Versión estenográfica del mensaje de la senadora Ana Lilia Rivera Rivera, presidenta de la Mesa Directiva del Senado de la República, en la XXX Reunión de la Comisión Parlamentaria Mixta México-Unión Europa.
Buenos días.
Compañeras, compañeros legisladores que integran la Comisión Parlamentaria Mixta México-Unión Europea.
Estimado eurodiputado Massimiliano Smeriglio, bienvenido, presidente de la Delegación del Parlamento Europeo de la Comisión Parlamentaria Mixta.
Comitiva de distinguidas y distinguidos eurodiputados que le acompañan.
A nombre de quienes integramos la Sexagésima Quinta Legislatura en el Senado de la República, les extiendo la más cordial bienvenida.
Asimismo, saludo con mucho cariño y respeto a nuestra embajadora Carmen Moreno Toscano, subsecretaria de Relaciones Exteriores, en representación de nuestra canciller Alicia Bárcena. Muchas gracias por estar aquí.
Tomo unos minutos para agradecer sobre todo a la senadora Freyda Marybel Villegas Canché, presidenta de la Delegación Mexicana en esta Comisión Parlamentaria, por su invitación para participar en esta importante ceremonia. Muchas gracias, senadora.
Amigas, amigos eurodiputados, quiero expresarles el gusto que representa recibirlos de nueva cuenta en nuestro país. Reconozco el gran esfuerzo que realizan para poder estar presentes en los trabajos de la Comisión, que se llevarán a cabo durante este día y el día de mañana en el Senado de la República.
Como sabemos, desde el siglo XVI la relación entre México y Europa ha sido muy compleja y rica. Las diferencias y los acontecimientos a lo largo de este tiempo, han creado una conexión profunda en aspectos culturales, sociales, políticos y económicos; sobre todo de encuentro, dejando una marcada huella en el desarrollo de nuestras identidades.
Si bien han existido momentos de diferencias en nuestra historia, podemos constatar la prevalencia de la construcción de puentes, que han derivado en los excelentes lazos que nos unen en la actualidad y que a su vez, son los cimientos para un porvenir común y próspero.
Los diversos retos surgidos en los últimos tiempos, producto de la reconfiguración geopolítica en el entorno global, sumados a las nuevas amenazas ocasionadas por la falta de soluciones a los problemas de las sociedades; se han visto reflejados en afectaciones a los sistemas democráticos y al Estado de Derecho.
En este escenario complejo, se agregan las catástrofes naturales cada vez más fuertes y severas, y otras circunstancias desafiantes que han generado que millones de seres humanos se vean obligados a dejar sus lugares de origen para buscar un futuro que les dé seguridad a ellos, a sus familias.
Como líder regional, para México es de gran valor escuchar las reflexiones, experiencias y acciones generadas en las instituciones de la Unión Europea que buscan ofrecer respuestas a las problemáticas antes mencionadas.
Reconocemos el lugar del privilegio que se le otorga al diálogo, la negociación y la buena política; ya que al confluir en estos espacios todas las ideologías y la pluralidad, sus integrantes anteponen la visión comunitaria para el bienestar de sus pueblos.
Es sabido que la Unión Europea y México, además de ser amigos, somos importantes socios en diversos ámbitos que integran nuestra agenda bilateral.
Hace más de 20 años, con la firma del Acuerdo Global, comenzamos una nueva era que ha generado resultados tangibles y puesto de manifiesto los valores compartidos y el respeto mutuo. Podemos mencionar con gran satisfacción, que hoy contamos con varios mecanismos consolidados para favorecer el diálogo político a fin de alcanzar acuerdos y establecer mayores compromisos en asuntos como la democracia y el Estado de Derecho, la protección de los derechos humanos, el desarrollo económico sustentable, la igualdad de oportunidades y la lucha contra la pobreza; además de hacer frente directo al flagelo social de la corrupción.
Todo ello, bajo las directrices de nuestra asociación estratégica, apoyada en su plan ejecutivo conjunto.
Amigas, amigos, eurodiputados:
Los poderes que conforman el Estado mexicano, nos encontramos muy interesados en la última fase para la ratificación del Acuerdo Global Modernizado. Entendemos las particularidades que presenta este proceso, ya que además de las cuestiones técnicas, cada país del bloque europeo tiene sus propias necesidades y observaciones sobre este importante instrumento.
Además de las diferencias de los tiempos que llevan sus respectivos procedimientos legislativos.
Gracias a este acuerdo, la Unión Europa y México consiguieron triplicar en las dos últimas décadas sus intercambios comerciales, alcanzando en 2022 más de 80 mil millones de dólares; cifra que ha posicionado al bloque como el tercer socio de México a nivel mundial y a su vez nos coloca, como su décimo tercer socio comercial.
Derivado del entorno de confianza y certidumbre hacia nuestro país, la Unión Europea es el segundo inversionista en México y es el segundo receptor de nuestras exportaciones, sólo por debajo de los Estados Unidos; lo que se traduce en importantes ingresos para estados como Tlaxcala, Chihuahua y Nuevo León, quienes son los tres principales exportadores de productos hacia territorio europeo.
Estos datos se podrían ver potencializados y traerían mayores beneficios para las poblaciones de ambas partes, con la puesta en marcha del Acuerdo Global.
Quiero reconocer la valiosa colaboración que realiza la Unión Europea para el desarrollo de sus socios externos con proyectos como la Estrategia Global Gateway, que da solución al déficit de financiamiento e impulsa inversiones transformadoras para la creación de infraestructura pública, que son claves para la economía del futuro.
En México, podemos mencionar de manera particular el apoyo brindado al Plan Sonora, el Corredor Transístmico, y otras iniciativas relacionadas con el manejo sustentable del agua, la protección costera, los océanos limpios y la protección de la biodiversidad. Además del transporte sostenible y el comercio digital.
Esto es una clara muestra de nuestra firme intención de transitar hacia economías verdes y resilientes para alcanzar el desarrollo verdaderamente sustentable que proteja al planeta y a nuestros pueblos.
Como presidenta del Senado mexicano, reconozco el trabajo que se ha realizado a lo largo de las 29 reuniones anteriores de esta Comisión Parlamentaria Mixta, que sin duda han enriquecido las relaciones regionales y bilaterales, por la relevancia de los temas que en ella se abordan.
Ustedes, los integrantes mexicanos y europeos de la Comisión Parlamentaria Mixta, han contribuido a una relación bilateral más sólida y cercana; son ejemplo de que la diplomacia parlamentaria acompaña e impulsa planes y proyectos para un futuro común, mejor, de que los mecanismos de cooperación parlamentaria funcionan y funcionan muy bien para nuestras naciones.
Compañeras y compañeros legisladores:
Estoy segura de que estas jornadas de trabajo serán muy fructíferas y enriquecedoras, pues con las aportaciones desde la esfera legislativa, podemos sumar al diálogo y revitalizar la relación entre Estados como la Unión Europea y México.
Sean nuevamente bienvenidos.
Mucho éxito en estas actividades y es un honor recibirlos en el Senado y recibirlas en el Senado de la República.
Muchas gracias.