Número-162

  • Necesario, llevar ante la justicia a aquellas personas que cometieron actos de tortura, ejecuciones arbitrarias o encarcelamientos clandestinos: senadores del PT.


Hoy más que nunca, la paz y la reconciliación en el país requieren del acceso efectivo a la justicia y a la verdad que los familiares de las víctimas de la época de la “Guerra Sucia” aún reclaman, expresaron la senadora Geovanna del Carmen Bañuelos de la Torre, y los senadores Miguel Ángel Lucero Olivas y Joel Padilla Peña, del PT.


Por tal motivo, a través de un punto de acuerdo, los legisladores propusieron exhortar a diversas autoridades a mantener un diálogo abierto y actuar en coordinación, para brindar acceso efectivo a la verdad y a la justicia de los familiares de las víctimas de la denominada Guerra Sucia en México.


Plantearon que dichas acciones se lleven a cabo entre la Comisión por el Acceso a la Verdad y el Esclarecimiento Histórico y Justicia a las Violaciones graves a los Derechos Humanos cometidos entre los años 1965-1990, la Secretaría de la Defensa Nacional, la Fiscalía General de la República y la Comisión Nacional de Derechos Humanos.


Asimismo, en el documento enviado a la Primera Comisión de la Permanente, solicitaron a la Fiscalía General de la República un informe acerca de las carpetas de investigación existentes por los crímenes cometidos entre los años 1965-1990, por acciones realizadas por elementos de cuerpos de seguridad del Estado mexicano y servidores públicos.


También plantearon que la Comisión por el Acceso a la Verdad realice informes periódicos sobre los avances en las investigaciones de los delitos cometidos por elementos de cuerpos de seguridad del Estado mexicano y servidores públicos durante la época mencionada.
 
Precisaron que, de acuerdo con información publicada por un medio de comunicación, un informe de la entonces Procuraduría General de la República indica que, del 1 de enero de 1969 al 13 de septiembre de 1999, se registró la desaparición forzada de 480 personas en 17 entidades de la República; y que, en el 62 por ciento de los casos, estuvieron involucrados elementos del Ejército mexicano.
El reporte, subrayaron, agrega que 29 de las desapariciones ocurrieron en el estado de Guerrero, 44 en el Distrito Federal, 38 en Jalisco y 26 en Sinaloa.
De igual forma, aseveraron, brinda evidencia de la filiación política de las víctimas de la Guerra Sucia, quienes pertenecían a organizaciones como la Asociación Nacional Revolucionaria, las Fuerzas Armadas Revolucionarias, la Liga Comunista 2 de Septiembre, las Fuerzas de Liberación Nacional, el Comando Armado del Pueblo o la Vanguardia Armada Revolucionaria.
Por tal motivo, puntualizaron, es necesario que las autoridades den resultados en la materia y que se realicen las investigaciones, que lleven ante la justicia a aquellas personas que cometieron actos de tortura, ejecuciones arbitrarias, encarcelamientos clandestinos y desapariciones forzadas en México, durante la Guerra Sucia.