COMISIÓN PERMANENTE
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Participación del senador Adán Augusto López Hernández, presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado de la República, durante la sesión de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión

 

No cabe duda de que, en esta Permanente, como en la legislatura, pues habrá indudablemente personajes que continuarán viviendo en el histrionismo perpetuo.

 

No cabe duda. Hay quienes siguen añorando…

 

No cabe duda de que hay quienes nunca alcanzarán a dejar de añorar a su jefe Ricardo Salinas Pliego. Bueno, a lo mejor no lo añoran porque siguen cobrando en la televisora.

 

Yo aquí les diría que somos muchos millones de mexicanos, muchos millones de latinoamericanos y muchos millones de ciudadanos del mundo que sin duda tenemos que seguir aprendiendo de un personaje de la talla, de la enorme talla de José Mujica.

 

 

 

Decía que, pues no van a, no han dejado de añorar a Salinas Pliego, porque siguen cobrando un jugoso emolumento de las arcas de esa televisora.

 

En mi pueblo, lo he platicado, y que se ponga el saco quien se lo quiera poner, existió un personaje no tan de fábula, conocida como María Garrido, sobrina, hija de un hermano del exgobernador Tomás Garrido Canabal.

 

La familia, en su momento, abjuró de ella porque alegaron que estaba afectada de sus facultades mentales, y salía a caminar desde muy temprano.

 

Caminaba como 10 o 12 horas, ahí, por las calles, en aquella época, polvorientas de Villahermosa, hablando y diciendo que se iba a acabar el mundo, y que quién iba a llegar a salvarlo, diciendo que la única casta y pura del mundo era ella.

Así es la locura, por eso hay personajes que se enredan en esos esquemas.

 

Como decían en mi pueblo, la gente salía a los balconcitos de las casas y le gritaban, ¡está loca, está loca!, y terminaron por ignorarla.

 

Ahora bien, presidente, yo le quisiera preguntar, porque yo sí voy a dar respuesta puntual, si la senadora tiene el valor de hacerme las preguntas que dice que ya me hizo.

 

No sé si pidió, durante sus interrupciones, que se me preguntara si quería que me hiciera alguna pregunta.

 

 

…Yo soy respetuoso del orden legislativo, senadora, y aquí hay un orden, y usted no puede preguntarme de manera...

 

No, me ha apellido Pérez, yo no estoy asociado a ningún cártel, me apellido López, senadora.

 

Veo que…con mucho gusto. ¿Cuántos minutos son para la respuesta? ¿Pero cuántas preguntas fueron? Bueno, como no he terminado mi intervención inicial, pues esos dos minutos se van a sumar a los dos minutos con cuarenta y cuatro segundos.

 

Pero si no hablé ni un minuto, se la pasó interrumpiendo.

 

Bueno, voy a responder puntualmente. Primero, a la supuesta aclaración.

 

Senadora, no nada más, no tiene autoridad moral, no tiene memoria y está la constancia.

 

Yo puedo demostrarle a usted cuándo fue a la Secretaría de Gobernación y cuándo me entregó el documento, que me lo entregó en dos ocasiones.

 

Una, me permite responderle porque yo le escuché atentamente.

 

¿Me permite responderle? ¿Me permite responderle? Bueno, entonces se calla, por favor.

 

La primera ocasión, usted fue a entregarme un documento que era más bien... Presidente, que me permita contestar…

 

Entonces les decía, a manera de aclaración, que sí fue, y sí me entregó una carta que era la carta de una plañidera que pedía apoyo de la Guardia Nacional para un hijo, si mal no recuerdo.

 

Esa fue la primera vez, y fue en la Secretaría de Gobernación.

 

La segunda vez comía en un restaurante aquí cerca. Creo que, en Les Moustaches, con Raúl Ojeda. Cuando usted se acercó con su estilo, con su telefonito, a quererme grabar, otra vez le pregunto, pero eso no es lo importante.

 

Le voy a decir por qué miente. ¿Me permite? ¿Me permite? Voy a contestar. No sé cuánto haya costado un supuesto boleto de primera clase.

 

Entiendo que usted le cree. Pues sí son parte del mismo enjuague, bola de corruptos, al señor García Soto.

 

¿Sabe dónde estuve yo la semana pasada? Y eso puedo demostrárselo.

 

Yo no he viajado en primera clase a París. Es más, yo no he viajado a París desde hace como tres o cuatro meses, que acudí a visitar a mi hijo para su información, que estudia por allá.

 

Entonces, ¿para qué pregunta?

 

SEGUNDA INTERVENCIÓN DEL SENADOR ADÁN AUGUSTO LÓPEZ HERNÁNDEZ

 

Voy a responder a otra de las preguntas que me hizo la senadora.

 

No cabe ninguna duda que, aunque la mona se vista de seda, mona se queda. Aunque se disfrace de senadora, nunca dejará de ser la empleada de la televisora.

 

No tiene ni siquiera la autoridad moral, y desde ahorita la invito a que se pare ante una fiscalía, ante una agencia del ministerio público, y presente en mi contra la denuncia por esos hechos de los que habla de huachicol fiscal.

 

La senadora se dedica a construir los escenarios nada más en su atormentada cabecita. Construye sus intervenciones a base de mentiras.

 

Me hace una pregunta y yo se la respondo, y dice que no le interesa, que no me preguntó sobre mí, pero yo estaba respondiéndole a su reiterada pregunta, que se la dictó el señor García Soto, el señor Salinas Pliego, o Jorge Mendoza, cualquiera de los empleados de esa televisora, sus jefes.

 

Ella me dice que cuánto me costó un boleto de primera clase de un viaje a París, y yo le estoy aclarando que no estuve en París. Me hubiera gustado estar, por supuesto, a quién no. Pero no estuve en París esta semana o este fin de semana.

 

Estuve aquí cerquita en un hospital porque sufrí una intervención quirúrgica que era el seguimiento a una intervención quirúrgica, que a varios de nuestros compañeros les consta, que sufrí hace como dos meses. Entonces, aclarada su mentira.

 

Segunda mentira: yo no pacté con nadie. Yo fui gobernador de Tabasco y lo fui porque hasta ese momento fui el gobernador más votado en la historia de Tabasco, que, por cierto, creo que usted es panista, ¿no?, pues ya no sabemos ni el que pertenece al “TV Aztequismo”; desapareció del mapa político.

 

Y voy a terminar diciéndole que a mí sí me da vergüenza que a este Senado de la República quiera convertirlo en una telenovela más de su canal favorito, del canal de su jefe. Una telenovela que no le llega ni a los talones.

 

Y lo voy a contar, porque lo iba a platicar más al ratito, pero lo voy a hacer ahora.

 

Quiero reconocer la altura de miras y el nacionalismo de su coordinador, Ricardo Anaya.

 

Porque ayer cuando platicamos y lo invitamos a suscribir un documento conjunto, y, por cierto, aquí agradezco también al senador Añorve, con altura de miras dijo por México, por los migrantes, claro que vamos a ir. Me pidió que le enviara una propuesta de contenido, lo hice y me dice: “mira, no estoy de acuerdo en esto, pero es soportable, porque no lastima mis condiciones y porque creo que son momentos de solidaridad con el país”.

 

Eso es, esos son los legisladores de todos los colores que necesitamos. Tómese su tasedan, o tómese lo que acostumbra tomar, pero ya, como dice la canción: “ya supéreme!