Versión estenográfica del mensaje de la senadora Ana Lilia Rivera Rivera, en la inauguración de la muestra cultural, artesanal, gastronómica y turística “Tamaulipas seguro, te enamora”. 

 

Muchas gracias. Muy buenos días. 

 

Doy la bienvenida a todas y a todos quienes hoy nos acompañan esta mañana para inaugurar una emocionante muestra.  

 

En particular, quiero extender un cálido saludo al doctor Américo Villarreal, gobernador constitucional del estado de Tamaulipas. 

 

Querido amigo, bienvenido nuevamente. El Senado de la República lo recibe con el corazón y con los brazos abiertos. 

 

Gracias. 

 

Quiero también dar la bienvenida a quien indudablemente lo acompaña en su vida, no solamente en los momentos más hermosos, me consta, porque lo viví en la campaña, la pasión, el compromiso y la inteligencia, la sensibilidad de nuestra querida, conocida en Tamaulipas como “la mujer vitamina”, pero que es doña María de la Luz de Villarreal. Bienvenida. 

 

Agradezco a quienes han tenido esta gran iniciativa de esta gran posibilidad, a la senadora Guadalupe Covarrubias, que es presidenta de la Comisión de Cultura. 

 

Por supuesto, dar la bienvenida también al senador José Ramón, de Tamaulipas. 

 

A la senadora Lilia Margarita Valdez, presidenta de la Comisión de Salud. 

 

Al senador Ernesto Pérez Astorga. 

 

A nuestro querido amigo, el senador Miguel Ángel Mancera. 

 

Saludo por eso hoy con tanto afecto a todas y todos ustedes.  

 

Desde que recibí la invitación para este evento, me conmovió el nombre que lleva: “Tamaulipas seguro te enamora”.  

 

Me sacudió el corazón, porque seguramente le ocurre a todas y todos los que generamos un sentimiento muy especial por el lugar en el que nacemos.  

 

Es quizá uno de los sentimientos más complejos, profundos y vivaces que podemos experimentar. 

 

Es un amor que se siente en lo más hondo de nuestro ser, que late como un furioso galope en nuestro pecho y que se multiplica al infinito, sobre todo cuando estamos lejos. 

 

Sobre todo, es esa identidad que nos llena de orgullo y nos hace sentir que pertenecemos a algo muy importante. 

 

Desear que otras y otros vean con tus ojos las razones de tu afecto, es quizá uno de los mayores parabienes que se le pueden obsequiar a alguien, y eso es precisamente lo que hace esta muestra. 

 

Las y los organizadores nos prestan por un momento sus ojos, para enamorarnos y nos maravillemos con los sabores, las artesanías, los paisajes de su tierra querida. 

 

Dicen que el amor entra por los ojos y que se anida en el estómago. 

 

Las y los maestros artesanos conocedores de esta verdad, nos muestran la distintiva cuera tamaulipeca, que la presumen hoy muy orgullosos los que están aquí; así como artesanías de ixtle, bambú, madera y piedra. 

 

También nos sacudirán con la tradicional huapilla, bebida de fruto del mismo nombre, muy tradicional de Tamaulipas; su poderoso mezcal y diversas cervezas artesanales. 

 

Y eso sólo es un pedacito de Tamaulipas que podemos saborear, ver, oler y palpar a lo largo de esta extraordinaria exposición. 

 

Además, nos mostrará la belleza de sus playas, lagunas, pueblos mágicos, centros recreativos, presas, ríos, cascadas y muchos otros lugares que quizá no imaginábamos. 

 

Por eso afirmo que compartir lo que más queremos es una verdadera muestra de amor. 

 

Ojalá que todas y todos en el Senado aprovechemos esta oportunidad para llevarnos un pedacito de este maravilloso estado, que es mucho más de lo que leemos o que escuchamos de el. 

 

Como si todo no fuera suficiente, para que nos enamoremos más de Tamaulipas, esta pequeña exposición se complementa con una significativa muestra de corazón y solidaridad de su gente, gracias a una alianza entre el Senado y el gobierno de la entidad, durante esta semana las personas trabajadoras de esta Cámara podrán acceder gratuitamente a servicios de mastografía, a través del programa Di Sí a la Prevención, dirigido a detectar el cáncer de mama, esta terrible enfermedad que anualmente causa la muerte a casi 10 millones de personas.  

 

Se estima que 7 de cada 10 pacientes, buscan atención médica o acuden cuando la enfermedad está en sus etapas más avanzadas; por lo que, apostar en campañas y programas preventivos, como el que arranca este día, no es un acto de buena fe solamente, sino que determina la diferencia entre la vida y la muerte. 

 

Me consta. Desde su paso por el Senado, como lo fue el senador, hoy gobernador, Américo Villarreal, hizo de su vocación como médico un modo de materializar el propósito último de la política: el bien ser y el bienestar de todas las personas. 

 

Cuando fue presidente de la Comisión de Salud, no había semana que no pasáramos al pleno iniciativas, reformas y modificaciones que tuvieran que ver con la salud y el derecho fundamental de todas y todos. 

 

Querido amigo, celebro mucho esta oportunidad, no solamente de manifestar el amor que le tienen a Tamaulipas los tamaulipecos, la invitación que nos dan para enamorarnos de Tamaulipas, sino el bien hacer y el bienestar que le ha caracterizado por su gran humanidad. 

 

Sean bienvenidos todos y todas.  

 

Y que viva Tamaulipas.