Versión estenográfica del mensaje del senador Ricardo Monreal Ávila, presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado de la República, en la inauguración del Conversatorio con Embajadores de la Unión Europea. 

 

 

Muchas gracias. 

 

Buenos días.  

 

Quisiera darles la bienvenida a este lugar, al Excelentísimo señor Gautier Mignot, Jefe de la Delegación de la Unión Europea en México. 

 

A los excelentísimos embajadores y embajadoras de Alemania, Bulgaria, Hungría, Irlanda, Italia, Países Bajos y Rumania. 

 

También, les damos la bienvenida a los miembros del Cuerpo Diplomático acreditado en México de Bélgica, Francia, España, Portugal y Suecia. 

 

Quiero también darle la bienvenida, a los senadores y senadoras de la Comisión de Relaciones Exteriores, encabezados en esta ocasión por el senador Héctor Vasconcelos, presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores. 

 

Al senador Israel, a la senadora Xóchitl Gálvez, a la senadora Marybel, a la maestra y senadora Ifigenia Martínez, al senador José Luis Pech, al senador Sergio Pérez, a también la senadora Bertha Caraveo, a la senadora Alejandra Noemí, a Claudia, que todavía no llega, pero no tardará en llegar. 

 

A la senadora Beatriz Paredes, a Rogelio también, Zamora, a la senadora Benavides, que también se ha incorporado. 

 

Sean todos y todas ustedes, bienvenidos a la Antigua Casona de Xicoténcatl, inmueble histórico que por muchos años fuera la sede oficial del Senado de la República. 

 

 

Para el Senado de la República es un honor que estén aquí y ser sede de este Conversatorio, con la participación de tan destacados diplomáticos de países de la Unión Europea, amigos de México. 

 

Este encuentro es reflejo de la vocación internacional de nuestro país y de la trascendencia de sus vínculos con los países de la Unión Europea; con quienes compartimos una larga historia de cooperación, amistad y valores comunes, lo cual ha posibilitado el desarrollo de unas relaciones amplias, sólidas y provechosas en ámbitos como el político; comercial y económico; cultural, y multilateral.  

 

La Unión Europea se ha consolidado como un proyecto político, económico y social sin precedente en la historia. Los lazos que unen a México con los 27 países que ahora integran esta Unión Europea, se han mantenido como un punto de referencia obligado, al ser la más institucionalizada de la Unión con un país latinoamericano. Ello ha resultado en mayores coincidencias, que se traducen en un interés permanente por fortalecerlos y profundizarlos. 

 

México y la Unión Europea, hemos trabajado durante décadas en la institucionalización de las relaciones a través del Acuerdo Global —primer acuerdo de asociación de la Unión Europea con un país de América Latina—, el cual está vigente desde el año 2000 y proporciona una plataforma sólida, invaluable para un diálogo político cada vez más robusto, una cooperación para el desarrollo más eficaz, un comercio y una inversión fortalecidas. 

 

Como parte de este acuerdo, se alcanzó como pilar comercial un Tratado de Libre Comercio, conocido mejor como el TLCUEM, el cual ha brindado certidumbre jurídica a la inversión y a los intercambios comerciales. 

 

La progresiva consolidación de estas relaciones, llevó a ambas partes a establecer en el 2008 una asociación estratégica, con lo que reforzamos la voluntad política de fortalecer estos vínculos 

 

Sin embargo, los largos periodos de incertidumbre y los nuevos retos aparejados a un mundo en constante cambio, llevaron a México y a la Unión Europea a acordar la modernización del acuerdo global; no sólo para aprovechar de mejor manera las oportunidades que ofrece la relación bilateral de cara al futuro, sino también para hacer frente a los retos globales con mayores capacidades de acción conjunta. 

 

Así, las negociaciones iniciadas en el 2016, alcanzaron en un tiempo relativamente corto acuerdos en principios de los aspectos políticos y de cooperación en noviembre del 2017, y en los aspectos comerciales y de inversión en mayo del 2018. 

 

Como ustedes saben, las negociaciones técnicas subsecuentes, concluyeron en septiembre del 2019 y abril del 2020, respectivamente; mientras que la revisión legal del conjunto del texto finalizó en 2020. 

 

Tenemos pendientes aún algunos pasos procesales para que la suscripción del acuerdo global México-Unión Europea modernizado, pueda concretarse cabalmente. 

 

Los cambios que hemos hecho y hacemos frente, han sido de un gran calado.  

 

La Unión Europea, por ejemplo, se vio inmersa en el proceso de salida del Reino Unido de la Unión Europea, conocido como BREXIT, el cual vino a cambiar la configuración política y económica del bloque, con importantes implicaciones en sus relaciones en el mundo. 

 

México también ha cambiado en los últimos años. Con la llegada de un nuevo Gobierno inició un proceso que impulsó la transformación del país en cuanto a su modelo social, económico y político, mediante reformas jurídicas constitucionales y políticas puestas en marcha, que desde el ámbito legislativo hemos estado acompañando con gran compromiso. 

 

Se busca transformar el mercado laboral, la educación, las reglas de competencia económica, el ámbito fiscal, la seguridad social, las reglas político-electorales, el combate a la corrupción, así como el sector energético, entre otros.  

 

La transformación ha contribuido y contribuirá al fortalecimiento del país internamente, mientras que lo consolidan como un actor importante y atractivo en el escenario internacional. 

 

El resultado es un marco institucional amplio y sólido, con el que México dota de confianza y fortaleza a sus relaciones bilaterales y multilaterales en los distintos ámbitos. 

 

De esta manera se han creado las condiciones indispensables para continuar fortaleciendo el diálogo al más alto nivel en temas de interés común. 

 

Actualmente, México y la Unión Europea contamos con más de diez diálogos sectoriales que abarcan temas como: democracia, justicia, derechos humanos, desarrollo económico sustentable, medio ambiente, educación y cultura, ciencia y tecnología, y más recientemente una colaboración estrecha para enfrentar la pandemia por el COVID 19. 

 

Además hemos impulsado nuestra coordinación, en el marco de las instituciones y foros multilaterales, para abordar con perspectiva común temas de importancia global, especialmente la paz, la seguridad internacional, la construcción y el respeto del derecho internacional, y el cambio climático.  

 

No puedo dejar de destacar la trascendencia del diálogo parlamentario que, a través de la Comisión Parlamentaria Mixta Unión Europea-México, hemos venido consolidando para contribuir de manera significativo, en el desarrollo y la maduración del diálogo en todos los niveles y ámbitos que son de interés común.  

 

Y, no menos importantes son los lazos históricos y culturales que compartimos. Las acciones de cooperación, los intercambios y los diálogos multisectoriales, que son herramientas esenciales que han reforzado nuestra relación; la colaboración educativa y cultural es cada vez más extensa y beneficiosa para ambas partes. 

 

Juntos hemos logrado aprovechar esta relación privilegiada, impulsando acciones cada vez más ambiciosas a través de la sistematización de experiencias, la difusión de buenas prácticas y la realización de proyectos que contribuyan mejor en las políticas públicas. En México, la diversidad cultural europea se manifiesta en diversas formas, como en los festivales de música, en los fondos culturales y educativos que existen como una relación de cooperación. 

 

Es claro que México y la Unión Europea se perciben como actores claves en el escenario geopolítico, y como socios estratégicos en los ámbitos bilateral y multilateral.  

 

Un aspecto coyuntural a destacar, es que el Acuerdo Global modernizado impulsará la cooperación en materia climática, medio ambiente y energía entre ambas partes. México ha creado un marco legal integral para la acción climática y su cumplimiento con los Compromisos Nacionalmente Determinados, en virtud del Acuerdo de París.  

 

En este avance y en el cumplimiento de estas metas, agradecemos profundamente el apoyo fundamental de la Unión Europea. 

 

La Unión alberga entre sus 27 países miembros, a cuatro de las 20 economías más grandes del mundo, y en conjunto representan el 16% del PIB mundial, y es una potencia comercial responsable del 15.6% del comercio global. Para México y para el mundo, la importancia de la Unión Europea es innegable.  

 

Conscientes de este reconocimiento y visión, México ha desplegado una política exterior cercana a sus aliados europeos. Actualmente, como ya se mencionó, México es el primer socio comercial de la Unión Europea en América Latina y a su vez, la Unión Europea es el tercer socio comercial de México.  

 

Desde la entrada en vigor del TLCUEM, el comercio bilateral y el flujo promedio anual de inversiones de la Unión Europea a México, se ha triplicado. Hoy, el bloque europeo es la segunda fuente de Inversión Extranjera Directa en el país.  

 

Destacan, por ejemplo, las inversiones que se han realizado en el sector financiero mexicano. Tres de los cinco bancos más importantes en el país, son europeos; con ello, a marzo de 2021, las inversiones de los miembros de la UE representan el 31.3% de la Inversión Extranjera Directa en el país, con más de 193 mil millones de dólares, invertidos en poco más de dos décadas. 

 

Es por todo ello que está en el interés del Senado mexicano del Gobierno mexicano, continuar mejorando el entendimiento entre nuestro país y la Unión Europea, más aún ante el escenario tan adverso que padecemos en el mundo por la pandemia y sus consecuencias.  

 

Ante los esfuerzos de recuperación que demandan nuestras sociedades, la modernización del Acuerdo será un instrumento vital para reactivar el comercio bilateral, fomentar mayores inversiones y dar certeza a nuestros intercambios.  

 

Resulta prioritario avanzar hacia la firma de la modernización del Acuerdo Global y de sus principales elementos, para su posterior aprobación legislativa tanto en el Senado de la República como en el Parlamento Europeo, y los congresos nacionales y en su caso, regionales en los países miembros de la Unión Europea. 

 

Estaremos atentos desde el Senado mexicano, para continuar con este instrumento crucial en el futuro y el progreso de nuestros pueblos. 

 

Por eso me permito, después de estas reflexiones, proceder a inaugurar formalmente y posteriormente escucharemos al presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores y luego la fotografía oficial, para iniciar los trabajos de intercambio entre todos. 

 

Voy a pedirles ponerse de pie, para declarar formalmente: 

 

Declaro formalmente instalados los trabajos de este Conversatorio con los países miembros de la Unión Europea y el Senado mexicano. 

 

Enhorabuena, que todo sea para beneficio de nuestros países.