Número - 90
- Morena y aliados en contra de la corrupción política y el influyentismo; la oposición critica uso de las instituciones para destruir a los enemigos.
El Pleno de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión debatió, en la sesión de este martes temas de la agenda nacional, sobre “el tráfico de influencias como forma de enriquecimiento ilícito”, en donde manifestaron sus posturas respecto a la situación política del país.
De Morena, el senador Gabriel García Hernández indicó que es inaceptable la corrupción política y el influyentismo al que se aferran los neoliberales; “hasta se manejan con empresas privadas que reciben millonarias sumas por sus negocios y uno de sus principales clientes en el sector público, es el INAI, por eso quieren que se aprueban ya los nombramientos de ese Instituto”, denunció.
El diputado del PAN, Jorge Triana Tena, reviró que el tráfico de influencias lo comenten los funcionarios del gobierno actual y para muestra, dijo, Zoé Robledo Aburto, director del Instituto Mexicano del Seguro Social le ha dado contratos a su hermano; Pío López Obrador, recibió sobres amarillos, el dueño de Grupo Riobóo y su esposa, la ministra Yasmín Esquivel Mossa, reciben miles de contratos de Andrés Manuel López Obrador.
Mario Zamora Gastélum, senador del PRI, señaló que el Presidente de México debe comportarse como un hombre de Estado y no como jefe de partido, ni utilizar a las instituciones de forma facciosa para beneficiar a sus amigos o para destruir a sus enemigos.
El diputado Marcelino Castañeda Navarrete del PRD, calificó como una “actitud miserable” utilizar la fuerza del Estado para dañar a los adversarios, cuando su obligación es proteger y no intimidar. “El ser exitoso y aspiracionista no es un defecto, ni es un delito, sólo una mente mediocre piensa así. Ser exitoso es una virtud”, señaló.
Jorge Luis Llaven Abarca, diputado del PVEM, subrayó que el Presidente separó el Poder económico del político, lo que todavía les duele a muchos; “hay voces que se resisten a terminar con la corrupción, el tráfico de influencias y negocios al amparo del poder, que generó una corrupción institucionalizada”, asentó.
Por Movimiento Ciudadano, el diputado Jorge Álvarez Máynez expresó que este debate es parte del golpeteo del Estado contra Xóchitl Gálvez. La inscripción de este tema, lamentó, tiene ese propósito; “es una vergüenza que la historia de vuelta en ‘u’ y que coloque a la víctima en el papel de verdugo y todavía aplauden y festejen”.
El diputado Reginaldo Sandoval Flores, del PT, indicó que la forma tradicional de gobernar de las administraciones del PAN es utilizar el poder como un negocio para favorecer sus empresas, pues por el simple hecho de pertenecer a ese partido político los hace merecedores de beneficios que hacen florecer a sus compañías, como es el caso de Xóchitl Gálvez y de los integrantes del cártel inmobiliario.
Del Grupo Plural, el senador Germán Martínez Cázares reconoció que uno de los temas pendientes de atender es la redistribución de la riqueza y aceptó que es necesario separar el Poder económico del político; sin embargo, dijo que no se debe matar el esfuerzo individual y la iniciativa del mérito personal, porque Xóchitl Gálvez no recibió mil 400 millones de pesos de la lluvia o del gobierno, sino que son producto de su esfuerzo.