Versión estenográfica del mensaje de la senadora Olga Sánchez Cordero, presidenta de la Mesa Directiva de la Comisión Permanente, en la inauguración de los Diálogos Parlamentarios “Seguridad Social, salud pública y depresión posparto”.  

 

Gracias, Ale. 

 

A Valeria, muchas gracias. Muchas gracias, Vale. A todas ustedes; a Vale Sumano también. 

 

En fin, esta tarde creo que es muy importante, porque trataremos un padecimiento que merece toda la atención del Estado, del Estado Mexicano: el de la depresión posparto. 

 

La depresión posparto en México es un problema ya de salud pública y así lo tenemos que analizar, que requiere mucho mayor atención, que genera problemas sociales, problemas familiares, que no está bien diagnosticado y, por ende, es subestimada esta depresión posparto; y, por ende, está desatendida.  

 

Esa es la dura realidad que da base a la iniciativa que ha motivado un proyecto que presenté, un proyecto de decreto para adicionar diversas disposiciones a la Ley Federal del Trabajo, a la Ley del Instituto de Seguridad Social, a la Ley de los Trabajadores al Servicio del Estado, a la Ley del Seguro Social en materia de depresión posparto. 

 

Esta mañana tendremos a mujeres y hombres especialistas que, desde sus responsabilidades públicas y con enfoque de política pública y atención clínica, nos brindará sus visiones y propuestas. 

 

Muchas gracias, muchas gracias a todas y a todos ellos. 

 

En especial al doctor Ricardo Cortés Alcalá, que es el Director General de Promoción de la Salud de la Secretaría de Salud y al doctor Juan Manuel Quijada, Director General de Servicios de Atención Psiquiátrica.  

 

Agradeciendo al mismo tiempo a mi querido Subsecretario, el doctor Hugo López Gatell, por su gran apoyo a estos esfuerzos en todo momento. 

 

Igualmente, muchas gracias a la doctora Aremis Villalobos, investigadora del Instituto Nacional de Salud Pública. 

 

Muchas gracias a la doctora Norma Angélica San José, Directora de Género y Salud del Centro de Equidad de Género y Salud Reproductiva de la Secretaría de Salud. 

 

Igualmente a la doctora María Asunción Lara Cantú, investigadora de INPRFM, con su presentación “Prevención de la depresión posparto”.  

 

Como ustedes ven, el panel es de máximo nivel, gracias a las y los especialistas presentes.  

 

En México, fíjense ustedes, se estima que entre un 13 y un 15 por ciento de las madres sufren de la depresión posparto; sin embargo, la OPS considera que hasta un 56 por ciento de mujeres sufren de este padecimiento hasta cuatro meses después del parto. 

 

Desafortunadamente, en nuestro país solo el 64 por ciento de las unidades obstétricas tienen cuidados de salud mental, y de éstas sólo un 37 por ciento cuenta con protocolos para la detección y sólo el 40 por ciento para la debida atención de esta depresión posparto. 

 

La OPS ha señalado que la depresión es uno de los trastornos causan mayor discapacidad en el mundo; de este tamaño es el reto y la necesidad de atenderlo, que nos estamos nosotros planteando. 

 

Este padecimiento de depresión posparto, tardó mucho tiempo en ser diagnosticado, debido a la idealización del embarazo, lo que demoró los estudios hasta los años 80’s, así que se tienen muy pocos años de estudio y de análisis de este padecimiento. 

 

Entre sus síntomas están la confusión, la culpabilidad, la incapacidad para atender las demandas de las y los recién nacidos. Todo esto agrava la situación.  

 

Esto tiene claros impactos potenciales, fíjense, en el buen desarrollo de los bebés, de las niñas o del niño, así como en la dinámica de violencia familiar al interior de las familias. 

 

En medio de la depresión posparto, las madres pueden llegar a descuidar su salud, generando problemas colaterales, tanto en el desarrollo físico como emocional de sus bebés, de sus hijos o de la hija, o de las hijas. Y todo esto somete a la madre a niveles de estrés extraordinarios; es un problema muy complejo. 

 

La depresión posparto mal cuidada, puede generar problemas por años en la dinámica familiar.  

 

Por todo ello, el Estado nexicano debe tomar acciones de mayor calado, y de ahí nuestra iniciativa, con base en las experiencias de éxito de las diferentes instancias responsables de la materia en el sector salud a nivel nacional. 

 

Muchas gracias a todas y a todos los especialistas nacionales y a la audiencia de especialistas, por acompañarnos esta mañana en esta importante sesión. 

 

Quiero también, ya por último, cerrar. La mujer no controla esta depresión posparto, ella la tiene y  no puede saber qué es lo que le está pasando, descuidando incluso a sus bebés, sintiendo culpabilidad y estar emocionalmente afectada. 

 

Todos los que son especialistas, todos los que han estudiado esta materia sabe que es una situación de la madre, de esta depresión posparto y que debemos atenderla adecuadamente. 

 

Muchas gracias.