importancia de hacer patente la violencia política en resoluciones y en expedientes judiciales, pues si las y los magistrados “no exteriorizan” los casos, este tipo de agresiones permanecen soterradas y muchas veces son difíciles de detectar.
“Tenemos instrumentos, políticas públicas, la legislación y los tribunales para avanzar en contra de la violencia de género”, asentó.
Sánchez Cordero hizo un llamado a las mujeres para hacer un frente común y no bajar la guardia, a seguir luchando, a “hacer un compromiso de renovación generacional con las que llegan, las que nacen, las que luchan y con las que quieren llegar y no han podido; nosotras tenemos esa gran responsabilidad”.
También reconoció el trabajo de las magistradas de los tribunales electorales, porque están comprometidas para continuar con el principio de paridad, el cual ya es constitucional y transversal, y ahora “debe estar en todas las leyes, en todas las sentencias, normas y políticas públicas”.
La senadora afirmó que en las últimas décadas en México y en América Latina se han impulsado cambios importantes orientados a la paridad, recurriendo a herramientas políticas, jurisdiccionales y legitimas.
En tanto, la presidenta de la Comisión para la Igualdad de Género, Martha Lucia Micher Camarena, destacó que hasta el momento se han reformado más de 170 ordenamientos para armonizar los cambios constitucionales en materia de paridad; “sabemos que aún faltan, pero no cejaremos hasta que se reforme toda la normatividad aplicable”.
Indicó que en el proceso de negociación de las reformas fueron fundamentales los argumentos que elaboraron tanto el Poder Legislativo, la academia y las organizaciones de la sociedad civil.
Micher Camarena afirmó que se debe entender que estas reformas, tocan fibras profundas para los hombres del sistema político, en todos sus ámbitos: legisladores, funcionarios, integrantes de partidos políticos, por lo cual fue revisada a profundidad.
Unos de los principales avances, destacó, es que la paridad está incluida como un principio constitucional y, en la legislación secundaria, además, se introduce un lenguaje incluyente y no discriminador; y se establecen obligaciones a los partidos políticos para observar en la postulación de sus candidaturas el principio de paridad de género.
Además, define a la violencia política contra las mujeres en razón de género como un delito, y que los partidos políticos deben garantizar la participación igualitaria de mujeres y hombres libre de violencias.
La senadora reiteró que no será posible alcanzar la paridad y no podremos participar de manera igualitaria en los espacios políticos, si no logramos erradicar la violencia política contra este grupo poblacional.
Además, reconoció que uno de los retos fundamentales es que los congresos estatales realicen las reformas necesarias para concretar esta reforma constitucional en su legislación secundaria.
“Para que las mujeres seamos candidatas o dirigentes, necesitamos contar con la garantía de que nuestra participación en el terreno político y electoral, se dé en condiciones de paridad y libres de cualquier tipo de violencia”, reiteró.
En su participación, la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos, Kenia López Rabadán, aseveró que vemos una Suprema Corte de Justicia de la Nación que se abre a la posibilidad de que haya mujeres tomando decisiones en México.
Lo cual, dijo, se logró gracias a la Ley que permitió cerrar la brecha de medio siglo que no permitía la participación de las mujeres en puestos de decisión.
Asentó que si se trabaja en colaboración será más fácil librar las batallas ideológicas, partidistas y regionales que se presentan en la materia.
Mónica Aralí Soto Fregoso, magistrada de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, refirió que a través de los tres poderes de la Unión se debe garantizar el ejercicio pleno de los derechos.
Martha Alejandra Chávez Camarena, magistrada del Tribunal Electoral de la Ciudad de México, dijo que para consolidar una democracia que dé resultados, es indispensable revisar, actualizar y perfeccionar el régimen normativo e institucional de la paridad, así como evaluar los avances y retos para la erradicación de la violencia contra las mujeres en razón de género.